Morata hace de DJ en la discoteca de España en la que se mezcla el reguetón y AC/DC

Düsseldorf (Alemania).- Suena a tópico, pero los integrantes de la expedición de la Selección prometen que no lo es. Un futbolista importante, todavía emocionado tras arrasar a Italia, no necesitó preguntas para revelar el secreto de este equipo en los pasillos del Arena AufSchalke: "Ganar está bien... pero es que somos muy buena gente. Sólo me había encontrado una vez en mi vida un grupo así". La camaradería se palpa en los entrenamientos y en los gestos: el abrazo de hermanos entre Carvajal y Lamine ante Croacia, que Cucurella y Grimaldo no se separen pese a batallar por un puesto, que por el grupo de WhatsApp no dejen de circular memes de Marc, el pasillo del staff a los jugadores después de vencer en el debut...

Todos se mantienen unidos en vísperas de culminar la fase de grupos este lunes contra Albania (21:00, La 1) y que el domingo empiece lo importante. Como el partido ante los de Sylvinho es intrascendente y las piernas ya pesan, el cuerpo técnico decidió plantear varias sesiones muy suaves esta semana; ayer, según pudo saber Relevo, primó el fútbol-tenis y el viernes los futbolistas ni siquiera salieron del hotel. Allí conviven la mayoría del tiempo entre partidas de golf, Play, la sauna y el spa. Tantas horas juntos dan para conocerse mejor y para bromear con gracia sobre peinados, rutinas, el futuro de Nacho, los deberes de Lamine... y hasta los gustos musicales.

En el campo base de Aasen, además de tres terrenos de juego, la RFEF ha instalado una carpa de gimnasio que llama la atención de aficionados y curiosos por el potente sonido que sale desde dentro. Es la discoteca de la Selección, con música a todo trapo cuando terminan las sesiones y los internacionales realizan trabajo con pesas o, como este sábado, mientras pasan un rato divertido picándose al baloncesto.

Como no podía ser de otra forma, Relevo ha podido saber que allí el DJ es el que manda: el capitán Álvaro Morata. El delantero se ha convertido en una referencia para todos y en el líder espiritual de un equipo que agradece su papel. Los jóvenes, entre ellos Lamine, Nico y Fermín, se pegan a él en las sobremesas y le riñen de vez en cuando por sus preferencias en Spotify. Le importa poco. Es flexible para ceder la conexión Bluetooth y no le importa que el que pinche sea Álex Remiro, otro de los que se impone. Carlos Alberto Cruz, preparador físico, también marca el ritmo de vez en cuando. Siempre quiere que haya música para motivar.

Dado que la mesa de mezclas pasa por un puñado de manos, los estilos y artistas se entremezclan. Predomina el motivamente reguetón, pero también retumba el techno y hay lugar para el rock, como reconoció Mikel Merino en una entrevista reciente con este medio: "A mí, por la influencia de mis padres, un poquito de Dire Straits o de AC/DC siempre me entra bien". La canción Me la llevo, del compositor e intérprete madrileño Javi Medina, es una de las preferidas de los internacionales. Los cantantes Quevedo, Darell, Bad Bunny, Feid o Anuel AA, con temas como Lollipop, Perro Negro, Monaco u OA, también se cuelan en el top de preferencias que da sonido a las estancias en hoteles y en el vestuario.

De la Fuente se pasa habitualmente por la carpa y, aunque le gusta toda la música y está más que actualizado a sus 63 años recién cumplidos, le gustarían otros estilos dentro de la plantilla. O que los DJ fueran Jesús Navas o Fabián. A él le va más el producto nacional, el flamenco y hasta las sevillanas. De hecho, cuentan sus amigos más cercanos que las baila en la Feria de Sevilla con muy buen estilo.

Merino, en su conversación con este medio, reveló algún detalle curioso del grupo de mensajería que comparten los 26 internacionales. "Para el nombre no somos muy originales. Es bastante básico. Lo que es original son los mensajes que se mandan dentro. Se pasan muchos memes de Cucurella últimamente", contó entre risas. Morata vuelve a presumir de brazalete en varios aspectos: "Es el administrador y el que más habla, para decirnos lo que nos toca hacer y si hay reuniones nuevas".

Los 'stickers' con los que avasalla Zubimendi y los memes de Fabián ("envía muchos") se intercalan con recordatorios de horarios y mensajes de ánimo y fuerza. Merino, en cambio, es de los que prefiere mantenerse en segundo plano: "Intervengo cuando hay que intervenir, cuando es importante o cuando tengo algo que de verdad es divertido y a la gente le va a gustar. No soy de escribir por escribir". Todos aportan su granito de arena para que España presuma de ser lo que obsesiona a los técnicos: una familia. Y, como en toda casa, también hay peleas por lo que se escucha... Eso sí, a nadie le importará lo que pinche Morata si la fiesta grande es el 14 de julio.