La crónica del lío previo al Athletic - Osasuna que retrasó el partido

La resolución de la primera semifinal de la Copa del Rey tenía todos los ingredientes para una gran fiesta del fútbol en San Mamés. Rivalidad cercana, aficiones ilusionadas y un gran premio en juego preparaban un espectáculo por lo alto. Esa mezcla ha superado cualquier expectativa y ha provocado que la previa del encuentro haya estado marcada más por el caos que por las ganas de que el balón comenzara a rodar en el césped.

Antes de las 19:15h., miles de aficionados se agolpaban en los alrededores de San Mamés para recibir el autobús del Athletic. Exactamente a la misma hora y a solo 500 metros, los jugadores de Osasuna asomaban por las puertas del hotel camino del estadio. Dos puntos calientes a la vez que han sido demasiado para el dispositivo policial dispuesto en las calles adyacentes al escenario del partido. Si la llegada del Athletic era accidentada, con una gran invasión de rojiblancos en la calle Felipe Serrato que impedía el avance del bus, Osasuna ni siquiera comenzaba su recorrido de apenas tres minutos hasta el coliseo bilbaíno.

Según ha podido saber Relevo por parte de fuentes policiales, la Ertainztza se ha visto desbordada por la cantidad de aficionados que estaban esperando en el hotel del conjunto rojillo. A la vez que la policía se veía superada en la llegada del Athletic, el cordón de seguridad preparado para la llegada de Osasuna se ha roto y las fuerzas de seguridad del Gobierno Vasco han tenido que retrasar media hora la salida de Osasuna, ya dentro del bus, por motivos de seguridad. "A las 19:05h, estábamos dentro del autobús, no hemos arrancado hasta las 19:45h. y hemos entrado en el estadio a las 20:05h.", ha afirmado Fran Canal, el director general de club en la previa del partido ante las cámaras de TVE.

En el itinerario previsto, ardía un contenedor en plena calle rodeado de cientos de aficionados. Con todos los accesos bloqueados, la única solución para intentar trasladar a los navarros al estadio ha sido dirigirlos por un acceso peatonal. "La Ertzaintza estaba delante de nosotros y, en el último momento, hicieron que el autocar cambiara de sentido. No tiene ningún sentido", ha dicho Canal.

Los jugadores de Osasuna han tenido que esperar más de media hora dentro del autobús antes de comenzar el desplazamiento de escasos 500 metros desde el hotel. Lo que ha provocado que el equipo entrara en San Mamés algo después de las 8 de la tarde, más de media hora después de lo previsto con todo lo que eso conlleva en la previa de un encuentro de este calibre. Por ello, desde el club rojillo, se ha solicitado el retraso del inicio del encuentro en 15 minutos. Tras una reunión ya en los pasillos del coliseo vasco, la federación y el Athletic han aceptado un retraso de diez minutos y el partido ha comenzado a las 21:10h.

"Un hecho sin precedentes en las visitas a este estadio", denunciaba Osasuna en sus redes sociales, anunciando que exigirá responsabilidades. "En las próximas horas, se decidirá qué medidas tomar", ha anunciado visiblemente enfadado el director general del club: "Entendemos que en un partido tan importante como unas semifinales de una Copa del Rey no podemos llegar con tanto retraso. El gran damnificado es Osasuna".

Un situación que, según ha denunciado el propio Canal, ha perjudicado notablemente a la preparación del equipo de Jagoba Arrasate: "Desesperación, enfado... Este retraso nos perjudica. No son las circunstancias óptimas. Obliga a cambiar la sesión de activación de los jugadores y, además, tenemos un jugador [Abde] que, por su religión, debe comer cuando se ponga el sol". A la espera de conocer qué medidas tomará la directiva rojilla, la indignación ha sido la protagonista en la previa de uno de los partidos más importantes de su historia.