Lucía Moral: "Vamos a luchar como nunca sin importar que es el Real Madrid"

Sigue siendo 'Wifi', aunque en su camiseta ha pasado a ser 'Lucía Moral'. "Es más profesional", dice. Aún con "nervios" en una de sus primeras entrevistas como jugadora del Atlético de Madrid. También por la final que afronta este sábado junto a sus compañeras en la Copa de la Reina. "Aún no soy consciente de todo lo que estoy viviendo. Sería un sueño levantar mi primer trofeo aquí. He jugado muchas finales con las categorías inferiores de la Selección, pero una final como esta pocas veces se vive", señala a Relevo.

Wifi, así le llaman sus compañeras tras una broma con su peinado, con un moño alto que parece una antena, sólo lleva una temporada en el Atlético, pero ya se siente "como en casa". A sus 19 años, ha derribado la puerta tras haber dado el salto del filial al primer equipo. "Ha sido más fácil y mejor de lo que pensaba al llegar. Mis compañeras me ayudan y lo hacen todo más fácil. Estar aquí es como estar en casa, como cuando estaba en Córdoba", cuenta.

Lo cierto es que se le ve muy integrada. Hace bromas con el resto y convive día a día con varias de sus compañeras. "Compartimos piso Sonia Majarín y Andrea Medina", desvela. Esta última es una con la que mejor ha encajado, aunque le cuesta elegir a sus mejores aliadas en este vestuario. En línea con esto, pone en manifiesto el buen compañerismo que ha recibido en el vestuario rojiblanco: "Mis compañeras y el cuerpo técnico me hacen ver que soy una más, a pesar de venir de donde vengo. Con trabajo y esfuerzo, todo llega y me ha acabado llegando".

La delantera andaluza ha sido una de las grandes sensaciones en el final de temporada, en el que ha ido ganando mucho peso en el primer equipo y ha "sufrido" tras no poder conseguir el objetivo europeo. "Estamos en el Atlético y hay jugadoras muy buenas y veteranas. Para ganarse un puesto hay que trabajar duro", cuenta sobre su crecimiento. Atrás queda la historia de una joven Lucía que dejó su casa hace un año para soñar en grande.

Con el fútbol en vena, aunque desconoce de dónde le viene, pues su padre jugó siempre al baloncesto, presume de haber aficionado a su familia a este deporte. Ellos no faltarán en Butarque para alentarla en esta nueva prueba, con la sensación de que ya ha ganado. Su esfuerzo encuentra este sábado el premio a la perseverancia, con su primera final como rojiblanca.

"Llegamos con muchas ganas. El último partido de Liga acabamos bien, con la confianza suficiente para ganar la semifinal y llegar a por todas a la final. Va a ser un partido muy bonito y luchado por los dos equipos. No miramos al rival. Vamos a luchar como nunca sin importar que es el Real Madrid", afirma. Sobre el equipo blanco y el favoritismo de éste en esta final four de Copa, Wifi asegura que en el Atleti sólo piensan en que van a ir "a por todas".

Y confiesa: "Hay nervios y ganas de jugar estos partidos porque son muy bonitos de jugarlos". Un encuentro en el que seguro que seguirá sumando experiencia al máximo nivel. "Me queda mucho que aprender, sobre todo mentalmente. Mis compañeras están ahí siempre y me ayudan. A nadie le gusta perder", sentencia, con la ilusión de quien debuta en una cita de este nivel. La magia de las primeras veces.