La selección femenina de Escocia emprende acciones legales contra su propia Federación en busca de la igualdad
La capitana del equipo nacional, Rachel Corsie, es la demandante principal y ya ha emitido un comunicado.
La lucha por la igualdad en las condiciones de trabajo es la bandera que desde hace tiempo enarbola el deporte femenino. Sobre todo en el mundo del fútbol, que quiere usar la potencia de su altavoz para hacer ver las desigualdades que siguen existiendo entre ambos géneros a la hora de practicar deporte.
Las últimas en levantar la voz han sido las jugadoras de la selección escocesa de fútbol, que han emprendido acciones legales contra su propia federación por la falta de igualdad tanto en las primas de las selecciones femenina y masculina como en las condiciones de trabajo de ambos equipos nacionales.
Rachel Corsie, jugadora del Arsenal y capitana de la selección escocesa, es la demandante principal ante el Tribunal laboral escoces y ha emitido un comunicado en el que habla de los motivos que la han llevado, junto a sus compañeros, a demandar a la Federación para exigir un contrato en el que se estipule la igualdad salarial y de trato con respecto a sus colegas masculinos. También piden una mejora en temas como hoteles, entrenamientos, viajes y equipamiento, además de recursos médicos.
"Todo esto es para que todos los futbolistas profesionales sean tratados de la misma manera", aseguró Corsie en conversación con la BBC. "Después de años de desigualdad, faltas de respeto e incluso abusos, ahora tenemos una oportunidad histórica para promover la igualdad salarial y el trato para mujeres y niñas en el fútbol. Esta campaña es en favor de la paridad y buscaremos el consenso con Federación y aficionados para lograr este cambio tan esperado".
"Después de años de desigualdad, faltas de respeto e incluso abusos, ahora tenemos una oportunidad histórica para promover la igualdad salarial y el trato para mujeres y niñas"
Capitana de la selección escocesaLas jugadoras de la selección escocesa, entre las que está por ejemplo Caroline Weir o Erin Cuthbert, quieren que su federación emule el comportamiento de otras como la estadounidense o la irlandesa, que paga lo mismo a hombres y a mujeres por sus partidos internacionales. Una petición a la que ya ha respondido el ente federativo con un comunicado.
La Federación Escocesa responde
"Ningún jugador o jugadora recibe dinero por sus partidos con la selección. Es y siempre debería ser un privilegio y no un trabajo. Nuestras selecciones masculina y femenina reciben unas dietas por su tiempo con los equipos nacionales y son las mismas desde 2017".
En el mismo comunicado la Federación Escocesa asegura que "comparte la visión fundamental de nuestra selección nacional femenina de que la igualdad debe estar en el centro del desarrollo del juego en todos los niveles". Y añade en un comunicado: "Seguimos comprometidos con acelerar el crecimiento del fútbol femenino".
Oras jugadoras como la madridista Weir, internacional con Escocia en 93 ocasiones, ya han hablado en otras ocasiones sobre las diferentes condiciones que tienen con respecto a sus homólogos masculinos. "Aunque hemos visto algo de crecimiento, ha sido fruto de impulsar nuestro propio cambio. Por ejemplo en lo que respecta a patrocinios, los pagos de los acuerdos se destinan de forma abrumadora al sector masculino y este es un ejemplo de prejuicio hacia otro grupo de deportistas. Si se hubiera repartido igual, habría un aumento espectacular en la financiación del fútbol femenino, que sería transformador".
La noticia llega meses después de que la selección nacional femenina de fútbol de Estados Unidos y su organismo rector, la U.S. Soccer, acordaran resolver una disputa de años sobre la igualdad salarial en lo que las jugadoras describieron como un momento histórico para el deporte.