ASTON VILLA - OLYMPIACOS

Emery - Mendilibar, el 'penúltimo' escaparate de Iñaki Ibáñez, el rey de los banquillos vascos

En las semifinales de la Conference League se enfrentan dos técnicos que crecieron de su mano, como ahora ocurre con Valverde, Xabi Alonso, Arteta o Iraola.

Emery y Mendilibar se saludan antes de un partido. /EFE
Emery y Mendilibar se saludan antes de un partido. EFE
Enrique Ortego

Enrique Ortego

Semifinales de la Conference League. Aston Villa-Olympiacos. Dos banquillos españoles. Unai Emery contra José Luis Mendilibar. Un guipuzcoano de Hondarrubia (52 años) contra un vizcaíno de Zaldívar (63). No es la primera vez que sucede una situación parecida. Ni mucho menos. Ahí están los Guardiola-Luis Enrique como duelo europeo ya consolidado. De hecho, se cumplen 60 años de la primera vez que dos técnicos españoles se enfrentaron entre sí en una competición continental. Fue en 1964, en la Copa de Ferias. El Zaragoza de Luis Belló (Cieza-Murcia) se impuso al Valencia de Mundo (Baracaldo-Vizcaya).

Unai Emery y José Luis Mendilibar tienen un fuerte nexo de unión. Los dos han crecido futbolísticamente de la mano de Iñaki Ibáñez, reputado representante donostiarra (60 años) con 35 años de experiencia y que se ha convertido en el auténtico 'rey' de los banquillos de los entrenadores vascos. Emery, desde 2015, ya no está en su 'cuadra' de técnicos. Pasó al 'Mendes-team'. Además de Mendilibar, Iñaki presume en voz baja de llevar, entre otros, los destinos de Xabi Alonso, campeón de la Bundesliga, en espera de la Europa League y la copa alemana; Ernesto Valverde, campeón de la Copa del Rey con el Athletic; Mikel Arteta, líder provisional de la Premier con el Arsenal, en dura competencia con el City de su ex-jefe Pep; Andoni Iraola, que en su estreno en la Premier con el Bournemouth va en el medio de la tabla y totalmente salvado; los Garitano, Asier (Tenerife) y Gaizka (ex-Almería), Iñigo Pérez (Rayo Vallecano)...

Los ahora responsables de los banquillos de Aston Villa y Olympiacos son dos viejos conocidos de la Liga española. Hasta en 15 ocasiones se enfrentaron directamente con sus respectivos equipos con balance favorable a Emery, que, también es verdad, siempre dirigió clubes de una mayor proyección deportiva y con más recursos económicos. Unai se vio las caras con José Luis con cuatro clubes diferentes (Almería, Valencia, Sevilla y Villarreal) por tres del de Zaldívar (Valladolid, Osasuna y Eibar). Los dos primeros duelos fueron en Segunda (Valladolid-Almería), los otros 13 en Primera. Los equipos de Emery se han impuesto en ocho partido, los de 'Mendi' en cuatro, con tres empates.

El roce de Ipurúa, «vino hecho un energúmeno»

En sus prolongadas carreras solo han compartido un club, el Sevilla, con dos importantes puntos en común: los dos ganaron la Europa League y ambos fueron reclutados para el club hispalense por la misma persona: Monchi, que ahora trabaja codo con codo con Unai en el club de Birmingham. Emery, que se sentó en el banquillo local del Sánchez Pizjuán desde 2012 a 2016 y conquistó tres títulos consecutivos. Mendi levantó la de 2023 en los pocos meses que le dejaron entrenar al equipo.

Se puede decir, además, compartiendo representante durante muchos años, que su relación siempre fue más que correcta, aunque el 17 de octubre de 2015, en un Eibar-Sevilla en Ipurúa, mantuvieron un pequeño altercado. Un jugador local quedó tendido en el terreno de juego y los jugadores sevillistas no echaron el balón fuera. Eran conocedores desde antes de comenzar el partido de que los equipos de Mendilibar nunca lo hacen. Las quejas no fueron del propio entrenador, sino de los jugadores del banquillo que parecieron olvidar que ellos tenían siempre órdenes de seguir el juego.

