CASO RUBIALES

El golpe sobre la mesa de la Fiscal 24 horas después de interrogar a Rubiales

Marta Durántez, Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional, ha compartido su informe final en el que se reafirma en la comisión de dos delitos de agresión sexual y coacciones.

Marta Durántez, Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional, durante la vista oral del 'Caso Rubiales'. /Audiencia Nacional | Relevo
Marta Durántez, Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional, durante la vista oral del 'Caso Rubiales'. Audiencia Nacional | Relevo
Natalia Torrente

Natalia Torrente

El juicio del 'Caso Rubiales' se acerca a su recta final. Tras la declaración de Jorge Vilda, Albert Luque y Rubén Rivera, la Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional, Marta Durántez, compartió en la sala de vistas sus conclusiones durante la fase de informes. Tras casi dos horas de intervención, el ministerio público mantuvo la petición de dos años y medio de prisión para Luis Rubiales y de año y medio para el resto de acusados por dos delitos de agresión sexual y coacciones.

Tras repasar las cuestiones procesales y los requisitos de procesabilidad, la Fiscal avanzó en su alegato con el análisis de los dos delitos que, según su convencimiento y apenas 24 horas después de un interrogatorio a Luis Rubiales del que muchos esperaban más, fueron cometidos por el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y el resto de los acusados.

«Jenni Hermoso nunca quiso darle un 'piquito'»

Durántez fue tan dura como contundente en sus conclusiones finales para argumentar los motivos que le llevan a mantener la acusación. Consideró que "el beso que Rubiales le dio a Jenni Hermoso en la boca el día en que se imponen las medallas fue un beso no consentido". Sobre la verosimilitud del testimonio de la jugadora, que considera prueba directa porque era "quien vivió en primera persona la situación y sabe lo que se dijo, lo que no se dijo y lo que se produjo", la Fiscal aseguró que "existe una coherencia total entre los hechos narrados por ella y su comportamiento inmediato y posterior", narró. Se refería a los comentarios que la futbolista hizo tanto a su familia, amigos y compañeras sobre lo ocurrido minutos después de que Luis Rubiales la besara. Ese testimonio, además, fue avalado por un amplio número de testigos.

Marta Durántez, Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional, sobre el no consentimiento del beso de Luis Rubiales. Audiencia Nacional | Relevo

"No parece muy congruente que, si el beso fuera consentido, ya desde un primer momento tan inmediato se encontrara en un estado que necesitara transmitir esa información a su hermano, a su amigo y a dos jugadoras. Muestra ya la sorpresa y el estado de shock en el que se encontraba ante la situación vivida". Sus palabras, además, fueron avaladas, según reconoció el ministerio público, por otros testigos como Rafael del Amo, Rafa Hermoso, Vitoriano Martín y las cuatro jugadoras de la Selección que declararon en la vista oral.

«No hace falta ánimo libinidoso»

En cuanto al recorrido penal del beso, Durántez enunció multitud de sentencias previas que sientan precedente sobre la ausencia de ánimo libidinoso durante la agresión: "No se necesita", pues un beso, ya de por sí, se considera "como acto de contenido sexual", defendió la Fiscal. "No existe un derecho en las personas para acercarse a otra y darle un beso sin consentimiento expreso o tácito al afectar a la libertad sexual", siguió. Y "se ha acreditado que en este caso no hubo consentimiento, no hubo pregunta y no hubo respuesta. Fue sorpresivo, inesperado y sin posibilidad de reacción por parte de la víctima", prosiguió. "No sabemos el ánimo que tenía pero tampoco nos interesa. Para el dolo de la conducta no es necesario conocer la intención. Hay jurisprudencia que lo avala y desde hace mucho tiempo". finalizó.

«Me he visto obligada a revictimizar a la que ya ha sido víctima»

Durántez quiso pronunciarse sobre la revictimización de las mujeres en casos de agresión sexual. "Mi obligación es que se aplique la ley y creo firmemente en lo que estoy acusando, pero me veo obligada a revictimizar una y otra vez a la que ya ha sido víctima", explicó. "Lo tuve que hacer en fase de diligencias previas, instrucción y en la vista oral. Le he tenido que preguntar por qué se reía, por qué bebía champán, por qué celebraba...", decía. Momento en el que lanzó la reflexión más categórica de todas sus conclusiones: "¿Hasta cuando vamos a estar exigiendo a la víctima de una agresión sexual un comportamiento heroico? ¿No tenía derecho a celebrar un titulo deportivo de tal entidad como el campeonato del Mundo?", preguntó.

