Valverde le da una sorpresa a Mendilibar y encabeza la visita de los ídolos de Olympiacos

Muchos aficionados de Olympiacos creen que Ernesto Valverde es el mejor entrenador de su historia. En un club centenario eso no es poco. A Valverde lo aman, cuando te escuchan hablar español por la calle mencionan su nombre con una sonrisa en la boca. Y hoy, antes de la final, Valverde que fue invitado a la primera final europea de la historia de Olympiacos saltó al campo y abrazó a su amigo José Luis Mendilibar.

Entonces medio estadio del AEK explotó. Los aficionados rojiblancos son mayoría y empezaron a cantar el nombre de Ernesto Valverde, el campo se venía abajo y Mendi hablaba con Valverde entre abrazos. Hoy, antes del partido, varios aficionados rojiblancos nos comentaban: "Ernesto Valverde es el mejor que hemos tenido pero hoy, si ganamos, Mendilibar podrá estar a su altura".

El actual entrenador del Athletic entrenó a los del Pireo en dos etapas. Y en las dos ganó. En un club tan exigente como Olympiacos eso no es nada fácil, porque tritura entrenadores y él supo salir indemne. El entrenador, que está viviendo un momento dorado en Bilbao, no olvida su pasado y aceptó con gusto la invitación del club para asistir a esta final.

Y no fue el único, porque los rojiblancos invitaron a más exjugadores. Roberto Jiménez, Alejandro Chori Domínguez, Eric Abidal, el exentrenador Marco Silva, Maniatis, Papadopoulos, Modesto... esto habla muy bien de un club como el griego, que cuida a sus ídolos de una manera especial.

El ambiente en Nueva Filadelfia era digno de una final. La Conference League tiene que aprovechar encuentros como estos para darse más a conocer y demostrar que no todo es la Champions en Europa, que hay vida más allá de la competición más importante a nivel de clubes del mundo.

El técnico compareció tras la flamante victoria y tiró de humildad: "No sé si me lo merezco. Ha costado mucho que llegaran estos éxitos. Habíamos peleado por estas cosas. Pero esto tan grande... Bienvenido. Me acuerdo primero de la familia, que es la que peor lo pasa. Después de esta afición que nos sigue a todos lados. Al club le va a venir bien para el Centenario esto y después para los que llevamos peleando estos meses. Ha sido tremendo. Parecía que íbamos a los penaltis".

Desde luego, unas estadísticas que le llevan a ser ya un técnico de leyenda: "Dentro de unos años me acordaré de esto y me llevaré las manos a la cabeza". Pero, ante todo, un hombre de fútbol, que agradece a su amigo Valverde la sorpresa: "Le he visto antes del partido. Somos amigos, él es muy querido aquí. Igual le empato yo a él". Por último, ¿sigue?: "Tengo un año más de contrato y eso no se mueve".