El poder de atracción de Carlos Alcaraz, la profesionalidad de Giráldez y un Iker Casillas de incógnito en un palco marcado por el plantón del Real Madrid: "Que no se líe"

Sevilla.- Como una catarata, las invitados más importantes a la final de Copa del Rey fueron entrando al palco de honor de La Cartuja a partir de las 21:00. El primero, antes de la hora como si tuviese que recibir al resto, el presidente de la RFEF Rafael Louzán, al que la afición le demostró cariño pidiéndoles fotos. Él correspondió con buen gesto a todo aquel que se le acercaba, con camisetas de Real Madrid o Barcelona. También con la prensa, respondiendo algunas preguntas antes de entrar.

Sin embargo, se explayó en los micrófonos de La 1: "Sin duda, hoy debe ganar el fútbol. Es un espectáculo internacional porque es un gran evento, lo que ha pasado todos lo conocen. Yo ya dije ayer que estaban muy tranquilo y que no iba a pasar nada en relación a los comentarios que ha habido. Hay mucha gente en esta ciudad, sobre todo por parte del Barcelona y el Madrid. Detrás de eso hay mucha gente que va a ver este partido. Por lo tanto, hay expectativa de ver el partido", dijo sobre lo sucedido ayer.

También abrió la puerta a que, en un futuro, la final de Copa la pueda albergar otra ciudad. "Hay posibilidad de que no sea el último partido aquí. Daremos oportunidad a todos los que quiera. Hay más interesados. Desde la Junta de Andalucía y Ayuntamiento me han trasladado en que tiene interés de que se siga disputado aquí en la cartuja. Sevilla es una grandísima ciudad para disputar este evento, vamos a ver qué pasa".

Tras él, también de los primeros en llegar, Medina Cantalejo, presidente del Comité Técnico de Árbitros. Lo hizo a la carrera, consciente de que no sale del foco, pero con buena cara y sin miedo a responder a los medios, aunque con cautela. "Muy bien, con muchas ganas". Le preguntaban cómo estaba después de lo sucedido ayer: "Bien, tranquilo".

Sin duda, el plantón de los blancos marcó el día y hasta alguno de los invitados bromeaba con el tema. "Que no se líe", decía un cargo importante del fútbol español, siguiendo con un "muy tenso", cuando se le preguntaba por la situación.

Justo antes de que comenzase el encuentro, entrando directamente al parking interior, llegó el Rey Felipe VI. Lo recibieron Rafael Louzán y Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía. Al monarca no lo acompañaba la Reina Letizia, pero sí dos ministras: Pilar Alegría y María Jesús Montero.

La puerta del palco de honor recibió una larga lista de personalidades, empezando por un magnético Carlos Alcaraz. Lesionado, no ha podido disputar el Mutua Madrid Open, pero ha aprovechado para ver a su equipo, el Real Madrid. La gente se le echó encima a pesar de la ayuda de la policía y la seguridad privada.

Otro hombre relacionado con el deporte, Claudio Giráldez, entrenador del Celta, llegó junto a dos miembros de su cuerpo técnico. Haciendo gala de su profesionalidad, explicó el por qué de su visita: "Jugamos contra el Madrid en siete días", dijo. No quiso opinar sobre el plantón del los blancos ayer, pero sí que destacó el nivel de arbitraje que hay en España.

Muchas personalidades de la cultura andaluza, como Los del Río, que desataron una pequeña locura. También Ángel Haro, presidente del Betis. Eso sí, ningún jugador o exjugador del conjunto verdiblanco o del Sevilla apareció por la puerta del palco presidencial. Si lo hizo Deco, director deportivo del Barcelona.

Entre las curiosidades, la de Iker Casillas. El exportero entró junto a sus hijos y el hijo de otro exjugador del Real Madrid. Sin embargo, no entró al palco, sino a la puerta exactamente contigua, la 2 de La Cartuja. Lo hizo de incógnito, con una gorra y unas gafas para que no le reconociesen, aunque hubo alguno que justo al entrar le vio y le pidió una foto.