El subidón de que te toque un Primera, el bajón de dudar de tu estadio... y todo en horas de curro
El sorteo de la primera ronda de la Copa del Rey dejó 55 emparejamientos y la gran ilusión de los equipos de Regional.
![Los presidentes, en el sorteo de la Copa del Rey./](http://s2.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202310/17/media/cortadas/copa-RIzB9oQPluEGdSkuHCFv2rO-1200x648@Relevo.jpg)
Entre 115 equipos clasificados, apenas 42 cuentan con el glamour de jugar en la élite, cobrar millonadas de los derechos televisivos y llevar ropa de las tiendas más caras de la ciudad. Pero esa mística acompañaba en la mañana de este martes en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Allí se reunían todos los de la primera ronda de Copa, pero solo algunos acudieron a la cita. Se podían apreciar con aplausos cuando salía su bola en cuestión y los que posaban en el photocall improvisado con el cartel de la Copa del Rey.
Un pequeño catering antes de poner todos rumbo al salón en el que empezaría a cambiar su historia. Sin Real Madrid, Barcelona, Atlético y Osasuna, los focos estaban puestos fundamentalmente en Betis, Sevilla, Real Sociedad o Athletic. Un sorteo con varios premios 'Gordos' y, sobre todo, con pocas pedreas. Los más modestos tenían sí o sí el privilegio de jugar contra un equipo de Primera División, lo que ya es un honor dadas las diferencias entre Regional o Tercera Federación y la élite.
En la sencillez también está la grandeza. La Federación apostó por conexiones en directo con Talavera, desde la Copa Federación; y Hernán Cortés, desde Regional. Aquel experimento informático resultó ser un absoluto éxito. Las manos inocentes, también implicadas de lleno en el sorteo, perdieron protagonismo ante dos situaciones que desataron la risa y los aplausos del salón.
Una de las bolas que salió pronto fue la del Hernán Cortés, cuyo rival es el Betis. Primero, un formal Alberto Galeano homenajeó a Daniel, Gonzalo y Jorge, tres jóvenes de la localidad que fallecieron y ahora dan el nombre a su estadio: "Todo esto se lo brindamos a ellos, son la ilusión que nosotros tenemos". Poco después, se dio una de las imágenes de la mañana. En el escenario se anunció el emparejamiento, los desplazados del club lo celebraron y se realizó una conexión inmediata para ver cómo ellos lo habían vivido.
Había risas y algo de barullo, quizás insuficiente para haberse cruzado con uno de los más ansiados rivales. Había un asterisco: ¡no habían visto aún lo ocurrido! El retardo les pasó una mala factura, justo lo escucharon y comenzaron a saltar y gritar para la perplejidad y risa desde Las Rozas. Unos minutos después, ya más formales, reconocieron: "El 80% quería al Betis".
Su estelar actuación pronto encontró competencia. Daniel Ramos, futbolista del Talavera, veía en directo el sorteo junto a otras personas del club y allegados. Cuando el azar dictaminó que su rival fuera el Almería, se produjo la conexión. El jugador estaba tan plácidamente charlando con el resto, actuando como cualquiera actuaría cuando no sabe que la cámara le estaba grabando.
Por más que insistía el presentador Saúl Ramos, no había respuesta. Ya por fin el representante del Talavera descubrió que estaba en directo y sincero, lo que se dice sincero, sí fue. "No es el rival que más ilusión nos hacía, las cosas son así", dijo en referencia al Almería. No acabó la conexión sin un toque de humor desde Las Rozas: "Hay que estar más atento en los córners, eh".
Desde entonces, cerca de una hora de movimiento de bolas para definir 55 emparejamientos que se disputarán a partir del próximo 31 de octubre. Por ello y pese al catering, es natural que algunos de los afortunados estuvieran deseando ya marcharse a sus casas tras una intensa mañana por la capital. Aun así, hubo tiempo para atender a los allí presentes.
Juan Carlos Espinar, presidente del Hernán Cortés, saltó junto a Rafa Gordillo, representante del Betis. "Queríamos Betis o Sevilla, no queríamos otro. Esto ha salido como esperábamos", reconoció el mandatario del modesto, algo que sonrojó al bético: "Es un orgullo que nos quieran". La ilusión está ahí, pero toca dar un paso más: "¿Si se puede ganar? Me voy a mojar. Creo que sí". Ante tal ambición, ¿alguna promesa?: "Con ganar tengo de sobra".
El cruce «predestinado» del Rubí
Menos optimista se mostró Josep Alcalá, aunque el entusiasmo rompa barreras. El Athletic se convirtió en el rival del Rubí, club que preside: "Es el rey de Copas y lo vive a la perfección. Ganar es un decir, son cinco categorías de diferencia y es casi imposible. Disfrutaremos del día. La calidad del Athletic puede más que la ilusión, pero tenemos mucha".
Relevo vivió con ellos, desde Barcelona, el momento en el que el azar decidió su rival. Es el premio a ser de los mejores de la temporada pasada sin lograr el ascenso, algo que preferían por el prestigio que implica jugar la Copa. Para el partido tratarán de poner gradas supletorias en su feudo para que la ciudad de Rubí pueda vivirlo como merece.
Primero, claro, tocaba conocer al rival. Unos diez miembros de la plantilla lo vieron en primera persona desde una sala anexa al gimnasio de sus instalaciones, con banderines colgados de cientos de clubes que en su día se vieron las caras con este centenario club catalán. La gran mayoría ni siquiera pudo acudir porque trabajaba o estudiaba. La otra realidad del fútbol modesto. Los presentes aprovechaban el momento e iban celebrando cuando salían equipos más 'débiles' de Primera, porque querían chocar contra un coloso de Primera. El Athletic es una gran muestra y estaba "predestinado". Tanto Arseni, su secretario, como el capitán Aitor Torres son 'leones' desde pequeños.
El debate de los estadios
Ahora, los equipos más modestos se debaten entre si podrán o no podrán jugar en sus propios campos. Jugar en el pueblo es su ilusión, aunque la posibilidad de hacer una mayor taquilla o meter a más gente en el campo también está sobre la mesa. No solo es la intención. La Federación marca una serie de requisitos mínimos como que haya una separación mínima entre campo y grada, 3.000 espectadores mínimos, controles de acceso en entrada y salida, una clínica de urgencia o una iluminación mínima de 600 luxes para la retransmisión televisiva.
Una vez expuestos, hay excepciones, tiempo para remodelar o pequeños detalles que se pueden llegar a pasar por alto si se acercan a los mínimos. De momento, el Hernán Cortés cree que jugará en Almendralejo, el que era el estadio del Extremadura en Segunda División. Su campo es modesto y se antoja realmente complicado que pueda recibir a un Primera División. El Quintanar, por el contrario, sí confía en que su campo esté disponible, aunque deben mejorar a tiempo la iluminación.
El Tardienta oscense ya ha confirmado que disputará la Copa del Rey en El Alcoraz, mientras que el Turégano espera jugar en El Burgo. El Chiclana, por el contrario, cuenta con el ofrecimiento del Cádiz de jugar en el Nuevo Mirandilla y todo apunta que ahí recibirán al Villarreal. En los próximos días tratarán de cerrarse el resto en lo que es un homenaje al fútbol de siempre. Estas pequeñas grandes historias comenzarán a cambiar en menos de quince días. ¿El objetivo? Ganar a un equipo de Primera División. O, al menos, disfrutarlo.