M. CITY 1 (3) - REAL MADRID 1 (4)

Los secretos de la tanda de penaltis del Real Madrid en el Etihad: el papelito de Davide, el rol de Modric y un "quédate quieto" clave

El equipo de Ancelotti volvió a hacer historia en el Etihad gracias a una tanda final para el recuerdo.

Rüdiger, ante el Manchester City./AFP
Rüdiger, ante el Manchester City. AFP
Rodra P

Rodra P

Manchester-. Una noche para siempre bajo el cielo de Mánchester. En un día atravesado por los aficionados del Real Madrid, en el que hasta salió el sol en la ciudad británica. El equipo de Carlo Ancelotti y los milagros estalló de júbilo tras eliminar en la tanda de penaltis al City de Pep Guardiola, con el chut final de Antonio Rüdiger hacia la derecha de Ederson. La tanda tuvo mucha historia.

El árbitro pitó el final del partido tras la prórroga, con los dos conjuntos extasiados, y dos escenas opuestas. Mientras en el Manchester City los jugadores y el staff técnico hacían piña, en el Madrid parecía que cada uno iba por su lado. Sin juntarse, con charlas aisladas y todos buscando su hueco. Pero alguien guio la estrategia para los lanzamientos.

Fue Davide, el hijo y segundo de Ancelotti, que tenía un papelito con las pistas. Él dio los nombres de los lanzadores. Y eso que Llopis es la figura dedicada en el Madrid para el estudio de los penaltis: tanto para los lanzadores como para los porteros. "Muchos querían lanzar", dijo después ante la prensa Carlo Ancelotti, aunque hubo un futbolista que se descartó. El Real Madrid había tirado siete penaltis este curso, y había fallado cuatro en la tanda de penaltis.

Ancelotti, tras el partido contra el City.

Éder Militao alzó la voz para comentarle a Davide Ancelotti que sería mejor que él no pateara desde la tanda. Por una razón. Ederson y él son compañeros en la selección brasileña, y el meta le conocía. Entre el resto, Davide fue decidiendo en función de la confianza y la calidad para golpear.

Luka Modric, Jude Bellingham, Lucas Vázquez, Nacho y Antonio Rüdiger, los elegidos. Sin embargo, la clave estuvo en Andriy Lunin. El héroe compartido con Rüdiger, que vivió su gran noche en el templo del Etihad. Las estadísticas le acompañaban antes de llegar al momento cumbre: el ucraniano estaba siendo el MVP del duelo, y en toda su carrera había parado ocho penas máximas de diecisiete.

El consejo de Modric y la decisión de Lunin

Aparte de la estadística, el consejo de Luka Modric. Fue el futbolista en el que se apoyó justo antes de arrancar la tanda. Se dieron confianza y calma para que todo saliese por el lado bueno. Pero la clave estuvo en una charla con Llopis. El entrenador de porteros blanco le dijo a Lunin que en uno de los penaltis se quedase quieto. Sin especificar en cual. Se lo comentó así, según cuentan desde el vestuario: "Tenemos tres jugadores que sospechamos que pueden tirar al medio. Pero quédate quieto sólo en un lanzamiento".

Y Lunin, de tres opciones, se quedó parado en el disparo de Bernardo Silva. Y acertó. Un 33% de posibilidades que el ucraniano supo medir. Lo clavó. Una noche para la historia de su vida y del Real Madrid. En el vestuario todos celebraron el triunfo con bailes y saltos, menos una persona, que se quedó quieto también, sentado con el móvil. También fue Lunin.