FINAL DE COPA | REAL MADRID - OSASUNA

Esta es la pizarra de Jagoba Arrasate que ya ha neutralizado al Real Madrid

El técnico vasco ha sacado tres empates en los últimos seis enfrentamientos contra los blancos. Dos fueron en el Bernabéu.

Carlo Ancelotti con Jagoba Arrasate. /GETTY
Carlo Ancelotti con Jagoba Arrasate. GETTY
Albert Blaya

Albert Blaya

Osasuna encara la final de Copa del Rey de este sábado ante el Real Madrid como lo que es; una cita histórica y, sobre todo, una oportunidad. Partiendo desde una inferioridad manifiesta y reconocida, Osasuna ya ha mostrado las últimas temporadas que tiene la capacidad para poder frenar al Real Madrid en determinados escenarios, y aunque esto no implique una correlación con el tipo de partido que se encontrará en la final, sí da pistas sobre lo que pueda plantear Jagoba Arrasate.

En las últimas dos temporadas, con Carlo Ancelotti ya en el banquillo, Osasuna ha sido capaz de empatar ambos encuentros en el Santiago Bernabéu (empate sin goles el pasado curso y un 1-1 en este). Y ambos partidos lo ha logrado con distintos sistemas y planteamientos, prueba clara de lo que es Arrasate como entrenador: flexibilidad, variabilidad en el planteamiento y muchas ventajas desde la pizarra para que sus futbolistas tengan certezas a las que agarrarse ante la superioridad del Real Madrid.

Probablemente Osasuna sea de los equipos de LaLiga que más facilidad tienen para cambiar de sistema y adaptarse sin mayor problema: 4-3-3, 4-2-3-1, 5-3-2. Dependiendo del tipo de partido, o incluso virando dentro del mismo, Arrasate demuestra mucha habilidad para adaptar a sus jugadores. En una entrevista en Relevo contó lo siguiente: "El modelo no varía, pero nos damos cuenta que dependiendo del partido hay sistemas que te acercan al resultado y los jugadores están cómodos con cualquier sistema."

Reducir al rival

El pasado curso, Jagoba optó por un 5-3-2 que le permitió dejar al Real Madrid con apenas 0,82 xG de 17 disparos totales. Es decir, cada disparo tenía un xG de 0,04, una cifra bajísima que muestra la poca calidad que tuvieron los intentos del Real Madrid. De esos 17 disparos, más de la mitad (9) fueron desde fuera del área, forzados por un Osasuna que se protegió a las mil maravillas en área propia y propició mucha horizontalidad en los ataques del Real Madrid. De los 72 pases que intentó el Real hacia área contraria, solo el 30% llegaron a un receptor.

Con esa defensa de cinco y tres centrocampistas capaces tanto de caer en zona de remate rival como de saltar hacia adelante, permitió que Osasuna controlase en todo momento los intentos rivales forzando a los de Carlo a una genialidad.

Con la línea de 5, Osasuna tuvo siempre un central exterior y carrilero cerca de Vinicius y Benzema, sobrecargando ese sector e impidiendo que el Real Madrid generase con regularidad.
Con la línea de 5, Osasuna tuvo siempre un central exterior y carrilero cerca de Vinicius y Benzema, sobrecargando ese sector e impidiendo que el Real Madrid generase con regularidad.

Las llegadas de Abde , Moi y la irrupción de Aimar Oroz  han reconfigurado a Osasuna. Es un equipo más propositivo que el pasado curso y con más capacidad para tener la pelota y hacer daño con posesiones que no solo busquen el juego directo sobre sus puntas. Abde y Aimar desde la pausa y la calidad entre líneas y Abde desde un desborde punzante abierto a banda. Más alternativas pero una misma solidaridad defensiva.

Este curso empataron a uno en el Santiago Bernabéu en un encuentro que los blancos igualaron de penalti en el 78', pero que Osasuna tuvo controlado gran parte del mismo. Aunque tuvieron más problemas para contener a Vinicius en banda, los rojillos nunca le perdieron la cara al partido. ¿Cómo?

Partiendo del 4-5-1 en fase defensiva, el posicionamiento del interior y extremo tapan el pase a Benzema y eso permite que central y lateral se queden cerca de Vinicius para evitar que se desmarque. Mendy queda solo abierto.
Partiendo del 4-5-1 en fase defensiva, el posicionamiento del interior y extremo tapan el pase a Benzema y eso permite que central y lateral se queden cerca de Vinicius para evitar que se desmarque. Mendy queda solo abierto.
Tras recepción de Vinicius, Osasuna se muestra muy agresivo saltando sobre él para que no pueda girar, dejando solo a tres defensas cerca del área.
Tras recepción de Vinicius, Osasuna se muestra muy agresivo saltando sobre él para que no pueda girar, dejando solo a tres defensas cerca del área.

En aquella noche de octubre, Jagoba planteó algo que presumiblemente se parecerá más a lo que planteará en la final de Copa. Un 4-3-3 en ataque, con cuatro centrocampistas, que era un 4-5-1 en fase defensiva, con muchísimo jugador en el carril central y ayudas constantes fuera. Como se aprecia en las imágenes anteriores, Arrasate inhabilitó los pasillos interiores tapando pases y con buenos recorridos y se mostró agresivo con las recepciones exteriores de Vinicius.

David García es uno de los puntales del equipo. Líder indiscutible de la zaga y gran dominador del área con su juego aéreo y lectura y timing de centros laterales. Ante un Real Madrid que suele ser un equipo que prefiere la pared al centro, el juego interior al exterior, García queda más expuesto. Pero si logran llevar al Real Madrid a un estado de incomodidad en el que empiecen a centrar... ahí es muy difícil de batir. Y no solo por los duelos que gana.

Defensa hundidad tras un pase atrás de un extremo para que centre Tchouaméni.
Defensa hundidad tras un pase atrás de un extremo para que centre Tchouaméni.

Ante estas situaciones, Osasuna es un equipo valiente que no quiere hundirse. David García manda y mueve la línea defensiva hacia delante una vez vez que se prepara el centro lateral, algo que demuestra lo que busca el conjunto navarro: minimizar espacios, defender hacia delante el máximo tiempo posible y negar segundas jugadas.

García marca la línea defensiva, casi en la frontal a pesar de que el Real Madrid tiene la pelota muy cerca del área. Asume riesgo al dejar mucho espacio a su espalda, pero marca la intención.
García marca la línea defensiva, casi en la frontal a pesar de que el Real Madrid tiene la pelota muy cerca del área. Asume riesgo al dejar mucho espacio a su espalda, pero marca la intención.
El centro de Tchouaméni se pasea pre área rival y termina saliendo fuera.
El centro de Tchouaméni se pasea pre área rival y termina saliendo fuera.

Precisión, velocidad y determinación. Esto le exigirá Osasuna al Real Madrid en la final de Copa para superarles en un escenario que los rojillos dominan: prórrogas ante Betis y Sevilla, sobreviviendo en sus peores minutos y haciendo notar los buenos. De eso se trata Osasuna de Jagoba Arrasate, un equipo forjado bajo una competitividad enfermiza a prueba de bomba.