Laporte acelera y Rodrigo ya se sabe la hoja de ruta con las amarillas

Aasen (Alemania).- Ahora sí que sí, Luis de la Fuente tiene a sus 26 jugadores en pleno estado de revista para el vital partido de mañana ante Italia en Gelsenkirchen (21:00 horas, por La1). Aymeric Laporte completó su segundo entrenamiento a máxima intensidad, el primero en el que entra en el partidillo, desde que una contractura en el aductor derecho el pasado jueves le obligara a bajar el ritmo durante cinco días. Por tanto, estará disponible mañana aunque apunta al banquillo.

El central hizo el mismo trabajo que el resto en la sesión de hoy. Y fue dando feedback durante el mismo tanto a los compañeros que le preguntaron por sus sanciones como a los técnicos y fisios. El internacional del Al-Nassr está como loco por estrenarse en la competición y volver a ser importante ya que no compite en partido oficial desde el pasado 23 de mayo.

El cuerpo técnico no quiere arriesgar lo más mínimo con un futbolista al que consideran vital en el esquema de su equipo. Por sus conceptos defensivos y también por su aseada salida de balón y los cambios de orientación que tan bien explota. El hecho de que Le Normand y Nacho estén dando un gran nivel, con un partido muy completo en el debut frente a Croacia, permite que nadie meta prisas al jugador hispano-francés. Si todo marcha bien, la idea es que su estreno llegue de inicio en el tercer partido ante Albania.

De la Fuente cuida hasta el más mínimo detalle. Si estos días se ha encerrado con su staff para estudiar a Italia a fondo, con sus dos variantes de jugar con cuatro o cinco atrás, también tiene ya mascado el minucioso reparto de minutos a ejecutar en esta fase de grupos. Con Morata y Rodrigo, que arrastraban molestias, quiere ser especialmente cauteloso. Ambos se entrenaron este miércoles a tope y dejaron atrás sus preocupaciones.

Precisamente con Rodrigo hay un plan en marcha que públicamente nadie aireará pero que todo el mundo tiene en cuenta. El líder del City, y uno de los capitanes de la Selección, recibió una amarilla en Berlín al verse obligado a hacer un penalti tras el fallo de Unai Simón con los pies. Ese contratiempo le hace estar en alerta y apercibido ya que a la segunda amarilla que vea tendrá que cumplir un partido de sanción.

El hecho de que hasta semifinales no se limpie la acumulación de tarjetas, obliga a La Roja a trazar una estrategia. Y el primer paso y más lógico sería que la vea mañana, en caso de que todo vaya sobre ruedas, para causar baja en el tercer partido con la clasificación a octavos ya en el bolsillo. Así también descansaría. De lo contrario, si no la ve porque el encuentro está muy igualado y no hay lugar a los caprichos, Rodrigo podría entrar en octavos con un lastre ya que ante Albania es carne de banquillo.

De la Fuente, de puertas para afuera, no quiere ni oír hablar del futuro. Esto es 'cholismo' puro y partido a partido. Pero internamente sabe como nadie que en una fase final las victorias se deciden por detalles. Y si el de Laporte desata el optimismo, el de Rodrigo deja entrever cierta preocupación.