Luis Enrique tiene un triplete en la mente y una renovación rondando los despachos del PSG

Corren tiempos felices en la capital de Francia. Luis Enrique (53 años) encabeza un proyecto ganador que este miércoles disputará unas semifinales de Champions League contra el Borussia Dortmund. En lo que va de temporada ya han cantado el alirón en la Ligue 1 y la Supercopa francesa y solo les separan cuatro victorias de celebrar un triplete, pues también están clasificados para la final de la Copa de Francia. Ante un curso tan agraciado como este y la excelente gestión de la plantilla, que no ha sido tarea sencilla, por la planta noble del club parisino ya ronda la idea de alargar la vinculación del asturiano al PSG.

Como adelantó L'Equipe y ha podido confirmar Relevo, el Paris Saint-Germain valora positivamente la posibilidad de renovar el contrato de Luis Enrique que, rubricó con su firma un documento con fecha de caducidad en junio de 2025. En su momento, aceptar el puesto de técnico por dos años fue un acierto, pues se evitaba romper una vinculación más extensa en caso de no sentirse adaptado o no tener los resultados esperados.

Por suerte para ambas partes ese no ha sido el caso, al menos por ahora, y Luis Enrique no romperá su contrato, algo que odia, hasta el 2025. Este curso las expectativas puestas en el asturiano eran muy altas y las ha cumplido con creces. El exseleccionador nacional tiene al equipo clasificado a semifinales de Champions y opta a todo esta temporada. Además, ha sabido manejar casos difíciles como la inicial ruptura entre Mbappé y el PSG y su posterior gestión de minutos una vez se dio a conocer de manera oficiosa su salida una vez concluya este curso.

Los máximos mandatarios del club ven en él un hombre fuerte sobre el que construir un proyecto a futuro muy distinto al de otros años en París. Esta vez la plantilla, obviando a Mbappé y Dembélé, no está tan marcada por individualidades como pasó en la época de Ibrahimović, Neymar o Leo Messi. Esta vez hasta su estrella principal ha dejado de tener tanto protagonismo en los partidos ligueros. Las ausencias de Mbappé han dado paso a proyectos futbolísticos que se han convertido ya en una realidad como Zaïre-Emery o Barcola.

Además, Luis Enrique ha sabido explotar a futbolistas como Vitinha que está firmando una temporada excelente o el propio Zaïre-Emery ya mencionado anteriormente. Estos son los principales argumentos que generan en la dirección deportiva del club el interés de asegurarse más años del asturiano en el área técnica. Por eso, en el Parque de los Príncipes ronda la idea de ofrecer un nuevo contrato al que fuera el entrenador del Barça, que apeó a los parisinos en la famosa Champions de 2017 con un 6-1 en el Camp Nou.

Eso sí, si hay una máxima que las partes van a respetar a la hora de abordar una posible ampliación: los tiempos. Como ha podido saber Relevo, no hay prisa por cerciorarse de la continuidad del asturiano una vez pasado el año 2025. Ahora lo importante es cerrar la temporada de la mejor manera posible. Nadie olvida que son cuatro victorias las que separan al PSG de celebrar un triplete este año.

Tanto la directiva, como el entrenador y su cuerpo técnico se encuentran viviendo un momento muy dulce en París. No hay otra cosa que pase por la mente de los implicados que el partido de semifinales contra el Dortmund. "Relax, la fiesta empieza mañana", sentenció Luis Enrique en una entrevista con Canal +. Como es costumbre entre el entorno del asturiano, las cosas se harán con calma y una vez finalice la temporada para echar la vista atrás y tomar como referencia lo conseguido antes de decidir sobre la que está por venir.

La última vez que Luis Enrique y su cuerpo técnico se encontraron ante una situación similar fue con la Selección Española. El asturiano y los suyos se esperaban una realidad completamente distinta a la que vivieron. Lo primero, creían que la RFEF les ofrecería una propuesta orientada a seguir al mando del combinado nacional una vez finalizado el Mundial de Catar 2022. Algo que no ocurrió.

La Federación les comunicó que no harían ninguna oferta para prolongar ese vínculo. En el caso de haberla recibido, la intención pasaba por sopesar la decisión teniendo en cuenta los resultados cosechados en su etapa a los mandos de La Roja. Como esa situación no llegó a ocurrir, tras tomarse un merecido descanso, comenzó la búsqueda de un nuevo destino. Se tanteó la Premier League, uno de los sueños del asturiano, y la Serie A, pero el destino quiso que los caminos del PSG y Luis Enrique se cruzasen. Está por ver la duración de esa relación exitosa.