⚽ BARCELONA - ATLÉTICO

Nadie juega tan bien al escondite como Julián Álvarez

El argentino pasó desapercibido en el duelo liguero.

Julián Álvarez, celebrando un gol con el Atlético de Madrid. /GETTY
Julián Álvarez, celebrando un gol con el Atlético de Madrid. GETTY
Albert Blaya

Albert Blaya

Desde que aterrizó en Europa, Julián nunca ha llegado a los 20 goles en una temporada. Con casi la mitad por disputarse, vivo en las tres competiciones, el argentino ya suma 19, igualando la 23/24 en el City. Es indudable que el fichaje de Julián Álvarez, probablemente el que más expectativas ha levantado desde la llegada de Simeone, está funcionando, no solo a nivel de cifras, sino también a nivel de discurso, pues el ex de River Plate está totalmente integrado en la forma de sentir del técnico. Existen pocos delanteros en el mundo que se camuflen tan bien y de una forma tan sensible en distintos planes de juego como Julián.

El único precedente entre Barça y Atlético de Madrid esta temporada acabó con victoria colchonera y probablemente Simeone no querrá mirarlo mucho, pues hay poco que copiar de aquel día. El Atleti sobrevivió a Montjuïc con cuatro disparos en 90 minutos en un partido en el que apenas se juntó en campo contrario. Julián firmó 13 pases, los mismos que Oblak, en una actuación gris que apenas le sumó a su equipo. ¿Qué notas puede sacar desde ese encuentro Simeone para cambiar el plan?

Ante Las Palmas, el Barça vio cómo los de Diego Martínez volvían a poner en evidencia algunos de los puntos débiles del equipo en su estructura de presión. Aquello que es su fortaleza es, a la vez, una debilidad si el rival lo sabe explotar, y el Atlético podría tener en Julián Álvarez a ese jugador que les hiciese daño en transición, pero también más tirado hacia un costado. El Barça salta con sus laterales sobre los del rival, lo que deja a los centrales con una distancia enorme a vigilar, de ahí que Flick opte por meter a sun mediocentro entre los centrales, para que estos puedan tener más flexibilidad.

Se ve claro como Koundé salta a por el lateral, desprotegiendo su espalda, y dejando un espacio enorme a Moleiro, el extremo.  WYSCOUT
Se ve claro como Koundé salta a por el lateral, desprotegiendo su espalda, y dejando un espacio enorme a Moleiro, el extremo. WYSCOUT

Julián parte de una doble punta con Griezmann que le permite un rango de movilidad muy alto. Como ya hiciese en el City, River o en la propia selección, a Julián le gusta partir de la banda izquierda para conducir y poder conectar con el extremo (Samu Lino) para mezclar alturas. Si el Atlético logra tener pases que le permitan conectarse en campo propio y hacer saltar a destiempo a los jugadores del FC Barcelona, el Atlético tendrá una opción de explotar las recepciones de Lino abiertas con Julián estirando a los centrales y mezclándose también allí.

Nadie juega tan bien al escondite como Julián Álvarez

Ante el Barça, Julián terminó con... ¡0! toques en área azulgrana. El trabajo defensivo de los de Flick fue fantástico evitando que el Atleti tuviese pases para respirar, forzando a que siempre buscasen el juego vertical para el que no estaba preparado al vivir demasiado cerca de su portería. El argentino es el mejor presionador que tiene Simeone, un delantero incansable y voraz, capaz de repetir esfuerzos y poder estirar el bloque defensivo hacia arriba, pero con los centrales que tiene el Cholo lo lógico es pensar que se va a proteger.

Imaginando que el plan de partido es parecido al de Liga, con el Atlético de Madrid defendiendo muy abajo, para Simeone la principal preocupación deberá ser cómo hacer que Julián tenga mayor impacto en área rival, algo fácilmente mejorable, pero sobre todo que esa mejora sea útil. Esta temporada, Julián convierte el 17% de sus disparos, por debajo del 23% de Sorloth o el 21% de Griezmann, algo que deberá subir en el segundo tramo de la temporada, aunque en Champions League el porcentaje sube hasta el 38%, algo que demuestra que el ex de River es un jugador de noches grandes.

Si algo ha demostrado este Atleti es una enorme capacidad de resiliencia y competitiva, algo que llevaba tiempo sin encontrar a estos niveles. La victoria en Montjuïc y los empates ante el Real Madrid le avalan a la hora de confiar en su plan reactivo, donde la gestión del primer pase tiene un peso capital porque es el que permite unir su defensa numantina con el ataque. Julián, con su movilidad y ritmo, debe ser el que transforme esa intensidad defensiva en algo más, y Simeone vio en el partido de Las Palmas cómo rajar la estructura del equipo de Flick.