Joao Felix y su oportunidad para dejar de ser un problema
No ha sido una opción para Roberto Martínez en ninguno de los 10 cambios que ha hecho en la Eurocopa mientras el Atlético ve cada vez más complicado venderlo.

La Eurocopa de Joao Félix está muy lejos de ser lo que muchos esperaban. Sin tener todavía muy claro lo que va a pasar con él durante el verano, el Atlético de Madrid confiaba en que pudiera revalorizarse durante el torneo para intentar recuperar algo de los 120 millones de euros que costó y lograr venderlo antes de que empiece la temporada 2024-25. Una nueva cesión al Barcelona, que parece ser lo que él quiere, queda como la opción a la que resignarse por parte rojiblanca. Los azulgrana no lo ven mal, pero sin que les cueste ni un euro más que la temporada pasada.
Porque mejorar su cartel, de momento, no lo está consiguiendo: cero minutos y no ha sido una opción para Roberto Martínez, su seleccionador, en ninguna de las diez sustituciones que ha realizado entre los partidos de Chequia y Turquía. Nada. Quizá ahora, con todo resuelto, en el partido que les enfrentará a Georgia en Gelsenkirchen encuentre la oportunidad que necesita. Que necesita él, y el Atlético de Madrid. "A veces se pone en tela de juicio mi profesionalidad y mi pasión por este deporte. Hay cosas que son mentira, que se inventan", explicó ayer en rueda de prensa el jugador. Además aseguró que se fue antes del final del duelo contra Turquía porque fue "al baño".
Sin embargo, tiene varios factores en contra: para empezar Cristiano Ronaldo lleva cero goles y no se le ve nada satisfecho con sus números. El 7 luso tiene que jugar, es su última Eurocopa y es bastante poco probable que vaya a aceptar quedarse en el banquillo en una situación en la que, además, se enfrentan ya sin presión a un rival a priori inferior y con la opción de que se convierta en un partido de muchos goles. No es CR7 muy de perderse estas fiestas, que lleva 209 partidos con Portugal, 130 goles... y muy pocas ganas de que esas cifras sigan igual al final de la Eurocopa de Alemania. O forma pareja con él, o la ponta de lança lusa parece tener nombre y apellidos clarísimos.
El otro factor que deja a Joao Félix (al menos hasta ahora), fuera de las quinielas de las alineaciones está totalmente vinculado al ritmo: son muchos en Portugal los que piden el balón al pie. Y él, de los que más. Martínez necesita gente más vertical, que rompa un poco al espacio, que la pida en carrera y tire desmarques. Bernardo Silva, Bruno Fernandes... son jugadores de recibir al pie. El Cristiano de 2024 cada vez es más de pedirla también al pie y sólo Rafa Leao está ahí para ir en carrera, encarar y buscar el espacio. Es decir: de 9 porque es territorio CR7, y por detrás tiene que amoldarse a lo que piden, o esperar que Bernardo Silva y Bruno también tengan descanso. Algo que contra Georgia es bastante probable.
"Hay clubes por los que ya he pasado por esto de no jugar a veces. Por suerte o por desgracia, me ha hecho saber reaccionar bien a estas situaciones. Soy uno más. Estoy para cuando la selección me necesite", zanjó él.
La relación con Roberto Martínez, sin embargo, es buena. Fuentes cercanas al seleccionador luso confirman a Relevo que hablan mucho, que a pesar de lo que muestran las estadísticas es un jugador importante para él y que, al menos por ahora, no ha habido ningún problema de vestuario entre ellos. De hecho circuló un bulo en las redes sociales que algunos medios dieron por bueno, acerca de una fuerte discusión entre ambos, pero nada más lejos de la realidad. Él lo desmintió ayer: "Vi esta noticia. Eso es mentira, claramente. De lo contrario no estaría aquí. Y es sólo otra falta de respeto hacia mí, hacia el míster y la selección en general", sentenció.
"Es verdad que no está contando mucho durante esta Eurocopa pero todos sabemos que a Roberto Martínez le gustan mucho las características de Joao. Su manera de irse hacia dentro... en función de cómo vaya el partido puede ofrecer otras soluciones diferentes a Rafa Leao. Nunca ha dejado de venir a la selección con él, incluso en los momentos más complicados suyos en el Barcelona. Todavía puede tener un papel importante en esta Eurocopa", explican a Relevo fuentes de la expedición portuguesa.
Su cara, sin embargo, no es tampoco de estar muy contento: pasó por la zona mixta como un rayo, sin querer responder a nadie y todavía menos a los medios españoles, para no tener que afrontar ninguna cuestión sobre su futuro. El miércoles tendrá una oportunidad, ya veremos de cuántos minutos, para demostrar a toda Europa que sigue siendo el jugador que desequilibra partidos (y que vale millones), no el problema que todos quieren quitarse de encima.