Una eliminación de Champions que comenzó en el sótano de casa: un Hojlund fuera, dos Hojlund dentro

En el sótano de la casa de los Hojlund, al norte de Copenhague, existe un pequeño campo de fútbol cubierto en el que los tres niños de la familia (Rasmus, Oscar y Emil) disfrutaban sin parar del fútbol. Varios años después los hermanos cambiaron la parte baja de su hogar por los estadios de la Champions League y el sorteo deparó que Manchester United, equipo de Rasmus, y el Copenhague, al que pertenecen Emil y Oscar, se enfrentarán entre sí.

El grupo regaló una de las mayores sorpresas de esta edición. El conjunto danés logró 'cargarse' al Manchester United y alcanzar los octavos de final por primera vez desde la temporada 2010-2011. Por su parte, el conjunto dirigido por Erik Ten Hag continúa con su caída libre. En clave Hojlund, los 'pequeños' de la casa, gemelos, derrotaron al hermano mayor.

La única pena fue que no pudieron coincidir en el terreno de juego. Estuvieron a punto de conseguirlo en Old Trafford, pero Rasmus fue cambiado en el minuto 86, mientras que Oscar saltó al campo en el último minuto. Aún así, ambos hermanos se encontraron en zona mixta cuando el delantero de los red devils interrumpió la entrevista post partido de Oscar y comentó que era "magnífico" compartir esta experiencia con uno de sus hermanos.

Anders Hojlund, padre de los tres, fue la gran inspiración para los hermanos puesto que también fue futbolista en Dinamarca. Una pasión heredada clave en el gran ambiente que siempre se respiró en la familia. "El fútbol lo ha llenado casi todo en nuestras vidas. Algunos dirán que ha sido demasiado, pero ha sido nuestra unión con nuestros hijos. El interés y la pasión de todos", señala este octubre el patriarca de los Hojlund para The Athletic.

Y esa ilusión por el balompié comenzó en el sótano mencionado. Un 'mini' campo, de unos 10 metros de largo y seis de ancho, que diseñó Anders después de ver que los partidos entre hermanos se habían vuelto demasiado "rebeldes" para el salón. Una competitividad desde temprana edad que nunca ensombreció la gran relación entre ellos. "Les encanta que al otro le vaya bien. Se alegran mucho el uno por el otro y se apoyan mucho en ese sentido", comentaba para el medio británico Alfred Johansson, entrenador del sub 19 del Copenhague, que vivió muy de cerca la progresión de los Hojlund.

La prueba del buen rollo que tienen es una anécdota que revelaba Anders de los cumpleaños de Rasmus Hojlund. "Rasmus podía ser especialmente protector con los gemelos cuando eran pequeños. Cuando llevaba tarta al colegio para sus compañeros el día de su cumpleaños, guardaba dos trozos. Eran para Emil y Oscar ya que no quería que se quedaran sin probarla".

Rasmus Hojlund ha vivido un ascenso meteórico en las últimas dos temporadas. Del equipo de la capital de Dinamarca pasó a la Atalanta y, este verano, ha firmado por uno de los grandes equipos de Europa como es el Manchester United. Por su parte, los gemelos Oscar y Emil alternan la primera plantilla con el equipo sub 19 de los Byens Hold, aunque Johansson considera que los gemelos están por encima del hermano mayor. "Si los comparas con Rasmus a la misma edad, estaban un poco más avanzados en lo que se refiere a los aspectos técnicos y tácticos del juego".

La familia Hojlund ha logrado el sueño que cualquier niño quiere lograr, alcanzar el fútbol profesional junto a sus hermanos. Aunque nunca han tenido la oportunidad de jugar juntos, algo que su padre lamenta, este deporte es caprichoso y es posible que los daneses se reúnan en otra ocasión en el mismo terreno de juego o, incluso, en el mismo vestuario.