EUROCOPA | PORTUGAL 0 (3) - ESLOVENIA 0 (0)

Portugal 'salva' del infierno de los penaltis a Cristiano como él hizo con Moutinho: "Sé fuerte, ahora está en manos de Dios"

El del Al-Nassr persiguió a su compañero para que lanzara, después de que este no quisiera por fallar en una tanda de 2012. La historia se repite, a la inversa, ocho años después.

Moutinho y Cristiano Ronaldo, en un partido con Portugal./ARCHIVO
Moutinho y Cristiano Ronaldo, en un partido con Portugal. ARCHIVO
Jonás Pérez

Jonás Pérez

Cristiano Ronaldo recibió en octavos lo que él mismo dio en 2016. Un gesto unánime, de compañerismo, de ensalzar el valor del grupo por encima de la individualidad. Un ejemplo que aprendieron de él. El '7' falló el penalti que pudo abrir el marcador en la prórroga entre Portugal y Eslovenia. Tras la gran intervención de Oblak y un córner, el colegiado señaló el descanso. Entonces, el jugador del Al-Nassr llegó al banquillo y rompió a llorar, consciente de que su error individual le pudo costar la eliminación a su selección. Rápidamente, todos sus compañeros acudieron a consolarle, le besaron, le abrazaron y le recordaron que es uno de los líderes del equipo y que todos pueden fallar. Una absoluta inyección de confianza antes de una tanda que llegaría tras la disputa de los siguientes 15 minutos. El exmadridista, que suele lanzar en quinta posición, quiso esta vez coger la responsabilidad y chutar el primero.

Entonces, lanzó como siempre. El primero ya fue notable, pero la parada de Oblak se llevó la matrícula. El segundo, absolutamente imparable, entró a la izquierda de la portería, sin que el meta del Atlético de Madrid pudiera alcanzar el balón pese a adivinar sus intenciones y su gran estirada. ¿Pero cómo llegó Cristiano al lanzamiento? Con una confianza absoluta, no solo por su personalidad, sino por el trabajo y esfuerzo de sus compañeros en insistirle en que no bajara los brazos. Algo que ocurrió exactamente del mismo modo en el año 2016, con el portugués al otro lado de la escena y con Moutinho como principal implicado.

Para entender el valor de lo que entonces ocurrió, toca echar la vista atrás a las semifinales de la Eurocopa 2012. España logró eliminar a Portugal y ganar posteriormente el título. Fue, de nuevo, en una tanda de penalti. Joao Moutinho fue el primero en lanzar. Pese a ser un especialista, se encontró con un soberbio Iker Casillas y erró. Cosas de la narrativa: precisamente en esta eliminatoria el mítico guardameta español ha pasado de nuevo al primer plano gracias a que fue el primero en bendecir al héroe Diogo Costa cuando este aún era un desconocido.

De vuelta a la historia en cuestión, aquel error le costó caro a Portugal y supuso un duro golpe psicológico para Moutinho. Cuatro años después, en el mismo torneo, en la Eurocopa 2016, el equipo portugués volvió a jugarse el pase de ronda en una tanda de penaltis. En cuartos de final, concretamente. Fue ante Polonia. Moutinho lanzó el tercer penalti y lo transformó. Blaszczykowski erró el cuarto y los portugueses sellaron el pase a semifinales. Y acabaron ganando aquella edición, gracias al gol de Éder en la prórroga de la gran final.

Moutinho fue uno de los protagonistas de aquella tanda que pudo acabar de forma trágica. El jugador recordó antes de su arranque lo que había pasado en 2012 y se escondió. Se alejó de todos los lanzadores, de la discusión de quién decidiría el futuro de Portugal. No quería saber nada. No quería volver a quedar señalado. Volver a ser el que fallaba. Entonces Cristiano Ronaldo ejerció de líder, y, como ahora sus compañeros le devolvieron la moral, entonces fue él el que 'salvó' a su compañero.

Las lágrimas de Cristiano Ronaldo.
Las lágrimas de Cristiano Ronaldo.

El '7' fue a por él. Le gritó: "Ey, ey, tiras. Ven a tirar. Vamos. Los tiras bien. Si perdemos, así es. Sé fuerte. Vamos. Sé fuerte. Los tiras bien. Vamos. Ahora está en manos de Dios". Cristiano le recalcó una y otra vez que no pasaría nada, le dio la confianza que entonces necesitaba para tirar. Cuando Moutinho convirtió la pena máxima, el entonces jugador del Real Madrid le disparó: "Te lo dije. Te lo dije".

Aquel gesto de Cristiano Ronaldo fue la representación del espíritu de equipo que había en esa plantilla. Después se demostró con el título. Ahora, ocho años después, las tornas se han invertido. Fue el '7' el que falló el penalti y sus compañeros los que se volcaron con él para que levantara la cabeza y les condujera a cuartos de final. Quién sabe si el del Al-Nassr hubiera lanzado sin ese apoyo, pero lo hizo. Cogió carrera, chutó con la derecha y Oblak no tuvo nada que hacer. Un penalti que empezó doce años antes, en una parada de Iker Casillas a Joao Moutinho. El fútbol y sus historias.