LIGA INGLESA

La expulsión de Leila Ouahabi que refleja una doble vara de medir en el arbitraje de la liga inglesa

Las decisiones de las árbitras en la primera jornada vuelven a poner en tela de juicio las actuaciones arbitrales en la WSL.

Leila Ouahabi durante un partido con el Manchester City. /MANCHESTER CITY
Leila Ouahabi durante un partido con el Manchester City. MANCHESTER CITY
Sandra Riquelme
Nagore Domínguez

Sandra Riquelme y Nagore Domínguez

El domingo arrancó la Women's Super League (WSL) -la liga inglesa- y lo hizo con polémica. Una falta de Leila Ouahabi (Manchester City) a Emma Harries (West Ham) terminó con una tarjeta roja y tres partidos de sanción para la española. Antes, en el partido entre el Aston Villa y el Manchester United, Kirsty Hanson también fue expulsada por una entrada más dura en la que chocó con su pie en el brazo de una rival al intentar despejar un balón.

Las reacciones de Leila y sus compañeras fueron claras. La decisión generó estupefacción en el club inglés. La lateral del City se marchó al banquillo pidiendo explicaciones y sin entender la decisión que la cuarta árbitra dictó a la principal por el pinganillo desde la banda, donde tenía una mejor visión. Además de la expulsión, la española se perderá los siguientes tres partidos (Chelsea, Bristol City y Leicester City) después de que el Manchester City recurriera la sanción y se la denegaran.

Un caso parecido al que ocurrió en el partido entre el Aston Villa y el Manchester United. Tras la expulsión de Kirsty Hanson, el Villa también recurrió la sanción y se la denegaron. "Apelamos la decisión con la esperanza de que Kirsty estuviera disponible para la selección más pronto que tarde, pero no tuvimos éxito", publicó el propio club mediante un comunicado. Además, la jugadora asumió su error en sus redes sociales: "Una actuación de la que estamos orgullosos y un error del que aprenderé".

La doble vara de medir

La primera jornada de la liga inglesa dio para mucho. En el encuentro entre el Chelsea y Tottenham (2-1), Lauren James estuvo en el foco. Además de marcar el segundo gol del encuentro para las locales, volvió a protagonizar una jugada polémica en la que, tras caerse al suelo en un lance de partido, golpeó con los tacos en el rostro de Olga Ahtinen, su rival.

Solo habían pasado dos minutos de partido cuando sucedió. En este caso, Lauren James no vio ninguna tarjeta y terminó el encuentro, una decisión que pone en tela de juicio las actuaciones arbitrales en la WSL, uno de los temas principales desde hace años.

Esta jugada recordó a la que la delantera del Chelsea hizo durante el Mundial. En octavos de final, contra Nigeria, la delantera pisó la espalda de Michelle Alozie y fue sancionada con dos partidos. De nuevo, tras un forcejeo, ambas jugadoras terminaron en el suelo y al levantarse Lauren James pisó "disimuladamente" la espalda de su rival. Al principio, vio una tarjeta amarilla, pero cuando entró el VAR, se convirtió en roja.