El incidente llegó en las respectivas conferencias de prensa. Mendilibar dio la razón a los jugadores rivales por no tirar el balón, pero mandó un mensaje a Emery. "Su entrenador ha venido como un energúmeno y no hemos podido hablar del asunto. Antes del partido habíamos decidido que el encuentro solo lo parara el árbitro en caso que se diera una jugada como esa". El partido concluyó en empate (1-1) y los andaluces acabaron enfadadísimos con el árbitro y reclamando dos penaltis.

De Villa Park al Bay-Arena: de Mendi a Xabi

Iñaki Ibáñez estará hoy presente en Villa Park para estar cerca de su representado, José Luis Mendilibar, que acaba de renovar por Olympiacos, como adelantó RELEVO. Seguro que si procede y se cruzan por el camino, existirá, también, un saludo a Unai Emery. A pesar de que el de Hondarribia, en junio de 2015, decidió cambiar de rumbo y marcharse con Mendes, el paso del tiempo ha medianamente mejorado la relación entre ellos y el estrechón de manos no faltará. Fueron casi 20 años juntos, desde que Unai era jugador. La semana siguiente, Ibáñez acompañará en el Bay-Arena a otro de sus 'chicos', Xabi Alonso, en su partido de vuelta de las semifinales contra la Roma en Leverkusen. La temporada pasada, ya estuvo a punto de darse en semifinales de la Europa League un Xabi Alonso contra Mendi, pero el sorteo enfrentó al Sevilla con la Juventus y al Leverkusen con la Roma. Mendi cumplió con su objetivo, pero Xabi se quedó en la orilla. En la final el de Zaldívar vengó al de Tolosa.

Iñaki Ibáñez, en su despacho.  IDUBGLOBAL
Iñaki Ibáñez, en su despacho. IDUBGLOBAL

Celoso de su trabajo y poco amigo de las comparecencias públicas y mucho menos de las entrevistas, Iñaki acepta recordar cómo son Unai y Mendi en las distancias cortas, cuando su futuro deportivo está en juego y se mantienen negociaciones con los clubes. "La verdad es que, en ese sentido, se parecen bastantes. No son dos 'brasas' de esos que están preguntándote cada hora como van las conversaciones. Son tranquilos. Confían en lo que hemos hablado con anterioridad y, después de tantos años, yo sé lo que cada uno quiere. Nunca me pasó que un mismo club se interesara por los dos a la vez. En ese sentido, Emery, después de Almería y pasar por el Valencia, siempre ha tenido una órbita de clubes pretendientes con más aspiraciones, mientras que a Mendi le han reclamado más como salvador de las causas difíciles y como siempre cumplía iba renovando y le seguían llamando", desgrana el representante.

Unai elegía los equipos en los que quería jugar

De las muchas situaciones vividas con ambos, Iñaki rescata un par de ellas de cada uno "Con el Unai jugador se vivía una situación distinta que con cualquier otro jugador que hemos tenido. Él me decía a qué equipo quería ir o que podría estar interesado en sus servicios. Como estaba al tanto de todo, buscaba un equipo donde supiera que podría jugar más fácil que en otro. Por ejemplo, me decía que en el Toledo estaba tal entrenador y que le gustaba que su equipo tuviera el balón y él sabía que ahí iba a encajar perfectamente. También me decía el equipo en donde faltaba un jugador desus características y entonces podría tener un hueco y menor competencia por el puesto... Lo sabía todo de todos. Era muy curioso", explica Ibáñez.

