FÚTBOL

'Mono' Burgos y la charla con Joan Laporta tras salir de Movistar por su comentario sobre Lamine: "Me abrazó, me dijo 'se nos ha ido de madre'"

El argentino reaparece en Relevo y cuenta cómo fue el encuentro con el presidente del Barça tras su comentario sobre el joven culé. Desde su despido de Movistar no ha vuelto a trabajar, pero ganas no le faltan.

Mono Burgos, en el césped del Metropolitano, en 2023. /Getty
Mono Burgos, en el césped del Metropolitano, en 2023. Getty
Lorena González

Lorena González

Poco se sabe de Germán Burgos desde abril del año pasado, de hecho, en estos últimos meses no ha vuelto a realizar ninguna aparición pública y elige Relevo para reconocer cómo está, si ha superado el desagradable momento que vivió tras su comentario sobre Lamine Yamal en Movistar y cuáles son sus planes de futuro.

El ex portero colaboraba por entonces como comentarista y aquella noche le tocaba analizar el PSG - Barça de Champions. Durante la previa, se emitieron unas imágenes de Lamine realizando malabares con el balón. Y a eso exactamente se refirió Burgos cuando soltó la frase que le costó cara. "Si no le va bien en el fútbol, puede ganarse la vida en un semáforo". Sonó como un desprecio hacia el futbolista, con tintes racistas, aunque él mantiene que no era más que un elogio. Acostumbrado a un país donde es común ver a malabaristas en los semáforos, sólo pretendió resaltar las habilidades que tiene Lamine con el balón. Burgos fue castigado ipso facto, incluso por Xavi Hernández, y despedido de Movistar de forma fulminante. Pronto quiso explicarse, pero para algunos ya era tarde. Lo hizo en público y en privado, contactando con Joan Laporta y el propio Lamine y su entorno, pero no hubo respuesta. 

Desde entonces, no ha vuelto a trabajar, ni como técnico ni en los medios de comunicación.

Ahora, Germán nos atiende desde su casa madrileña de Majadahonda junto a su familia, donde mantiene intactas sus ganas de entrenar, su humor y una charla sin rodeos: "No me quedo quieto en ningún momento, siempre me estoy moviendo y buscando proyectos y no sólo en Primera. Tengo ganas de entrenar, estoy buscando proyectos a largo plazo, que es lo difícil, he rechazado 17 ofertas porque no se adecúan a lo que quiero. Me encanta la figura de manager, la que se creó en Inglaterra y se sigue en algunos casos en España, donde mínimo tienes dos años de trabajo. Pero los equipos buscan cosas rápidas".

Se le puede ver a menudo por Butarque viendo al Leganés o en campos de Segunda división. El caso es ver fútbol, y no tendría problemas en 'bajar al barro', ese que le gusta, el que mamó también como portero: "Lo que busco para conseguir una dinámica de trabajos y objetivos, no cuadran los tiempos. Tampoco tengo ninguna prisa ni problemas en bajar de categoría. Voy viendo fútbol, me invitan a los campos, también al Rayo y al Atlético de Madrid". En realidad, es raro encontrarle por el Metropolitano, aunque echa balones fuera bromeando con su particular ironía: "Lo que pasa es que no tengo amigos con palco".

Sin embargo, en Vallecas sí se dio un episodio que hasta ahora no había contado: "Justamente, en esas idas y venidas a los estadios, en el del Rayo me encontré con Laporta, nos dimos un abrazo y me dijo "se nos ha ido de madre". Estuvo muy afectuoso y cariñoso y me dijo si quería ir al club un día. Le respondí que me encantaría, yo soy procantera y están haciendo las cosas muy bien con los pibes. ¡Hasta me llamó 'Mono'!".

Germán supo en ese momento que el presidente del FC Barcelona había comprendido su comentario sobre Lamine: "Es que él es de fútbol. Es decir, nosotros somos gente de fútbol, nos conocemos y me entendieron. Y voy a ir a verlos".

Y si tuviera delante al bueno de Lamine Yamal, ¿qué le diría? "Que siga de la misma forma, que lo está haciendo maravillosamente, y que en cualquier momento, juegue para mí", se ríe, y todo es más sencillo porque para él nunca hubo maldad o desprecio en sus palabras e intención, sino todo lo contrario.

Por ello, tampoco guarda ningún resentimiento: "No me dolió nada, lo revertimos rápidamente porque se entendió claro lo que quise decir, a mí me dicen Mono. Es más, me di de baja yo en Movistar, eso no cualquiera lo hace. Llamé al día siguiente para decirles que les dejaba el camino libre. Cuando uno está firme en sus convicciones, no hay dolor", sentencia, y a pesar de mostrar su conciencia tranquila, se nota que tiene ganas de zanjar el tema y empezar a hablar de eso que tanto le gusta y que se niega a abandonar. El fútbol. Lo hará pronto aquí, en Relevo.