🏆 ESPAÑA, CAMPEONA DE EUROPA

La Selección pone patas arriba Madrid con show de Morata: "Puede que la meta o no, pero siempre me dejo la vida"

El capitán de la campeona ejerció de maestro de ceremonias en una celebración multitudinaria en Cibeles.

Los jugadores de España mantean a Luis de la Fuente./EFE
Los jugadores de España mantean a Luis de la Fuente. EFE
Jorge C. Picón

Jorge C. Picón

Algo más de un año ha pasado desde que la Selección Española celebrase el título de la Nations League en el Wizink Center y lo que han cambiado las cosas desde entonces. Aquella fiesta estuvo marcada por los insultos de "calvo" a Luis de la Fuente y los abucheos a Gavi. El ambiente no podía estar más enturbiado a pesar del triunfo. 392 días y una Eurocopa después, la afición y el equipo se funden en uno solo durante una jornada que recordó a las de los mejores años de la Selección. Porque la mayor victoria de este equipo ha sido devolver la ilusión a la gente, como demostraron con una rúa con la que se cruzaron con decenas de miles de personas.

Discurso de Morata en Cibeles.

La diosa Cibeles se puso de gala para recibir a los campeones. Los asistentes bajaban en cascada desde la calle Alcalá, la Gran Vía y el Paseo de la Castellana. Teñida de roja y a reventar de gente que esperó durante más de cinco horas a 30º grados para ver a los héroes de la cuarta de España. Pero ver a la nueva generación dorada del fútbol nacional merecía la pena. De Remiro a Olmo. De Joselu a Vivian. De Lamine a Carvajal. Todos se han ganado un espacio, por pequeño que sea, en el corazón del aficionado.

Morata salió primero a dar la cara por todos, pero una muy amable. Los aplausos, mayoritarios, silenciaron algunos pitos por parte de la afición. España sí lo quiere. Después, con sus palabras, se terminó de ganar a todos. "Ha sido gracias a que todos vosotros habéis creído en nosotros, y lo hemos notado. Ha sido un orgullo ser el capitán de esta Selección, me siento representado por todos vosotros. Puede ser que a veces la meta y a veces no, pero siempre me dejo la vida. Tenemos el mejor país del mundo, la mejor comida, los mejores sitios de vacaciones, los mejores trabajadores, los mejores agricultores. ¡Somos el mejor país del mundo y somos campeones de Europa!", gritaba mientras que la afición coreaba su nombre.

Presentación de Cucurella en Cibeles.

Presentó uno a uno a todos los miembros del equipo. Pero antes, se acordó de los últimos campeones: "Iker Casillas, Fernando Torres, David Villa, Xavi, Iniesta, Sergio Ramos, Gerard Piqué, Víctor Valdés y todos los que me voy a olvidar... Ellos nos enseñaron a luchar". Después, la euforia, con todos los internacionales, cada uno con su canción preferida y Morata como maestro de ceremonias.

Se manteó a Oyarzabal, se pidió el Balón de Oro para Rodrigo -aunque Joselu señalaba a un Carvajal que salió sin camiseta-, se felicitó a Lamine por aprobar la ESO y se desveló algún cántico secreto del vestuario. Dani Olmo o Nico fueron de los más aclamados, pero ninguno se quedó sin su minuto de gloria. Como Cucurella, que cantó una canción y después se soltó el pelo por petición popular.

Así recibió la Cibeles a Gavi.

Terminó con Gavi, el jugador 27, y con Luis de la Fuente. Ambos coreados por el público de manera unánime. El primero dio las gracias con Cibeles, por raro que parezca, cantando su nombre. Al segundo lo mantearon mientras sonaba Julio Iglesias sacó músculo mientras Morata decía que tiraba "150 kilos en press de banca". "Este equipo es el ejemplo para toda España. Unidos somos más fuertes. Viva España", gritaba.

Después, turno para invitados especiales. Cantó Aitana, apareció Ibai y un familiar muy especial: el padre de Mikel Merino, Miguel. Se colocaron dos banderines de córner para que celebrasen como en el gol que ambos, como si de una cuestión del destino se tratase, marcaron ambos, marcaron en Stuttgart. Después, Patxi Salinas, íntimo de De la Fuente, para cantar juntos una canción de Julio Iglesias en uno de los momentos de la noche. Algún jugador no daba crédito.

Y despidió la fiesta la canción de moda. Isabel Aaiún y su 'Potra Salvaje' retumbaron por las calles de Madrid como lo hacía antes y después de cada partido en el vestuario de la Selección. Un himno que se escuchará durante años y que hará recordar a un grupo de jugadores que ya está en la historia del fútbol nacional.

Antes se cruzaron media capital en un autobús descapotado. Lamine y Nico, para variar, siempre juntos bailando y cantando. También sus familias, cómplices en la zona habilitada para ellos. Resulta hasta normal que relacionen al del Athletic con el Barcelona...

«Rodri is on fire».

Abrieron el día con los reyes, don Felipe VI y doña Letizia, en el Palacio de la Zarzuela. El plan era que sólo ellos recibiesen a lo jugadores, pero se sumaron en el último momento la princesa Leonor y la infanta Sofía. No pasó desapercibido sus saludos a Lamine Yamal, nacido en el mismo año (2007) que la segunda hija de los reyes.

Después, directos a La Moncloa para ser recibidos por Pedro Sánchez. La visita al presidente estuvo marcada por la imagen de Rocha muy cerca del primer ministro, evitada durante toda la Eurocopa por el ejecutivo, y el saludo de Carvajal, algo más que frío. No tardó en hacerse viral en redes sociales.