De Marcos y la importancia del legado de la generación que luchó por títulos: "Si esta final va bien, todos serán parte de ella"
El capitán rojiblanco reconoció que piensa en todos esos excompañeros que se quedaron a un partido de ser campeones con el Athletic.

Óscar de Marcos lleva 15 temporadas en el Athletic, desde que llegase en el verano de 2009 a Isla Canela para iniciar su camino en el club de su vida. Compartió habitación con Andoni Iraola en aquella pretemporada, recibió los consejos de Joseba Etxeberría y Carlos Gurpegui y creció en la entidad hasta ser uno de sus capitanes. Quién le iba a decir a él que ahora, en el tramo final de su carrera, estaría ante una nueva final y que tendría en su mochila cuatro de Copa del Rey, una de Europa League y dos títulos de Supercopa. Precisamente por ello, él sabe bien lo que hay que sufrir y luchar para ser campeón en Bilbao y, por eso mismo, tiene claro en quién piensa en estos días. "Estos días pienso en mis excompañeros, en muchos de ellos que lo han intentado, que algunos no llegaron ni a jugar una final, otros que lo intentaron conmigo", reconoció en rueda de prensa, a solo tres días del choque en La Cartuja ante el Mallorca.
Hace unos días, Yuri declaró que le haría especial ilusión ganar la Copa por jugadores como Muniain y el propio De Marcos, que tanto lo han intentado. Algo similar que lo que piensa el lateral de sus anteriores compañeros. "Nosotros ahora mismo somos la cara visible que estamos a tres días de jugar una final de Copa pero todos nosotros estamos de paso y vamos dejando nuestro legado. Todos esos jugadores dejaron el suyo y vivieron situaciones mucho más complejas para que a día de hoy nosotros podamos disfrutar de una final de Copa. Por supuesto que me acuerdo de ellos y si va bien, ellos serían parte de esta final", destacó el jugador de Laguardia.
Precisamente por eso dice no pensar en si va a ser titular o no. "Las finales las jugamos todos. Los que estamos en el campo, en el banquillo, en la grada, en sus casas... Vamos a necesitar de todos para poder conseguirla porque va a ser complicada". Admite estar "con mariposas en el estómago" porque "ganar la Copa sería algo único". "Algo que siempre se ha soñado, pero para eso hay que jugarla e intentar hacerlo".
"Las finales las jugamos todos. Los que estamos en el campo, en el banquillo, en la grada, en casa... Vamos a necesitar de todos para poder conseguirla"
Capitán del Athletic ClubLa comparecencia del lateral rojiblanca se centró, en muchas fases de la misma, en la presión que genera la ilusión bilbaína por un título que se resiste 40 años pese a que se han disputado cinco finales en 15 años. "En las finales la cabeza juega una parte muy importante por la responsabilidad que te metes, por las ganas que tienes de intentar agradar, más si eres del Athletic que quieres ilusionar a toda la gente que es del Athletic y llevan tiempo esperándola. El control mental es complicado pero es en lo que tenemos que trabajar. Para ganar una final, que siempre son complicadas, hay que estar muy bien preparado", razonó De Marcos, un especialista ya en el asunto.
Pese a los "duros palos" de las derrotas ante el Barcelona y la Real en dichas finales, cree que "no hay que borrar nada" de la mente porque "son experiencias de las que hay que aprender". Quizá, una de las cosas que aprendió es a alejarse de la presión o, al menos, a intentarlo. "Todos tenemos ganas de que llegue, pero intento disfrutar de la semana. No ir con esa ansiedad". "Por la calle la gente intenta no hablarte de ello para no condicionarte, pero es inevitable. Veo a la gente ilusionada, igual que estoy yo. Eso hace que el Athletic sea diferente". De hecho, reconoció que en el vestuario tienen prohibido hablar de promesas si se levanta el título porque "no se debe hablar de suposiciones".
La guinda a una carrera de leyenda
Este duelo llega en el tramo final de su carrera, a pocos días de cumplir 35 años y ubicado en el top-5 de jugadores con más partidos de la historia del club, algo que le hace disfrutarlo aún más. "Las finales de la pandemia ya las viví como si fuesen las últimas. Le intento decir a mi cabeza que disfrute porque puede ser la última". Eso sí, nada de hablar de su futuro. "Ni me lo he planteado, estamos a tres días de jugar una final y es lo único que me viene a la cabeza".
En lo puramente deportivo, considera que no son favoritos, aunque entiende que se hable de ello únicamente por la posición liguera tanto del Athletic como del Mallorca. Eso no quita para que vaya a ser "un partido muy complicado" ante un gran rival que siempre les ha complicado su juego. "Que no nos podamos echar en cara que no hemos dejado todo en el campo. Tenemos que ir con la sensación de que estamos jugando en San Mamés, hacer nuestro juego, disfrutarlo e ir a por todas. Que no nos podamos reprochar nada".