Ewa Pajor se reencuentra después de dos operaciones de rodilla

Este fin de semana volvió la Bundesliga femenina y parece que todo sigue igual. Ewa Pajor se encargó de demostrarlo. Tres minutos le hicieron falta para volver a reencontrarse con su mejor aliado: el gol. Janssen metió un pase largo desde su propia área que ninguna jugadora del Friburgo fue capaz de interceptar. El balón cayó a escasos metros de donde estaba Ewa, la delantera más peligrosa de la liga, e hizo lo que mejor se le da. Se adelantó a su marca, dejó pasar el balón para ganar por velocidad a la central y terminó mandando el balón al fondo de la red.

Este gol fue especial porque, con él, ascendió al top uno de máximas goleadoras de la Bundesliga hasta el momento, con 9 tantos en 9 partidos jugados. Enfrente tenía a Janina Minge, jugadora con la que llegaba empatada a 8 goles a este encuentro. Pero Pajor demostró por qué es una de las mejores delanteras que hay jugando en Alemania y Europa a día de hoy. Además, no solo tiene este logro en liga, sino que también es la máxima goleadora en Champions hasta el momento con 7 goles.

Sus números de cara al gol no son propios de una delantera cualquiera, sino de una de las más letales. Es la delantera de la liga alemana, con al menos 300 minutos jugados, que más remates hace por partido, con una media de 7,15. Durante la temporada ha demostrado ser un "ratón de área" que pelea cada balón dentro de su territorio como si fuera el último. Rechace que cae, rechace que caza. Esto le lleva a ser también la atacante con mayor media de goles por partido (1,36). Su doblete en la primera jornada hacía presagiar que esta temporada podría volver a ser la Ewa Pajor de años atrás.

Es una delantera completa. No solo es buena y está de dulce de cara a portería, sino que también entiende el juego y se asocia con sus compañeras. Hasta el momento lleva cinco asistencias, las mismas que consiguió la temporada pasada en la liga. Es la segunda delantera de la Bundesliga con mayor media de asistencias por partido (0,68) y también la segunda con mayor media de pases clave (1,87). Además, es una jugadora ágil que se deshace de los rivales, no solo ganándoles en velocidad, sino que también lo hace con el balón en los pies. Esto le lleva a ser la delantera que mayor porcentaje de regates exitosos tiene (76%).

Después de firmar su mejor temporada con el Wolfsburgo, consiguiendo el pichichi de liga (18/19) al marcar 24 goles en 19 partidos, Ewa Pajor vivió la cara más amarga y más difícil de digerir del fútbol. En septiembre de 2020 tuvo que ser operada de su rodilla izquierda, lo que le apartó de los terrenos de juego durante seis meses e hizo que se perdiera la mitad de la temporada 21/22.

Su mala racha no acabó ahí. En la siguiente campaña (21/22) se vio obligada, de nuevo, a pasar por quirófano para poner a punto su rodilla izquierda. La misma que le había dado problemas en la temporada anterior. Tras otros seis meses centrada en la recuperación total de su rodilla, reapareció de manera prematura para jugar varios minutos contra el Arsenal en Champions.

Ahora, tras dos temporadas tocando fondo, Ewa Pajor está reencontrándose con ella misma y con el gol. Sus números están volviendo a ser los que pertenecen a una jugadora que es clave en un equipo que aspira a volver a convertirse en uno de los grandes de Europa y pelear por la Champions.