Marta Durántez, Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional, sobre la revictimización de las mujeres en los casos de agresión sexual. Audiencia Nacional | Relevo

"¿Qué le podemos exigir que haga? ¿Que se vaya a un rincón a llorar? ¿Que monte espectáculo? ¿Es menos víctima por eso? ¿Tiene que mostrar un comportamiento distinto o un plus? ¿Por qué no se hace en otros delitos? ¿A alguien que le roban y se va a comer con sus amigos es menos víctima?", interpeló prácticamente sin respiro. "Con todo mi rechazo tuve que formular estas preguntas para poder demostrar que no consintió y que claro que le afectó a su estado de animo, dignidad y libertad sexual. No quería empañar la celebración. Quería disfrutar, que sus compañeras disfrutaran. No quería que quedara como el beso a Jenni Hermoso, sino como que España había sido campeona del mundo", espetó. "Ella va a quedar como 'la del beso'. Sí, sí, es así de triste. ¿Por ella? ¿Por su culpa? No, no, no, por el comportamiento de quien realizó esa acción delictiva", sentenció.

Marta Durántez, Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional, sobre las consecuencia para Jenni Hermoso. Audiencia Nacional | Relevo

Sobre las coacciones a Hermoso: «Han sido unos chulos y maleducados»

La Teniente Fiscal mantuvo un tono inflexible al hacer referencia a las presiones que Jenni Hermoso sufrió, según Durántez, tanto en el vestuario, en el autobús, en el avión, en Ibiza y cuando no se la convoca, haciendo referencia a la primera lista de Montse Tomé tras el Mundial en la que "por protegerla" decidió no llevar a la jugadora a pesar de que había sido una de las mejores futbolista de la cita mundialista.

"Hasta usted —se refirió al juez— le tuvo que llamar la atención al señor Cuervo por su chulería. Si se comportan así en un tribunal, ¿qué no sería en el ámbito de la RFEF?". apostilló. "¿Y pensamos que no iban a tener miedo las jugadoras? Si han sido unos maleducados y unos chulos", reveló ante la incredulidad de los letrados de la defensa.

La Teniente Fiscal de la Audiencia Nacional sobre el comportamiento de los acusados y algunos testigos. Audiencia Nacional | Relevo

Durántez dijo que "les preocupaba su chiringuito" mientras que "ella —por la jugadora—estaba sola". Avanzó con las "manipulaciones" y "situaciones intimidatorias" que se sucedieron para razonar las presuntas coacciones que sufrió Hermoso con un único objetivo: que se pronunciara públicamente para justificar el beso de Luis Rubiales, a pesar de haberse negado una y otra vez. "Era, a toda costa, conseguir lo que querían", concluyó la fiscal, que también quiso reivindicar las consecuencias directas para la jugadora: "Tuvo que ir al psicólogo y vivir esa humillación, tuvo que justificarse, no se le dejó disfrutar del triunfo", explicó.

Con un sinfín de titulares Marta Durántez defendió su acusación durante cerca de dos horas donde adoptó una actitud rotunda no sólo por su confianza sobre la comisión de los delitos denunciados, sino también sobre el comportamiento de acusados y testigos o la singularidad de la prueba pericial —que presuntamente confirmaba que Luis Rubiales preguntó si podía dar un "besito"— que, según la Fiscal, es absolutamente "irregular".

"Señoría, su deber es aplicar la ley y la ley es clara. Su deber es no apartarse de lo que dice la jurisprudencia, y es clara. No ha quedado duda razonable alguna de que los acusados han sido autores de los delitos que se les imputan. No cabe otra opción posible a la prueba practicada que condenar a los mismos en los términos que interesamos en nuestro escrito de acusación. Es cuestión de justicia", cerró Durántez, que quiso citar una letra de Joan Manuel Serrat, a quien consideró un "genio": "Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio".