EUROCOPA | RUMANÍA - UCRANIA

La charla secreta de Mourinho que emociona e inspira a Rumanía: "Si fuera mi entrenador, me comería el césped y al adversario"

El técnico se rindió ante los héroes del 94 en la celebración del partido que conmemoró los 30 años del Mundial de Estados Unidos.

Jose Mourinho, aplaudiendo a los héroes rumanos de 1994. /Ionuț Iordache (GSP.RO)
Jose Mourinho, aplaudiendo a los héroes rumanos de 1994. Ionuț Iordache (GSP.RO)
Alberto Martínez

Alberto Martínez

Lo que iba a ser un documental de época, con la participación de futbolistas que participaron en aquel Mundial de Estados Unidos de 1994 como Diego Simeone, Batistuta, Stoichkov o Romario, se convirtió finalmente en un partido en el Arena Nationala de Bucarest ante 55.000 espectadores y una selección de estrellas mundiales. Enfrente la gran Rumanía. Los cuerpos atléticos se cambiaron por barrigas prominentes como la de Gica Hagi, mientras que otros como Raducioiu o Belodedici mantenían el porte; no, claro, la velocidad. "Algunos de vosotros sois ya abuelos, y os mantenéis en forma", se rindió el entrenador de la selección rival, nada más y nada menos que Jose Mourinho. Protagonista de un partido de época.

Por el lado rumano formaron Prunea; Petrescu, Prodan (hijo del fallecido Daniel Prodan), Belodedici, Munteanu; Sabau, Lupescu, Popescu, Hagi; Dumitrescu y Raducioiu. También estuvieron Stelea, Selymes, Mihali, Papura, Vladoiu, Preda, Stinga, Ivan y Moldovan, Filipescu, Sabau, Lacatus e Illie. Y por el lado de las estrellas, Balones de Oro, campeones europeos o mundiales. Dida, Maicon, Panucci, Djukic, Candela, Edmilson, Giovanni, Rivaldo, Karagounis, Nuno Gomes, Stoichkov. Frey, Kobiashvili, Fernando Couto, Juanito, Bodin, Zaccardo, Karembeu, Litmanen, Senna, Inler, Pandev y Saviola. El partido acabó 3-2 a favor de Rumanía con goles de Galca, Hagi y Panduru. Rivaldo y Pandev marcaron para los visitantes.

Si en el césped se vivieron momentos emocionantes, como la inmensa lona desplegada en memoria de Prodan, fallecido en 2016 a causa de un infarto mientras veía la televisión, la presencia emotiva de su hijo sobre el césped y la vuelta de honor de los héroes del 94, con lágrimas muchos de ellos, recordando momentos únicos en sus vidas. La web KodroMagazine recoge la opinión del capitán Hagi: "El público volvió a estar con nosotros, porque es difícil olvidar las actuaciones que hicimos. Lo que me llamó la atención fue que todo el mundo vino con niños. Vi a muchos niños en las gradas, eso significa que realmente hicimos algo, aunque hayan pasado los años. La gente no nos olvida".

«Nos habló cinco minutos y nos dimos cuenta de su grandeza»

Quien también quedó prendado de aquella selección fue Jose Mourinho, invitado de lujo y que sorprendió al equipo rumano antes del partido. El técnico portugués entró en el vestuario y, según los presentes, se hizo el silencio y su manera de comunicar y su discurso le puso la piel de gallina a los jugadores, incluso a algunos les arrancó una lágrima. Raducioiu lo retiene así en su memoria: "Nos habló cinco minutos. Fue tremendo. Nos dimos cuenta todos su grandeza y el porqué ha llegado tan alto en los banquillos. Cómo se expresa y cómo comunica", explica el que fuera goleador de aquella selección con cuatro tantos.

"Nos habló de pasión. Habló de Popescu, que lo tuvo en el Barcelona con Robson. Nos dijo que hicimos historia, que nos admiraba y que para era un honor poder estar en Bucarest y en ese vestuario en un día tan importante. Nos dio las gracias por hacerle protagonista de una noche inolvidable. Nos dijo que era como alzar una copa al mundo, de que para él también nosotros fuimos una selección a recordar. Aún se me pone la piel de gallina al recordarlo", añade Raducioiu. "Si fuera mi entrenador saldría a comerme el césped y el adversario".

El seleccionador actual de Rumanía es Edward Iordănescu, el hijo del que llevó a los cuartos de final y a solo un penalti de semifinales al equipo de 1994, por lo que él también se ha empapado de los valores de aquella selección y ha sido testigo directo de sus andanzas. El Mundial del 1994 lo pilló con 16 años, pero apenas dos años después ya hizo su debut en el primer equipo del Steaua de Bucarest.

El éxtasis frente a Argentina y las lágrimas irreparables ante Suecia

El camino de la selección rumana en el Mundial de 1994 fue inolvidable para un país que apenas unos años antes había derribado el talón de acero. La generación formada en los años 80 se unió para formar un equipo militarizado pero de talento, con jugadores que principalmente emigraron a Italia. En la fase de grupos, derrotaron a Colombia por 1-3 y a Estados Unidos por 0-1 mientras que perdieron 4-1 ante Suiza. Su victoria más estruendosa llegó en los octavos de final por 3-2 ante Argentina después del escándalo de Diego Maradona y su positivo ante Grecia.

Pero el campeonato acabó entre lágrimas en semifinales. Rumanía estuvo clasificada con un tanto en la prórroga que neutralizó Suecia al final. Y por 4-5 los nórdicos pasaron a semifinales. Rumanía se fue para casa cabizbaja pero su campeonato ha quedado grabado a fuego en el país. "La gente nos sigue mostrando su cariño, pero ya queda lejano", explica Constantin Galca. "Sigo firmando autógrafos", añade Raducioiu. Ambos esperan que Iordanescu lidere como el padre a la selección rumana en esta Eurocopa. El debut, con el discurso de fondo de Mourinho, este lunes a las 15:00 contra Ucrania.