Barcelona y Atlético se juegan la plaza del Mundial de Clubes... y el Barça lo tiene negro

Atlético de Madrid y Barcelona se juegan mucho más que la clasificación para los cuartos de final en esta jornada de Champions. En el horizonte, una de las dos plazas que quedan por entregar para el próximo Mundial de Clubes, que supone una auténtica revolución en relación al modelo actual (hay otra reservada para el campeón). Ocurra lo que ocurra, uno de los dos españoles será agraciado con el billete y lo más probable es que sea para el equipo de Simeone.

Antes de la disputa de la vuelta de los octavos de final de la máxima competición continental, el Atlético de Madrid suma 62 puntos, frente a los 56 del Barcelona. El Barça ha logrado el pase, por lo que su disputa seguirá abierta al menos una ronda más. De hecho, no quedan tantos puntos en disputa. De hecho, solo 15 por repartir. Estos, en concreto:

El Barça, que estaba a siete puntos, ya recortó uno en la ida de octavos de final, por empatar en el Diego Armando Maradona mientras el Atlético de Madrid perdió su partido frente al Inter. ¿Qué tendrían que hacer ahora los de Xavi para darle la vuelta? Las posibilidades son muchas, pero el escenario más sencillo ya de por sí es difícil. Si los rojiblancos también pierden contra el equipo de Inzaghi en la vuelta (y, por tanto, caen eliminados) y los blaugranas logran ganar y pasar (lo que ha sucedido), se acercarían a solo tres puntos.

De ese modo, el Barcelona seguiría vivo en la competición y no el Atlético. Les separaría una distancia casi simbólica, pero no tan sencilla de remontar. Los de Xavi necesitarían ganar los dos partidos de cuartos de final o ganar uno y empatar el otro. Así, lograrían el pase a semifinales, por lo que obtendrían un punto adicional que ya les permitiría superar a su rival. No será tarea fácil en un sorteo en el que les esperan el Paris Saint Germain, el Bayern de Múnich, el Real Madrid o el Manchester City.

En el supuesto anterior puede ocurrir que el Barcelona gane la ida y pierda la vuelta de cuartos, pero que le valga para pasar a semifinales. En ese caso, a la espera de la disputa de las semis, estaría empatado a puntos con el Atlético de Madrid. FIFA recoge como principal criterio de desempate el equipo que haya hecho una mejor temporada en el período de clasificación: las temporadas 2020-21, 2021-22, 2022-23 y 2023-24. En caso de empate, el que tuviera el mejor registro más reciente. En el improbable supuesto de que continúen las tablas, ya se decidiría por diferencia de goles.

El Atlético de Madrid se despidió en fase de grupos la pasada campaña, llegó a cuartos en la 2021-22 y perdió en octavos en la 2020-21. El Barcelona también perdió en el grupo de la 2022-23, al igual que en la ronda anterior. En la 2020-21, se despidió en los octavos. Es decir, si los blaugranas acaban alcanzando las semifinales probablemente lograrán el mejor registro y avanzarían en caso de empate.

La eliminación del Leipzig aseguró la clasificación del Borussia Dortmund, que se suma a los ya clasificados Manchester City, Real Madrid, Bayern de Múnich, Chelsea, Paris Saint Germain, Inter, Oporto y Benfica. Quedaban, por tanto, tan solo dos plazas para los equipos europeos. Una de ellas está asegurada para Atlético o Barcelona, que no pueden ser superados por ningún país que no cuente ya con dos clasificados para la competición.

Una de las principales restricciones de este nuevo Mundial de Clubes es que cada país puede contar con un máximo de dos participantes, a no ser que más de dos de una misma nación ganen la competición. Las plazas se reparten en cuatro para los campeones de las cuatro últimas ediciones y ocho para los mejores clasificados de un ránking que FIFA y UEFA improvisaron a mitad de camino y que solo tiene en cuenta los resultados de Champions. Algo que afectó especialmente al Villarreal, que ve cómo pierde un suculento botín aún por confirmar.

Además de la plaza de los españoles, la restante será para el campeón de la competición si no tenía ya un sitio asegurado. La que quedaba por decidir ya es de la Juventus, que ya tiene garantizado ser el segundo mejor equipo italiano. De este modo, se quedará un elenco de estrellas para una nueva y atractiva fórmula que sobrecargará aún más el calendario, pero dejará partidos del más alto nivel tras el final de temporada.

Esta misma jornada se podía garantizar una plaza para Juventus o Atlético por lo que ocurriese en la eliminatoria entre Barcelona y Nápoles. La 'Vecchia Signora' lo ha logrado porque el Barça ha pasado a cuartos. También existe la posibilidad de que cierre su participación el Salzburgo, pero su caso es más complejo: necesita la eliminación de PSV y Arsenal, que son los dos posibles campeones de la competición que no gozan ya de plaza por sus méritos en los últimos años. Pase lo que pase, el Barça no puede asegurar ya el billete y deberá seguir avanzando en la Champions para optar a él.

A diferencia del modelo actual, el nuevo se disputará en verano, contará no solo con los campeones, sino también con otros muchos aspirantes y será cada cuatro años y no anual. FIFA ya ha confirmado que esta nueva edición se estrenará el próximo 15 de junio de 2025 y concluirá el 13 de julio, como si de un Mundial de selecciones se tratase.

El formato comenzará con una fase de grupos compuesta por ocho grupos de cuatro equipos por cada uno, con el habitual formato de todos contra todos a un solo partido en sede central (en este caso, en Estados Unidos). Los dos mejores equipos de cada grupo lograrán la clasificación para los octavos de final. Ahí se enfrentarán entre sí en eliminatorias directas a partido único, con prórroga y penaltis. No habrá batalla por el tercer y cuarto puesto.