La historia del Gato Romero como entrenador y su camino para ser representante: "La gente quiere matar al jeque, pero yo le estoy agradecido"
El uruguayo habla en la segunda parte su entrevista en Relevo de su faceta como representante de jugadores.

Tras la primera parte de la entrevista con Marcelo 'Gato' Romero, pasamos a la segunda donde habla más de su vida actual, de cómo es tener un hijo en la cantera del Real Madrid y de su función como representante de jugadores, qué es lo que espera de los chicos a los que gestiona y por qué fue complicado para él ser entrenador. Marcelo le agradecerá por siempre al jeque, pero entiende que es el momento de dar un paso al costado.
¿Pusiste en riesgo lo que conseguiste como jugador al ser entrenador del Málaga en un momento difícil?
No, no, son decisiones que hay que tomar. O sea, como jugador fue una etapa muy bonita y como entrenador cambia completamente. Al final como jugador eres responsable por tus actos, pero como entrenador eres responsable del de todos dentro del grupo. A mí me gustó, fue un reto muy bonito. Estuve con Javi Gracia de entrenador, con el cual aprendí muchísimo y aparte de como entrenador, como persona es bellísima, la familia es un encanto y creo que que maneja muy bien los grupos, maneja muy bien las situaciones y cosas que piensas que sabe como jugador y que lo aplicas a entrenador.
¿Cómo era Javi Gracia?
Ese hombre es un estudioso del fútbol, vive para el fútbol y lo ha demostrado. No ha llegado a muchos sitios importantes. Juande Ramos también, un entrenador más a la antigua, tomaba soluciones. Si había que tomar soluciones drásticas, las tomaba.
El jeque te da la oportunidad pero ahora la gente no lo quiere. ¿Debe dar un paso al costado?
Yo tuve la fortuna de quedarme diez partidos. Le estoy agradecido al jeque. La gente lo quiere matar, yo estoy agradecido porque fue el único que veló por mí en ese momento y que que me dio su su bendición para ser el entrenador del club. Creo que el equipo terminó jugando a otra cosa y después se salva con Míchel. ¿Es lo mejor para el club? Entonces sí. Necesita otras cosas porque al final está estancado. Está estancado porque en definitiva no avanza ni por un lado ni por otro. Porque hay dos empresas en común que son las que están, digamos, llevando la situación del Málaga en el proceso que está.
Quién tenga la razón, no lo sé, quién es dueño, no lo sé. Pero hay que tomar decisiones, Málaga es un lugar espectacular para tener un equipo en Primera, tiene afición en todas partes del mundo, pero si continúa esta situación podemos recaer porque llega un momento que jugar con esos jóvenes no te va a ayudar a mantener la categoría, porque esos jóvenes se van a querer ir. Estás jugando en cualquier momento a caer en una zona baja.
Trajiste a Demichelis y la gente te criticó en su momento.
Sí, me querían matar. Que cómo lo iba a traer si estaba retirado, no sé qué. Consideraba que para el momento que estaba el club precisaba un veterano dentro del vestuario, un profesional para esa situación y creo que acerté, tuvo muy buenos partidos, después se lesionó pero el grupo cambió. Hay que tener un respeto siempre a esos jugadores veteranos que velan por el club, Martín tiene su casa en Málaga, es un jugador referente de su época dentro del club.
¿Por qué dejaste de ser entrenador para dedicarte a otras cosas?
Esa conversación la tuve con con Javi Gracia, que me decía mira que esto es complicado, mira qué difícil esto hay otras prioridades. Tú eres muy familiar, te gusta estar con la familia, tú tienes a tu niño que está jugando al fútbol. Esto son muchas horas, esto no es tan bonito, piénsatelo. Y siempre recuerdo esas palabras porque cuando estás de entrenador tienes momentos muy bonitos en los cuales tienes que tomar muchísimas decisiones, gestionar prácticamente desde el jugador hasta hasta el club, gestionas muchas cosas.
La verdad que me gustó y me sentía preparado para continuar, pero luego ya me había pasado con mis dos niños mayores de mi primer matrimonio, que apenas los vi crecer. Mi hija tiene 23 y mi hijo 19 y no estuve en su en su infancia. Manuel cumple 16 y Elena cumple 12 y he vivido todo ese proceso al lado de ellos, no me he perdido nada y: ¿Qué cambiaría? Capaz que haber estado más tiempo con mis primeros hijos, de jugador viajaba mucho, selección, tenía que estar viajando constantemente y hoy en día pude seguir a Manuel, que está en el Real Madrid. Me voy a todos sus torneos, veo sus partidos, mi niña está jugando al voley, me voy a ver el voley, o sea, más tiempo familiar y creo que ese tiempo que se pierde es muy difícil de recuperar.
