M. CITY 1 (3) - REAL MADRID 1 (4)

Lucas Vázquez repite ante el Manchester City el gesto que enamoró al madridismo

El canterano blanco afrontó la tanda de penaltis con una tranquilidad que ya mostró en la final de la Champions de 2016.

Lucas Vázquez se funde en un abrazo con Toni Kroos después de superar al City en la tanda de penaltis./AFP/PAUL ELLIS
Lucas Vázquez se funde en un abrazo con Toni Kroos después de superar al City en la tanda de penaltis. AFP/PAUL ELLIS
June Lavín

June Lavín

El Real Madrid se enfrentará al Bayern de Múnich en las semifinales de la Champions League. Lo hará después de imponerse al Manchester City de Pep Guardiola en una tanda de penaltis agónica que ya es historia de la máxima competición continental. Entre otras cosas, por las paradas de Lunin, la valentía de Rüdiger con el último lanzamiento... y la tranquilidad de Lucas Vázquez. No sorprende. Ya protagonizó unas imágenes similares en la final de 2016 frente al Atlético de Madrid, cuando puso a rodar el balón sobre su dedo índice. Lo volvió a hacer en el Etihad. Con el mismo resultado.

Bajo la atenta mirada de miles de aficionados del Manchester City, también del Real Madrid, Lucas Vázquez no dudó. Ingresó en la segunda mitad, ayudó, incansable, en el costado derecho y volvió a aplicar su ley desde los once metros. En un escenario completamente diferente al de 2016, pero con la misma tranquilidad y un único cambio: el canterano blanco dio dos toques a la pelota antes de respirar hondo y superar a Ederson. "Queremos la Champions", dijo tras el partido en el Etihad. Y, ahora, esas palabras resuenan todavía con más fuerza. Lo mismo pronunció el 17 de marzo de 2021, en una orejona que acabó levantando el club blanco.

Rebasados los 100 minutos de juego, en concreto en el 102, Lucas Vázquez ingresó por Vinicius, fatigado. Lo hizo con un objetivo claro: sostener al equipo, ayudar a Carvajal y castigar al contragolpe. La premisa estaba clara, quién sabe si pensando, a la larga, en los penaltis. Cuando Daniele Orsato decretó el final de la segunda parte de la prórroga, el Madrid se creció. Y Lucas lo afrontó con tranquilidad. También con una 'chulería' desafiante.

Mismo ritual que en la final de 2016

No es la primera vez que Lucas Vázquez 'enamora' al madridismo con su tranquilidad. En momentos de máxima tensión, cuando ni sus propios compañeros son capaces de mirar, el 17 responde. Ya lo hizo en la final de la Champions de 2016 ante el Atlético. Hace ocho años, el canterano blanco fue el primero en lanzar. Anoche, el tercero. Con la presión del fallo de Modric, apareció.

El propio Lucas ya lo resumió, fácil, en una entrevista a Marca: "Me acerqué al segundo de Zizou y le dije que quería tirar. En ese momento estaba seguro de que lo iba a meter. Pensé que lo quería tirar porque estaba seguro de que lo metería. Y no me equivoqué". Sobre su tranquilidad y juegos con el balón, poniéndolo a dar vueltas en su dedo índice, aseguró: "Salió de forma natural. No era consciente de lo que hacía. Lo único que intenté era concentrarme".

Este curso, en un rol más de revulsivo que de protagonista, suma 1.380 minutos de juego en los que ha anotado un gol y repartido cuatro asistencias. "Queremos la Champions", reconoció Lucas tras la balsámica victoria en el Etihad ante el vigente campeón. No será tarea sencilla, pero el 17 lo tiene claro. El Bayern de Múnich, siguiente escollo.