Así se ve al Real Madrid campeón por los rivales: "Me fijaba en mis jugadores al lado de los suyos y pensaba 'menudas bestias'"

Ambos equipos se cruzaron en el túnel de vestuarios previo al calentamiento. Todo tenía tintes de normalidad rutinaria en LaLiga salvo por un motivo: el rival al que se enfrentaban aquel día presentaba unos corpachones propios de un grupo de atletas, preparados para empezar a correr, saltar y sortear cualquier obstáculo que se les presentase. El Real Madrid de Ancelotti ha sido el campeón de Liga y, en gran medida, lo ha hecho amparado en un físico al que ningún rival alcanza. "Cuando pasaban sus jugadores al lado de los míos, que son tipos de élite, pensabas... uf. Vaya bestias", explica el segundo entrenador de un equipo de LaLiga a Relevo.

Federico Valverde, Vinícius Jr, Antonio Rüdiger, Ferland Mendy, Rodrygo, Eduardo Camavinga, Aurelién Tchouaméni o Jude Bellingham le dan al Real Madrid una ventaja condicional absolutamente incontestable en el día a día liguero. "Es el equipo que más me ha condicionado en este apartado. Son atletas. La condición física es mejor que la de cualquier equipo y han llegado al tramo final en un momento brutal porque incluso con la segunda unidad ganan partidos", explica otro técnico de LaLiga a Relevo.

Nadie tiene más jugadores que corran a más intensidad, de forma más continuada, que el Real Madrid, que repite esfuerzos con mucha facilidad, algo que a ratos confiere una pátina de cierta dejadez, como si el partido no fuese con ellos. "Si ves los datos físicos, asusta. Son el mejor equipo en ese apartado", cuenta un analista.

Carlo Ancelotti es un técnico contracultural, alguien que no se pliega ante modas ni busca copiar y pegar formatos que funcionen, sino que obedece como un viejo maestro a un instinto primario que le lleva a darle mucha libertad al jugador. ¿Sorprende que el Real Madrid haya sido la mejor defensa de LaLiga sin tener una presión dominante ni un bloque medio de acero? A pesar del ton o físico exhibido, el Real Madrid no ha destacado en la etapa de Ancelotti por presionar de forma eficiente. "Carlo vio que con el rombo, los recorridos para sus interiores eran demasiado exigentes y fue muy hábil al pasar al 4-4-2, confiando en Mendy en ese lateral izquierdo y defendiendo mejor la profundidad. Algo cambia tras la derrota en el Wanda", explica un técnico a Relevo.

Con ese 4-4-2, Ancelotti fue capaz no solo de defender de una forma más coherente el ancho del campo, sino que forzó al rival a adaptarse sobremanera a los dos descolgados que dejaban en el centro del campo. La ausencia de Benzema y la aparición de Jude Bellingham cambió el rostro de los blancos, pero no su destino definitivo: la gracia del técnico italiano ha sido el de embalsamar al talento de un hábitat propicio para que brille. Sin Karim, que pese a ser un delantero centro difuminaba los contornos de la posición, Bellingham ha acentuado la tendencia blanca a jugar sin una referencia, desnudando el centro del ataque para transformarlo en un caos de ritmo, regate y paredes.

Así lo cuenta un entrenador español, rival de Ancelotti en LaLiga: "Ha querido juntar a los mejores y para ello este es el mejor sistema. Tuvimos muchos problemas, y eso de no tener referencia para defender a delanteros nos hizo daño, ese dinamismo con Bellingham y los laterales altos les funciona, tienen a mucha gente que llega, y que no están. Tenía dudas, pero lo ha manejado muy bien. Es un equipo impresivible". En una Liga donde la mayoría de conjuntos (salvando a rarezas como el Girona) son analizables de una forma racional, entrando dentro de los prismas posicionales en los que se computa la mayoría del juego, el Real Madrid sobresale por otros derroteros, obedeciendo a una lógica distinta, funcional, una palabra acuñada hace poco por un tuitero brasileño y que cada vez más está calando entre los profesionales. "Es el equipo que más registros maneja, a veces la sensación es que les da un poco igual si recuperan rápido o no, si te presionan o no. Juegan con mucha calma", explica a Relevo un ex entrenador de LaLiga.

Una de las claves tácticas ha sido el enorme desempeño de Kroos, que no solo ha excedido en su nivel, sino que ha compensado la ausencia de Luka Modric en el once titular por primera vez desde su llegada en 2012. El alemán ha sido el termómetro blanco, siendo el jugador del campeonato que más pases que rompen líneas ha repartido (427), 41 más que cualquier otro jugador, con el 86% de acierto en este tipo de envíos, de largo el mejor porcentaje de todos. Una máquina de procesar y ejecutar información en un equipo de velocistas y jugadores hiper técnicos, de caderas escurridizas.

"Lateralizado es muy difícil de contrarrestar, porque te juega en corto o en largo, alternando sus desplazamientos, y eso le da mucha riqueza al juego del Real Madrid", comenta un entrenador. Otro analista añade que para frenar a Kroos, la idea es no darle tiempo. "Si permites que reciba, te gira el juego y te anula la presión. Es letal. Ante una recuperación suya, la idea es emparejarse, sin darle tiempo y tratar de acosarle. Es muy difícil". Al haber añadido a más jugadores dentro, pasando de tres a cuatro centrocampistas, y con Bellingham en el lugar de Benzema, el reto ha cambiado para los rivales. "Estás pendiente de la movilidad que le meten por delante de la pelota, te estresan, y eso hace que Kroos pueda jugar de cara y mover los hilos", añade otro técnico.

Ha habido espacio para las sorpresas, algunas de sensibles, como la de Lunin, y otras más esperables, pero no por ello menos relevantes, como la de Antonio Rüdiger. Rendimientos individuales sobresalientes que han narrado la temporada de los de Ancelotti en Liga. "Se pueden permitir el lujo de no estar demasiado organizados y dejar a Rüdiger en un 1x1 a campo abierto sin que les penalice", comenta un segundo entrenador a Relevo. "Ante nosotros, Lunin hace dos grandes paradas estando 1-0 que son diferenciales. Me ha sorprendido mucho el ucraniano porque nadie esperaba este nivel", recalca. De entre todas las sorpresas, un entrenador destaca la suya en directo: "Camavinga. La facilidad que tiene para recorrer campo, su elasticidad y cómo siempre llega a todos los sitios. Me impactó la primera vez".

Con la marcha de Kroos se abre un escenario nuevo. Un Real Madrid distinto, con más vértigo y presumiblemente, menos control que el de este curso. Se sustituirá a Kroos por Mbappé, cediendo parte del juego templado, de secuencias más masticadas, a uno más abierto y de dentelladas poderosas. "Va a ser un equipo diferente, pero han hechou n gran trabajo para que las bajas de Kroos y en un futuro, Modric, pesen menos, aunque son jugadores insustituibles", cuenta un técnico. Con todo, solo el Atlético de Madrid les ha logrado vencer (3-1), siendo además (junto a Rayo Vallecano) el único equipo del campeonato que les ha alejado de la victoria en ambos partidos.

Con la final de la Champions League como colofón, Carlo Ancelotti podría sumar su tercer doblete desde que está en el Real Madrid (Copa y Champions en 2014 y Liga y Champions en 2022), ampliando una etapa que a todas luces ya es muy exitosa. "Admiro a Ancelotti y nunca se ha quejado, a pesar de tener muchas lesiones y contratiempos incluso dijo que no hacía falta fichar a un central en invierno. Metió a Tchouaméni y le salió, y tiró con lo que había. Tiene mucho mérito", cierra un entrenador.