Émery, en uno de sus primeros trabajos como entrenador.  AGENCIAS
Émery, en uno de sus primeros trabajos como entrenador. AGENCIAS

También con Emery como protagonista, Ibáñez recuerda el segundo año de Lorca, en el que estuvieron a punto de subir a Primera, temporada 2005-06. "La temporada fue tan buena que nos llegaron muchas ofertas. El director deportivo del club era Pedro Reverte y recibió una oferta del Almería y nos dijo que se quería lleva a Unai con él para el banquillo. Negociamos con el Almería y llegamos a un acuerdo. Nos íbamos con Reverte. Entonces resultó que el Lorca le presionó mucho, le hizo una gran oferta y Reverte se quedó como director deportivo. La situación era extrañísima, nos íbamos a un club porque nos fichaba el director deportivo y resulta que llegamos a Almería y no había nadie en el cargo y fue casi Emery quien recomendó a Roberto Olabe, a quien conocíamos de San Sebastián y después de todo aquel embrollo subimos a Primera y comenzó el gran despegue de Unai como entrenador: Almería, Valencia, Spartak de Moscu, Sevilla..."

Mendi pudo fichar por el Deportivo... pero se rajó

Con Mendi como testigo de cargo, las anécdotas y las vivencias se multiplican porque son aún más años juntos. Ambos jugaron en el Sestao a finales de los 80. "Es que con Mendi es como con Xabi Alonso. Yo llevé al padre de Xabi, a Periko, al Eibar como entrenador. A Xabi le conozco desde que tenía 9 años, con lo que estamos viviendo ahora, después de todo lo que ya vivimos como jugador, está siendo impresionante.

De Mendi recuerdo una buena. Jugaba en el Sestao en Segunda y ya llevaba unas buenas temporadas. Debería tener ya 28 años y nos llama el Deportivo que le quiere fichar. Y da la casualidad de que la primera jornada de Liga es Deportivo-Sestao. En Riazor. Allá que nos vamos. Él a jugar y yo a negociar antes del partido, claro, con Lendoiro. Llegamos a un acuerdo. Costó, era Lendoiro, aunque fuera el de la primera época. Y con todo arreglado, Mendi que se echa para atrás... Que si la familia, que si ya tenía la ikastola para los hijos, que si estaba muy lejos de casa... Y nada que con todo arreglado para firmar antes del partido, no firmó y volvió a casa con el equipo". Esa tarde el Deportivo de Arsenio ganó (1-0) al Sestao de Ziarreta y Mendilibar jugó los 90 minutos", cuenta el representante.

Mendilibar, en su época como entrenador del Lanzarote.  AGENCIAS
Mendilibar, en su época como entrenador del Lanzarote. AGENCIAS

Como entrenador, Mendi no ha hecho ninguna parecida. Reconoce Ibáñez que es muy pragmático. "Sabe siempre lo que quiere. No se complica la vida. Su teoría es que si en un club no te quieren, porque empiezas a perder, no vale de nada tener un contrato firmado. Por eso, últimamente, vamos con él de año en año. Los últimos en Eibar, la segunda temporada en Sevilla, que la primera fueron tres meses. Aquí en Olympiacos igual. Pudo firmar una segunda temporada al llegar y no quiso. Al mes y poco le llamaron para renovar. Y renovamos. Un año. Lo que ya nos habían ofrecido, pero la situación ya era distinta. Ya le conocían y el presidente confió rápido en él", apunta Ibáñez.

Emery y Mendi al margen, Ibáñez atraviesa, posiblemente, su mejor época como representante, sobre todo en lo que a entrenadores se refiere. "No es casualidad lo que nos está pasando ahora. Casi siempre hemos tenido tres o cuatro entrenadores de media en clubes de Primera. Los entrenadores ya tienen más años y suelen ser fieles. Son más difíciles de engañar. A algunos los tuvimos ya como jugadores, Hemos hablado de Xabi, pero con Valverde igual, jugamos juntos. Todavía seguimos teniendo en la empresa más jugadores representados que entrenador, lo que pasa es que este año por todo lo que está pasando se habla más de nuestros técnicos. Les ha dado a todos por ganar y qué vamos a hacer...", concluye.