Antes de Jude Bellingham y Lamine Yamal estuvo Jetro Willems: "La Eurocopa fue increíble, jugaba a la Play con Robben, Van Persie..."

Lamine Yamal ha batido récords de precocidad en esta Eurocopa. Con 16 años y 338 días, en el partido de estreno de la Selección española ante Croacia se convirtió en el futbolista más joven en debutar en la competición. El podio lo completan el polaco Kacper Kozlowski (17 años y 246 días) y la estrella del Real Madrid, Jude Bellingham (17 años 349 días). Ambos tuvieron su puesta de largo en la pasada edición de la Eurocopa.

Pero antes de todos ellos, el 'recordman' fue Jetro Willems (30 años). El neerlandés fue convocado a la Eurocopa de 2012 por Bert van Marwijk y debutó con la elástica Oranje en la Eurocopa a los 18 años y 71 días ante Dinamarca. Aquella marca batió un registro que pertenecía al belga Enzo Scifo desde hacia casi tres décadas (1984). Más de 10 años después, el lateral izquierdo ha atendido a Relevo para valorar su trayectoria y aquella Eurocopa.

Willems se crio en Rotterdam, donde daría sus primeros pasos como futbolista en el Spartaan '20. "Mi pasión y mi amor por el fútbol provienen del barrio en el que crecí. Allí, el amor por el deporte es inmenso". Pronto daría el salto como profesional al Sparta de Rotterdam. Debutó con 16 años en el primer equipo y sus buenas actuaciones en la Segunda División de Países Bajos propiciaron el interés del PSV, que se haría con sus servicios. Una decisión tomada más por parte del club de Rotterdam.

"El Sparta padecía dificultades económicas y, como tenía un talento importante, ya se hablaba de que me fuera a otro club para ayudarles económicamente. Tenía varias opciones, pero el último día, el PSV llamó a mi agente y le expresó su interés. Inmediatamente decidí unirme al PSV", expresó el lateral.

En su primera temporada, que estaba destinada a ser de adaptación en el filial del PSV, tuvo una irrupción destacable. Después de la lesión del lateral izquierdo titular, Phillip Cocu apostó por Willems y no defraudó. Fue titular 29 partidos durante ese curso y mostró una exuberancia impropia para un futbolista de 18 años. Sus grandes actuaciones fueron premiadas con la convocatoria para la Eurocopa de 2012, la competición posterior al subcampeonato del mundo que habían logrado los neerlandeses.

Compartiría vestuario con leyendas del fútbol holandés como Arjen Robben, Robin Van Persie o Wesley Sneijder. Aunque los resultados no acompañaron (fueron eliminados en la fase de grupos), Jetro fue titular en los tres partidos de la Eurocopa y estableció el récord mencionado. Fue su único gran torneo con Países Bajos y guarda un enorme recuerdo.

"Resultó una experiencia increíble. En aquella época, llegar a la selección nacional siendo un jugador joven era un logro importante. Después de que el equipo llegara a la final del Mundial, me ayudaron a integrarme y adaptarme, no sólo a través de los entrenamientos, sino también estrechando lazos. Jugaba a la PlayStation con Robben, Van Persie...", señaló Willems.

Un torneo que, aunque no tuvo los resultados esperados, destapó el interés de varios clubes europeo por Willems. En cambio, el jugador quería seguir progresando en su país. "Soy una persona humilde y honesta. Quería demostrar mi valía en varias temporadas, no sólo en una. Me sentía bien en el PSV, me trataban bien, así que no sentí el deseo de marcharme".

Su carrera parecía despegar y el límite era el cielo. El viento iba de cara, pero las lesiones aparecieron pronto. Sufrió 13 lesiones en su rodilla durante su trayectoria deportiva, entre ellas dos roturas del ligamento anterior cruzado. Momentos que fueron muy complicados para Jetro. "El periodo más difícil de mi vida no sólo fue exigente físicamente, sino también mentalmente", comenzó el futbolista. Duras situaciones, pero que sirvieron como aprendizaje. "Estoy agradecido por esa experiencia, ya que me enseñó mucho sobre la vida", zanjó el lateral.

Su carrera le llevaría por Alemania e Inglaterra y ahora, con 30 años, sigue disfrutando del fútbol en el Heracles de la Eredivise. Un futbolista que, aunque haya vivido la peor cara del fútbol, tiene claro que nada ni nadie le borrará su sonrisa y una Eurocopa con Países Bajos.