Una noche de Champions y reventa en el Santiago Bernabéu: estafas, entradas duplicadas, 'ghosting', tarjeta de visita y 'gol' en el último minuto

Las dos horas previas a un partido de Champions League en el Bernabéu tienen de todo. Por un lado, aficionados que acuden al recibimiento del equipo, otros que optan por tomar algo en los alrededores, los que compran bufandas, los que van a la tienda oficial, los que tienen suerte y se meten en el VIP para comer y beber todo lo que pueden... pero también están aquellos y aquellas que pasan por la ventanilla de la puerta número 6 del estadio madridista, donde atienden las reclamaciones de aquellos que no son socios del club.

A esa ventanilla, en la cual atienden unas seis u ocho personas, llegan sobre todo personas que han sido estafadas con las entradas, que llegan a los tornos y su entrada no funciona porque es 'fake' o porque está duplicada y ya entró alguien con ella. La mayoría, extranjeros. No todos van a ver al Real Madrid, en este caso algunos también querían venir a ver al Arsenal. Hay muchos casos diferentes, de todo tipo.

Dos de los primeros en acercarse a la ventanilla, hora y media antes del encuentro, son unos chavales que llegaron desde Burgos para ver el choque y habían comprado las entradas por la plataforma Milanuncios a 150 euros cada una. Les habían mandado un documento con el cambio de nombre pero ese documento no era real y cuando intentamos llamar a los números de teléfono con los que había hablado, ambos estaban apagados. Las dos personas, que no querían salir en cámara, afirmaban que "estaban decepcionados pero que sabían que les podía pasar" y terminaron viendo el partido en un bar porque no estaban dispuestos a pagar los 500 o 700 euros que pedían los revendedores en la puerta del estadio.

Una de las plataformas con más tirón en los últimos años, y sobre todo en el extranjero, es StabHub. Una familia de tres personas que llegaron desde Nueva York se gastaron 600 euros en cada entrada compradas por la plataforma, pero nunca les llegaron. Tampoco querían dar la cara, pero contaban que en Estados Unidos e Inglaterra es una plataforma muy famosa, que ellos han comprado entradas para partidos de béisbol allí y de la Premier League en Inglaterra y nunca habían tenido problemas. Las caras de decepción intentando contactar con la plataforma eran más que evidentes y de ninguna manera iban a comprar una localidad en la reventa en la puerta del estadio.

Otros tres aficionados extranjeros, en este caso llegados desde Bulgaria, utilizaron TicketSwap para comprar las entradas para el Real Madrid-Arsenal y fueron a la puerta número 6 a reclamar que el torno no pasaba. "Son entradas duplicadas", nos confirmaban. Y a la pregunta de cuánto habían pagado por ellas, responden: "400 euros por cada una". Otro timo.

Una cuarta plataforma, Seatsnet.com. Dos aficionados que llegaron desde Israel para ver el partido pagaron 400 euros por cada entrada y con el duelo empezado, estaban en la puerta 6 buscando alguna solución. "Hemos pagado pero no nos mandan las entradas", nos cuentan mientras mandan mensajes de Whatsapp a un contacto que, evidentemente, dejó de contestar una vez recibió la cuantiosa cifra en su cuenta.

La estafa también comienza de manera virtual y finaliza de manera presencial. Dos aficionados de Estados Unidos estaban de vacaciones en Barcelona y decidieron ir a ver el partido del Bernabéu. Encontraron dos entradas con la condición de pagar la mitad de manera virtual y la otra mitad de manera presencial en la esquina de la puerta número 6 del estadio. Esperaron varias horas pero nunca llegó ese contacto y los 360 euros de las dos entradas se esfumaron de un plumazo.

No sólo los que quieren ver al Madrid son estafados, también los del equipo visitante. Un aficionado consiguió una entrada en la zona visitante pero sin el cambio de nombre. Normalmente, la seguridad no comprueba si es el mismo pero esta vez lo hizo. Vestido con su camiseta del Arsenal, este aficionado nos explica que se ha gastado más de 600 euros entre entrada, vuelo y hotel... para no entrar al estadio: "Aquí no valía el ticket digital, tenía que ser de manera física. Tienes que presentar documentación y la entrada, que coincidan. No pasa nada, iré a París a ver el partido contra el PSG", nos decía confiados antes de certificar el pase a semifinales su equipo.

Mientras todo esto que les hemos contado ocurre, la solución de las personas que trabajan en la ventanilla de la puerta número 6 no es otra que decirles que todas las entradas compradas en plataformas no valen, que lo único que vale es lo adquirido en la web oficial del club. "El QR, el QR, enséñame el QR", pide siempre el miembro de la seguridad privada del club, en español por supuesto, por lo que los aficionados que sólo hablan inglés no entienden nada.

Entonces, decenas de personas se quedan en los alrededores con su móvil buscando entradas en la web, que desaparecen pronto. Pero de repente, uno tiene suerte. Evander, de Inglaterra, vestido con la camiseta del Madrid, consigue entrar al sistema a las 20:57 y comienza a rellenar los datos para comprar una entrada en la puerta 42 que le cuesta 318 euros. Con nuestra ayuda, porque no entiende español, completa todos los datos y recibe en el correo electrónico el mail del Real Madrid y le ayudamos a conseguir descargar el QR con la deseada entrada pero no sabía dónde estaba la puerta, recorremos medio estadio y por fin llegamos a la puerta 42 y el aficionado entra con el partido ya empezado y con 318 euros menos.

El caso de Evander es aislado, la gran mayoría no consigue entrada y se queda, móvil en mano, viendo el partido a las afueras del Bernabéu. Otros se acercan a las zonas VIP, donde hay teles: "Queremos ver el partido aquí por el ambiente, no tengo dinero para ver el partido dentro, nunca he visto un partido en el Bernabéu", explica uno de los chavales que espera un gol del Real Madrid que no llegaba.