Eliminatoria de Champions del Barça en la Europa League

Si algo tienen en común Barcelona y Manchester United es que son dos grandes en pleno proceso de transformación, de retorno. Desde el banquillo, tanto Xavi como Ten Hag viven su primera temporada completa desde el inicio de curso y han tratado de acelerar los pasos de sus proyectos con grandes inversiones. Un Cristiano Ronaldo en horas bajas, un Varane irregular y un Casemiro cada vez más protagonista aportarán el punto picante a un partido más de Champions que de Europa League.

"Tenemos el rival más complicado, de nuevo. Es el más difícil que nos podía tocar, iremos a Manchester, en un rival que ha crecido mucho con Ten Hag, nos ha tocado el peor rival que nos podía tocar", valoró Xavi.

En verano, Ten Hag aterrizó en Old Trafford sin saber si podría contar con Cristiano. El portugués intentó cambiar de equipo, pero su exigencia por encontrar un equipo de Champions le hizo permanecer en Mánchester. Llegó incluso a estar apartado del equipo tras negarse a entrar en el descuento como suplente y retirarse al vestuario antes de que acabara un partido contra el Tottenham.

Sus números han bajado en picado y la Europa League es la única competición en que tiene la titularidad asegurada. Aun así, Xavi no se fía de Cristiano. "Tienen grandes jugadores, destacaría el grupo. Lo analizaremos bien para contrarrestar sus fortalezas. Es un gran equipo, no solo por Cristiano. Tienen la necesidad de ganar. Me parece un gran jugador y puede marcar diferencias todavía

Ten Hag ha intentado reconstruir un club que no logró enderezar su rumbo con Ralf Rangnick. El alemán, ingeniero de la factoría Red Bull, tenía que terminar la temporada como entrenador y sumarse a la estructura deportiva, pero todo quedó en nada. Ahora, Ten Hag ha aportado por una nueva mirada, aunque no todos los elementos de la plantilla se adecúan a sus pretensiones.

El United mantiene a De Gea en la portería, termina contrato en verano y el club tiene la opción de ampliar por una temporada más. En la línea de defensas, Lisandro Martínez ha liderado el cuadro inglés. A su lado, pese a que Maguire sigue muy por debajo de lo que demostró campañas atrás, Varane tampoco ha sido el que demostró en el Bernabéu. En las bandas, Ten Hag opta por laterales jugando por dentro, similar al planteamiento de Xavi.

En la sala de máquinas, a Casemiro le costó hacerse con la titularidad. Ahora es uno de los líderes del equipo. A su lado, Eriksen se ha readaptado a un rol más de creador que de mediapunta. Por delante, la estrella del equipo: Bruno Fernandes. El portugués es el corazón del equipo, todas las posesiones pasan por él. En las alas, extremos abiertos. Jadon Sancho, apuesta millonaria de los ingleses hace algunas temporadas, no ha sido el que aparentaba. En el costado derecho, la gran apuesta veraniega: Antony, la pieza más desequilibrante. En la punta de ataque, Rashford le ha arrebatado la titularidad de Cristiano.

El Manchester United es un equipo en crecimiento. Tiene nombres -Lisandro, Casemiro, Bruno- sobre los que sustenta la estructura. Aun así, aún está lejos de ofrecer una versión competitiva que les permita competir por las primeras plazas de la Premier League. El Barça tiene mejor plantilla. El United es la oportunidad de los blaugranas para volver a preparase para competir contra los grandes de Europa. Aunque sean gigantes dormidos.