España ya está aislada en la Selva Negra entre el temporal, campos de golf y restaurantes Michelin
La expedición llegó al que será su cuartel general a última hora de este domingo. Su hotel, el resort Der Öschberghof, dispone de todo tipo de lujos y comodidades.
Donaueschingen (Alemania).- Entre relámpagos, un tormentón propio del invierno más duro y con alrededor de 50 curiosos a su espera. Así llegó la Selección española a las 21:00 horas de este domingo al que será su cuartel general durante todo el torneo, el hotel Der Öschberghof, un resort de cinco estrellas con tres campos de golf, 5.000 metros cuadrados de spa, un restaurante de dos estrellas Michelin e innumerables comodidades más que frenarán cualquier atisbo de agobio entre De la Fuente y sus pupilos durante la concentración. Lo que amenaza con perturbar es el temporal: los jugadores se empaparon al bajarse del bus y se prepararán para el debut con temperaturas infinitamente más bajas que las de los amistosos en Badajoz y Palma.
Todo estaba preparado para recibir como se merece a una tricampeona de Europa. Un toro pintado de rojo en la carretera que dirige al complejo, banderas de España entre los aficionados, una comitiva para hacer un pasillo a los futbolistas en la entrada... Sólo el agua aguó la fiesta. Desde fuera, además, se pudo observar que hasta en el comedor había un trozo de nuestro país: los internacionales cenarán en mesas de siete y con La 1, que sigue el desenlace de las elecciones europeas, en la televisión.
La elección de este lugar se realizó a conciencia, después de estudiar decenas de opciones y convencidos de que optar por un retiro monacal sería la mejor. Eso es lo que se respiraría si no fuese por los rayos en el corazón de la Selva Negra, una región montañosa situada en el suroeste de Alemania: puro silencio. La Roja vivirá durante las próximas semanas alejada del mundo, a siete horas en coche de la capital Berlín y en un paraje de ensueño ubicado a pocos kilómetros de los Alpes suizos y el paradisíaco lago de Constanza. Los técnicos priman la tranquilidad y aislarse del ruido. Villingen-Schwenningen, ciudad alemana de unos 85.000 kilómetros, es la localidad más cercana (15 minutos). Friburgo está a una hora y Stuttgart y Zúrich a una hora y cuarto. España residirá, reirá y llorará en el medio de la nada.
En cualquier caso, el equipo dispondrá de condiciones inmejorables para afrontar el día a día y un tapete inmaculado para entrenarse a sólo cinco minutos: la ciudad deportiva del SV Aasen, un club que milita en el barro del fútbol germano y que se ha convertido en los últimos tiempos en anfitrión de los gigantes. El verano pasado, por ejemplo, el Liverpool de Klopp ya trazó el mismo plan que los de De la Fuente (dormir en Der Öschberghof y ejercitarse en la Sportplatz de Aasen). También lo hizo el Wolfsburgo y Xabi Alonso copiará el destino para que su Bayer Leverkusen realice aquí un stage de pretemporada entre el 28 de julio y el 2 de agosto. La zona se puso de moda en 2006, coincidiendo con el Mundial que acogió el país, y desde entonces Bayern, Borussia Dortmund o hasta el propio Barça, en 2021, han disfrutado del mutismo del bosque.
A esta hora La Roja ya comprueba las bondades del complejo, visitado in situ por el seleccionador y Albert Luque (ex director de la Selección) el pasado mes de diciembre. Al lujo de sus 127 habitaciones se le suman unas instalaciones de gimnasio de máximo nivel, piscinas para la regeneración y hasta tres campos de golf repartidos en 200 hectáreas. Seguro que a algún futbolista viciado a este deporte, como a un Morata que hasta organiza torneos a través de su fundación, le entran ganas de probar el swing.
A modo de curiosidad, hasta el campo base han viajado dos camiones cargados de material deportivo (sobre todo ropa de gimnasio), productos de nutrición o material de marketing de la Federación. Se contabilizan, en total, unos 70 bultos con prendas de entrenamiento, una cantidad bastante más elevada de lo habitual. El motivo son las temperaturas: habrá variaciones importantes en cuanto al clima en función de dónde se juegue y de cómo avance el verano. En Donaueschingen se prevén lluvias y unos 15 grados de media durante los próximos días.
Sólo saldrán para jugar
La expedición arribó en el búnker después de volar desde Palma de Mallorca, donde golearon ayer a Irlanda del Norte, hasta el aeropuerto de Stuttgart. Los futbolistas disfrutaron de una noche libre en la capital balear y se tomaron el día de hoy como jornada de viaje. Será mañana, en una sesión abierta al público a partir de las 19:00, cuando vuelvan a calzarse las botas.
El plan del staff es que España sólo abandone el campo base para disputar los partidos. Aunque tienen la opción de hacerlo, la idea de la Selección es no entrenarse el día previo en el escenario del encuentro y pisar los estadios únicamente para jugar. Así se hará en el debut contra Croacia del próximo sábado: el equipo trabajará el viernes por la mañana en Aasen, viajará por la tarde a Berlín para que el entrenador comparezca ante la prensa, pernoctará en la capital y jugará al día siguiente en el Olympiastadion. Para favorecer la recuperación entre partidos, un factor que obsesiona al entrenador, se hará noche en la ciudad donde se disputen los duelos (el día 20 se miden a Italia en Gelsenkirchen y el 24 a Albania en Düsseldorf).
Hay pocos días entremedias y la prioridad es descansar bien. El preparador ya quiso introducir esas rutinas en los amistosos previos ante Andorra e Irlanda del Norte: la Selección se entrenó en Las Rozas y tan sólo pisó los coliseos de Badajoz y Palma para competir. Lo llamativo aquí son las distancias, pues España hará vida a 750 kilómetros de Berlín, casi 600 de Gelsenkirchen y 500 de Düsseldorf. El avión reducirá los traumas.
Y habrá otro ojo puesto en la alimentación: no se trae comida de fuera, pero sí a un cocinero propio que supervisará las recetas de los internacionales. No se deja ningún detalle al azar, porque el objetivo es ganar la cuarta y para superar por el camino a rivales de la talla de Francia, Inglaterra, Alemania o Portugal deberán mimarse todos los aspectos que rodean al juego.
El plan de la Selección para la próxima semana recoge una sesión en horario vespertino (mañana) y otras cuatro en franja matinal (a las 11:00 el resto de días). Y cuando la pelota ruede se olvidará el descanso que proporciona la Selva Negra: habrá puñetazos por un puesto y varios futbolistas deben rodarse para llegar en su mejor estado de forma. Es claro el caso de Laporte, que se incorporó más tarde y debe ganar en velocidad, y se colocará el foco en Dani Olmo, el único futbolista de campo sin minutos en los partidos de preparación. El catalán, Pedri y Fabián se juegan dos puestos en el estreno contra la Croacia de Modric.