Alejandra Silva, la hija de un 'vice' de Lorenzo Sanz, convirtió a Richard Gere al madridismo, pero el Goya Internacional pesa más que el derbi
El actor de Filadelfia, de la mano de su esposa Alejandra Silva, estuvo en la final de la Undécima en Milán como invitado de honor del club y desde entonces se confiesa aficionado merengue
![Alejandra Silva y Richard Gere a su llegada a Granada para la ceremonia de entrega de los Goya. /AFP](http://s2.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202502/07/media/cortadas/richard-guere-alejandra-RLMJT0AJBbNod7StOEN5ZgK-1200x648@Relevo.jpg)
El Goya Internacional 2025 pesa más que un Real Madrid-Atleti. Lógico. Por muy amante del soccer, el otro futbol para los norteamericanos, y por muy madridista confeso que se proclame, Richard Tiffany Gere, 75 años, es esencialmente actor y este sábado estará en Granada y no en el palco de honor del Santiago Bernabéu donde hubiera podido estar presenciando el derbi en directo siempre de la mano de su 'evangelizadora' esposa, Alejandro Silva, que le suele arrastrar hacia el estadio donde desde muy jovencita gritaba los goles del equipo blanco.
La relación del actor de la Filadelfia, 75 años, con el fútbol nació, creció y se desarrolló desde que en 2014 en Positano, territorio donde el Nápoles es una religión, conoció a su actual esposa. Alejandra es hija de Ignacio Silva Botas (62 años) que a finales de 1995 llegó a la vicepresidencia económica del Real Madrid de la mano del recién nombrado presidente, Lorenzo Sanz. Dimitió Ramón Mendoza y su 'delfín' tiró para adelante con una Junta directiva escasa de miembros y de recursos económicos. Era su gran oportunidad de sentarse en el sillón presidencial y no la desaprovechó.
Tantas décadas después se puede resumir que el entonces jovencísimo y semidesconocido Ignacio Silva llegó al club y a ese alto cargo porque dio un paso al frente y se ofreció a respaldar las garantías en forma de avales bancarios que el nuevo presidente tenía que presentar para acceder al cargo. Dimitido Ramón Mendoza, Lorenzo Sanz fue inmediatamente reelegido con el apoyo de los 11 directivos que continuaban en la Junta directiva. Lorenzo e Ignacio eran socios en el negocio de la construcción y como el primero necesitaba aumentar la nómina de sus directivos para no tener que convocar elecciones, -con Mendoza se habían marchado unos cuantos- le ofreció a Silva la vicepresidencia económica. Una manera de agradecerle, además, su soporte financiero.
![Lorenzo Sanz, expresidente del Real Madrid. Efe](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202502/07/media/cortadas/lorenzo-sanz-U04283281440euJ-406x720@Relevo.jpg?cw=300&ch=533)
Ignacio Silva hizo buenas migas en el club con el vicepresidente primero, Juan Manuel Herrero y formaron un frente común contra el entonces tesorero Juan Onieva, que era realmente quien llevaba toda la actividad económica. Con el paso de los meses la convivencia comenzó a ser complicada. Volvieron a sucederse luchas internas por el poder dentro del club, situación que ya se habían vivido años antes durante el mandato de Ramón Mendoza entre el propio Lorenzo Sanz y el otro vicepresidente, Mariano Jaquotot.
Silva dimitió de su cargo varias veces, pero Sanz no le dejó marchar hasta que en junio del 97 su dimisión, en una carta que se hizo pública, fue irrevocable. Su argumento se basaba en que el presidente le había ido apartando de la gestión económica, que había recaído absolutamente en Juan Onieva, con quien no se hablaba desde hacía mesas. "Yo no soy florero en ningún sitio, así que si no colaboro, me marcho. Estoy hasta el gorro". Lorenzo zanjó el asunto reconociendo públicamente el trabajo de Onieva y rechazando la petición de casi toda su Junta de que despidiera al tesorero, o en su defecto rebajara su cuota de poder. "El Real Madrid es un club tradicionalmente presidencialista, aunque no de derecho, y el presidente cree que Onieva está haciendo una gran labor, por lo que no importa la opinión del resto de las directiva".
"Yo no soy florero en ningún sitio, así que si no colaboro, me marcho. Estoy hasta el gorro"
Desde entonces, Ignacio Silva dio un paso atrás y no volvió a aparecer en escena en nada relacionado con el Real Madrid, dedicándose pródigamente a sus empresas e inversiones. Su madridismo, eso sí, fue heredado por su hija mayor, Alejandra, actual esposa de Richard Gere. De hecho, Ignacio y el actor se conocieron en septiembre del año 2000 en Formentera donde Gere rodaba un anuncio de relojes de la marca Viceroy.El presidente entonces de esta empresa, Munreco, era Juan Palacios que había coincidido con Silva en la Junta directiva del Real Madrid. Ambos fueron vicepresidentes con Lorenzo Sanz y terminaron marchándose del club. Palacios, después, en 2006, se presentó como candidato a la presidencia del club y perdió por 246 votos ante Ramón Calderón. La duplicidad de los votos por correo le hicieron perder unas elecciones que tuvo ganadas. Gere durmió en la casa de Silva en Ibiza durante todo el rodaje.
Ya inmerso en el madridismo de la familia Silva, padre e hija, el Goya Internacional 2025 fue invitado por el club a la final de la Champions de Milan en 2016. Fue su bautizo definitivo. Viajó en el mismo avión que el equipo, acudió al entrenamiento de la víspera a San Siro y después del partido se hizo foto con la Undécima y con todos los jugadores. Desde entonces, la familia, hijos incluidos, suelen acudir al estadio de manera regular en sus largas estancias en Madrid.