BARCELONA - ATLÉTICO

La pizarra de Flick y los goles de Cubarsí e Íñigo Martínez le dan una lección al Atlético de Madrid en 45 minutos para el olvido

Los goles de Cubarsí e Íñigo Martínez dejaron en evidencia a la defensa rojiblanca.

Íñigo Martínez celebra el gol con sus compañeros. /REUTERS
Íñigo Martínez celebra el gol con sus compañeros. REUTERS
Marcos Durán

Marcos Durán

Un primer tiempo que comenzó como un sueño y terminó como una pesadilla. El Atlético de Madrid se puso por delante 0-2 en Montjuic ante el Barcelona pero desde el minuto 20 de partido el equipo rojiblanco, hoy de gris, desapareció para dejar lugar a un vendaval del Barcelona que remontó el partido gracias, en gran medida, al balón parado.

Los goles de Julián Alvarez y Griezmann fueron claves para que el Atlético pudiera jugar con balón los primeros 15 minutos, pero cuando Lamine comenzó a hacerse cargo de la situación, todo cambió. El Barcelona terminó con once remates en la primera parte y tres fueron goles, dos de ellos de cabeza.

Hubo dos momentos importantes que propiciaron la remontada del equipo catalán. Primero, Pablo Barrios fue incapaz de defender de manera correcta un centro desde la esquina de Raphina. Pau Cubarsí le ganó la posición al canterano atlético, que no defendió bien, mal orientado y muy flojo. Cabeceó el central del Barcelona, la pelota tocó en el '8' del Atlético y nada pudo hacer Musso para evitar el que fuera el empate del equipo de Flick y el primer gol del canterano blaugrana en su vida.

Simoen sobre los goles a balón parado.

Minutos más tarde, ya casi al final de la primera parte, el tercer del Barcelona, el de la remontada parcial del conjunto culé. Ahora otra jugada preparada con un balón al segundo palo y en esta ocasión sí tuvo que ver algo más Musso, que dudó entre salir o quedarse debajo de palos, pero el problema no estuvo principalmente ahí.

Pablo Barrios y Marcos Llorente contra Cubarsí y Martínez. El autor del segundo gol hizo la pantalla para que entre sólo Íñigo Martínez al segundo palo, mientras Llorente se quejaba junto a Barrios pidiendo falta al árbitro del partido, pero finalmente no fue revisada por el VAR.