La imagen que explica el desconcierto del vestuario del Real Madrid en medio del plantón contra el arbitraje de la final de Copa del Rey
El guardameta ucraniano fue el único futbolista del club que se subió al autobús que iba a salir rumbo a La Cartuja. Minutos después volvió al hotel por su propio pie.

La tensión entre el Real Madrid y el estamento arbitral ha alcanzado un nuevo punto crítico en vísperas de la final de la Copa del Rey. El club blanco ha optado por no acudir al entrenamiento oficial previsto en el estadio de La Cartuja, así como a la rueda de prensa habitual en la que iban a comparecer Carlo Ancelotti y Luka Modric. Además, han cancelado su participación en la tradicional foto con el trofeo y en el resto de actos institucionales organizados por la RFEF, como muestra de su profundo malestar con el Comité Técnico de Árbitros.
La bomba ha explotado a escasos minutos de empezar el entrenamiento en La Cartuja y su respectiva rueda de prensa. Toda la plantilla, que estaba dentro de su hotel, tenía el autobús en la misma puerta para partir al estadio donde mañana a las 22:00 se disputará la final de la Copa del Rey. En ese momento, la prensa ya se había hecho eco de la decisión del club. Ahí fue cuando se vio una imagen más que curiosa.
Mientras decenas de aficionados esperaban al inicio de la expedición rumbo al estadio, no parecía haber movimiento. Muchos niños querían una foto con sus ídolos el día previo de una final de Copa, pero no tuvieron opción ni de verles de cerca. Ningún futbolista del Real Madrid salió de la puerta del hotel. Bueno, lo hizo solo uno: Andriy Lunin.
🚨‼️¡El Real Madrid se planta antes de la final de #CopaDelRey!
— Carrusel Deportivo (@carrusel) April 25, 2025
❌ El conjunto blanco ni entrenará en La Cartuja ni habrá rueda de prensa previa
⚠️ Este es el momento en el que Lunin subía al bus rumbo a La Cartuja: a los pocos minutos, se marchó
📹 @JesusAljama_ pic.twitter.com/ZQj8UadbjS
El guardameta ucraniano salió vestido con el chándal de entrenamiento rumbo al autobús. Con su teléfono en una mano y con un neceser en la otra, el portero se subió a un autocar donde no había ningún integrante del equipo. Los allí presentes vieron como Lunin tardó pocos minutos en salir del autobús para volver a acceder al hotel donde sigue alojado todo el equipo.
Desde el entorno madridista aseguran estar hartos del trato recibido por parte de los árbitros y denuncian una situación insostenible, agravada por los recientes comentarios públicos de colegiados como De Burgos Bengoetxea y González Fuertes, que incluso han amenazado con represalias por los vídeos publicados por el club en su canal oficial.
En este contexto, el Real Madrid se plantea incluso no acudir al partido del sábado, una decisión que está siendo valorada en las altas esferas del club. Florentino Pérez, visiblemente molesto por las declaraciones de los árbitros, lidera la postura más firme dentro del club, que ya prepara un comunicado exigiendo explicaciones y disculpas. En Chamartín consideran que lo ocurrido supone un punto de inflexión y no descartan tomar nuevas medidas en las próximas horas.