De la Fuente refuerza su staff pero nadie hace aún de Luque en la Eurocopa a la espera de Alemany
El seleccionador eleva dentro de su equipo a Juanjo González, antes analista y técnico de porteros. Francis, ayudante del director destituido, cuestionado y relevo más natural, no viajó a Alemania.
Donaueschingen (Alemania).- La Selección, como consecuencia de la galopante crisis institucional que ha vivido la Real Federación Española de Fútbol desde que Luis Rubiales se viniera arriba en agosto para luego ir sin freno hacia abajo, ha llegado a Alemania sin director deportivo. Y parece que afrontará la Eurocopa que arranca este viernes sin que nadie ocupe ese cargo y sin que alguien, con nombramiento o sin él, realice esas funciones oficialmente.
Desde el momento en el que Albert Luque fue destituido por burofax el pasado 15 de mayo por estar investigado en la Audiencia Nacional -por supuestas coacciones a Jenni Hermoso y con una petición de cárcel incluida por parte de la Fiscalía-, De la Fuente ha pedido por activa y por pasiva un sustituto. Ya lo hizo recientemente en una entrevista en este medio. No quiere ser él el que se ocupe de las relaciones con los clubes, de los temas organizativos más allá de los terrenos de juego y del hecho de tener que ser siempre un portavoz de la casa. Sin embargo, la Federación todavía no ha podido contentarle con un relevo de garantías que asuma ese mismo rol. Su intención siempre ha sido la de esperar a después de los Juegos.
Y no será sencillo. Esa persona antes se ocupaba de infinidad de cosas, desde buscar la sede de la concentración hasta mantener una relación fluida con los internacionales, lesionados y jugadores convocables o negociar las primas (desveladas por Relevo) con los capitanes. Y tiene que ser bien visto por la plantilla, que al final es con la que más interacciona al hacer de enganche entre el palco y el vestuario. Por eso, mientras le pasan propuestas de todo tipo, Pedro Rocha está esforzándose mucho en intentar convencer a Mateu Alemany para que coordine esta rama deportiva desde lo más alto y ha habido contactos en las últimas horas. Pero el balear aún se lo está pensando, necesita más convicción y quiere atar su contrato sin que haya grietas porque tiene menos prisas que los demás: pasar de querer ser presidente de la RFEF -como se planteaba hace unos meses- o haber sido un pilar en el Barcelona y el Mallorca, a simplemente ocupar un cargo en un trasatlántico, es un diferencia tan abismal que conviene consensuarla a conciencia y digerirla.
Con este panorama, queda una pregunta en el aire: ¿quién realiza ahora esas funciones que antes hacía Luque? Pues, resumiendo bastante, se podría decir que muchos y a la vez nadie. La RFEF considera que el grueso del trabajo organizativo para esta fase final y para los Juegos de París, donde compiten la selecciones olímpicas masculina y femenina, ya está hecho desde hace ¡meses. E incluso, los más ácidos, aseguran que la figura de responsable de la Selección es más un puesto representativo, de puro maquillaje, que sirve de escudo al seleccionador antes que cualquier otra cosa. Vamos, que Stajanov no ocuparía jamás ese puesto en el organigrama.
Una estrategia de transición
Sin embargo, el seleccionador, ante esta falta de soluciones (que no pasividad) a la vacante ofertada, ha ido reforzándose a su modo. Sobre todo para poder hacerse cargo de parte de las labores que hacía Luque (por cierto, con el carnet de director deportivo desde hace dos meses), al mismo tiempo que delega más dentro de su staff para que todo siga bajo control dentro de la Selección, que es lo que más le importa. Por este motivo, desde hace tiempo ha elevado a Juanjo González. El asturiano, con Luis Enrique, era entrenador de porteros (él lo fue) y analista, y ahora ha pasado a ser técnico auxiliar como tercer entrenador por detrás de Pablo Amo. A los guardametas los dirige desde enero de 2023 una eminencia en la materia como Miguel Ángel España.
Además, De la Fuente ha contado desde el primer día en la Absoluta con gente de su máxima confianza en el pasado para todo lo que sea menester. Aunque no tengan que ver con esa faceta técnica que englobaba Luque. Pero eso es lo que le hace estar tranquilo y seguro para poder atender, sin despistarse, esas otras demandas que está teniendo que atender y que desea quitarse de encima cuanto antes. Es el caso de Paloma Antoranz, histórica jefa de prensa y coordinadora, entre cosas, del Media Center español en Alemania. O Paco Noguera, el team manager de la Sub-21, que también está arrimando el hombro en todos los temas administrativos mientras Nuria Martínez, team manager de la Absoluta desde hace años, sigue más pegada al campo.
Pero aunque todas las manos posibles son bienvenidas para el cuerpo técnico de la Selección, lo cierto es que nadie está por encima de ellos como cara visible. Y con Rocha en un segundo plano, con la vigilancia del Gobierno, más. Quizás lo más normal ante esta situación de vacío de poder alrededor de la dirección deportiva de la Selección hubiera sido ser paso a Francis Hernández, responsable de las categorías inferiores. De hecho, era un habitual en la expedición del primer equipo cuando estaba Luque. Estuvo en la Nations League de Países Bajos y en varias concentraciones en suelo español cuando no tenía compromisos con las categorías inferiores (con Molina y Luis Enrique no solía estar). Sin embargo, de momento no ha viajado a Alemania y si lo hace será en algún partido. Como tampoco lo ha hecho su mano derecha Tito Blanco.
Fuentes internas aseguran que los motivos para que no estén, como otras veces, cerca del primer equipo se deben única y exclusivamente a que su responsabilidad se circunscribe a todo lo relacionado con la base y que vienen del Europeo Sub-17 y ahora tienen por delante el Sub-19 y los Juegos. Otros responsables de la RFEF hablan de la pérdida de confianza en ellos e incluso, como ha venido contando Relevo, vuelven a deslizar que serán los próximos profesionales puramente deportivos que salgan de Las Rozas. Con Alemany o sin Alemany; con otro director técnico o sin él.