La sombra del portero suplente de Ucrania se cierne sobre el destino de Lunin: "Estamos en la Eurocopa por una mano suya..."

Düsseldorf.- "Fuimos castigados muy rápido por un error cuando teníamos controlado el juego y el balón. En estos torneos, los errores te castigan mucho. A veces hay que jugar más sencillo", explicó Sergei Rebrov desde la sala de prensa del Allianz Arena de Munich. Los focos apuntaron a toda la Selección, pero no con la misma intensidad. Andrey Lunin recibió más luz por sus errores, especialmente en los dos primeros tantos. La relación del meta ucraniano con la selección ha estado llena de casualidades, y empezó esta temporada con opciones, incluso, de no acudir a esta Eurocopa de Alemania o de ocupar el rol de tercer portero.

Lunin, formado en el FC Metalist Kharkiv, ciudad atacada por Rusia desde el comienzo de la guerra, destacó siempre en categorías inferiores y estaba predestinado a ser un portero de nivel, pero nunca se le presupuso que sería capaz de ocupar la portería del Real Madrid, el actual ganador de la Champions. En Ucrania hay otros buenos porteros, especialmente el talentosos del Benfica de solo 23 años Anatoliy Trubin, quien se hizo cargo de la portería desde 2022 y hasta noviembre de 2023.

Trubin, joven talento, que incluso es titular en el Benfica (ha jugado 28 encuentros de Liga), sustituyó al veterano Georgiy Bushchan, de 30 años, quien ocupó la portería desde 2020 hasta 2022 y dejó su puesto al joven meta. Lunin es el que más años lleva en la selección pero el que menos jugó hasta el último playoff de clasificación para la Eurocopa en el que la selección ucraniana eliminó a Bosnia. Pero a partir de ahí, cambió todo.

"No jugaba en el club", argumentaban desde dentro. Pero ser titular en el Real Madrid con buenas actuaciones a causa de la lesión de Courtois hizo cambiar de opinión a Rebrov. Lunin se convirtió en el portero del playoff ante Bosnia, y una mano salvadora metió a Ucrania en la Eurocopa. Ocurrió ante Bosnia. Los ucranianos iban perdiendo 0-1 y Pjanic lanzó una falta colocada que Lunin salvó con la mano derecha cuando todos creían ya el balón entrada. Después, en tres minutos, Yaremchuk y Dovbyk anotaron el 2-1.

"Todos los focos se centraron en Yaremchuk, pero se valoró desde dentro la mano de Lunin, fue la acción clave. Estamos en la Eurocopa por esa mano", cuentan en la selección de Rebrov. Apenas faltaban diez minutos y saben que el 0-2 hubiera sido definitivo. Después del 0-3 ante Rumanía, la prensa tildó al meta de "acción imprudente" y de "ver venir" el 0-2. "El primer error cambió el curso del partido, he pedido disculpas. Lo siento mucho por mis compañeros, mi error ha complicado el partido", remarcó el meta después del encuentro.

Aquel Lunin se reafirmó como el meta titular pero de nuevo las circunstancias le han virado muy rápido. Su futuro en el Real Madrid con su renovación apalabrada, su suplencia en la final de la Champions por la recuperación de Courtois y ahora este estreno amargo en la Eurocopa. El destino de Lunin en Ucrania da giros, como ya le ha ocurrido en el Real Madrid.

En el club blanco ya se le achacaban dos acciones técnicas al meta que le han ido lastrando a lo largo del curso y que se evidenciaron ante Rumanía. El 0-1 llega de un error con los pies del guardameta, un error en la salida: entrega el balón directamente a Man, que cede atrás, y al primer toque la clava Stanciu cerca de la escuadra. Y, poco después, está a punto de recibir un gol olímpico al calcular mal la trayectoria del esférico por arriba. El juego de pies y sus dudas en las salidas son dos de los aspectos que hacen fruncir el ceño a Ancelotti. La tarde de ayer le dio la razón al técnico italiano. No fue el día de Lunin en una Ucrania que le acogió como titular por su titularidad en el Real Madrid.