¿Por qué representante ahora? ¿Qué puedes aportar?
Bueno, estamos con mi amigo Nacho, que jugamos juntos en Uruguay, jugamos en Defensor, pensamos los dos igual, vemos que el fútbol, los chicos y acá hay un montón de representantes, pero siempre voy a lo mismo... no. Es muy bonito el fútbol, pero el fútbol realmente no. Cuando terminas tu carrera, esa es la parte que a mí me duele durante y cuando terminas la gestión, cómo se lleva. Y después, la verdad, en definitiva, el futbolista necesita estar acompañado, necesita intentar mejorar. Personalmente, hoy se ha vuelto esto económico, material y hay empresas que tienen 200 jugadores y al final tú no puedes cuidar a 200 jugadores. Entiendo que sean unas empresas muy fuertes, pero muchas veces esos chicos que están con esa ilusión por estar con empresas fuertes, en definitiva, esas empresas están ocupadas con otro tipo de jugador que son los que realmente les dan el dinero. A ti te tengo bueno, si llegas perfecto y si no te tengo ahí. Y en este caso nosotros con Nacho lo contrario: tener pocos chicos, educarlos en el aspecto profesional dentro del fútbol, darles las herramientas necesarias y comprender lo que es el fútbol realmente. Que no es que te vas a salvar con el fútbol, porque es una mentira.
¿Les dicen eso a los chicos que tienen?
Son muy pocos que llegan a jugar a alto nivel a Primera División, con lo cual, si hay una oportunidad en Perú, pues mira, te la vamos a dar en Perú. Tienes que ser consciente de que si esperas aquí en España capaz que no la hay. Capaz que la encuentras en Perú, capaz que la encuentras en Uruguay, capaz que la encuentras en Estados Unidos o capaz que la encuentras en Austria. No cerrarse solamente al fútbol español, el fútbol es mundial y nosotros vamos a intentar darle esa oportunidad a esos chicos. Con eso te digo que no queremos tener muchísimos niños porque no vamos a poder abarcarlo, pero sí estar pendiente a ese tipo de jugador.
Uno de los grandes problemas son los padres de los niños y las niñas. ¿Cómo ves este tema? Es más fácil pegarse con Zidane en un partido o ser padre de un jugador de la cantera del Real Madrid.
Bueno, depende de cómo se lleve. Yo como padre, cuando voy a ver a mi hijo o si me pongo a modo entrenador, para luego tener una charla como entrenador y como padre disfruto, disfruto. Veo a padres que se enfurecen o se enojan o no ven al entrenador o tal y es normal, es lo que suele pasar. Lo que pasa es que sí, creo yo que tienes que aparcar y al final vas a ver fútbol, vas a disfrutar. En este momento ellos están para aprender. Todavía no han generado ni han ganado nada, por más que estén en el Madrid, que estén en el Barcelona o Atlético de Madrid, los equipos más fuertes no significa que vayas a ser futbolista, lo que estás es preparándote. Prepárate que el futuro ya se verá. Pero hoy en día, no has ganado nada. Estás generando una oportunidad en el futuro, pero nada más. ¿Entonces eso por ahí es donde tienen que comprender los papás, el estar encima sin apoyarlo? Eso es malo. ¿O sea, dedícate a que el niño disfrute, que juegue y solamente nosotros en el aspecto personal, con los chicos que queremos trabajar, también vemos la parte de atrás, no la parte familiar, la parte del papá, la mamá, la parte del niño, de cómo se comporta.
¿Tienen en cuenta eso para la agencia?
No queremos chicos que la rompen, que son unos fenómenos y que por detrás va a haber un problema, porque en definitiva, eso siempre termina mal. Queremos al chico que quiere ser futbolista, sabe los pasos que tiene que dar, pero sabiendo que tengo que estudiar, me tengo que preparar porque el fútbol son tres o cuatro los que llegan. Ahora prepárate, si te gusta el fútbol, para continuar una carrera paralela o vivir de otra cosa del fútbol, o prepárate mentalmente, porque capaz que me tengo que ir a otros países que no me gustan, pero es donde está la la la oportunidad. Pero está claro que sí, que es difícil el tema entorno y padres.
¿Qué consejo le das a tu hijo que está en una de las canteras más importantes del mundo?
Como padre siempre he dicho que disfrute, que lo pase bien y que este momento es algo inolvidable, porque... ¿Cuántos niños quisieran estar en su situación? Que no se canse, que lo disfrute al máximo, porque estos son momentos, son etapas que tiene que vivir, lo cual no significa que se termine en el Madrid o se termine en en otro lado. Nosotros hemos apostado por la familia de venirnos de Málaga a Madrid para para apoyarlo. Su hermana ha ido a un colegio nuevo para esa unión familiar que necesitas en todo momento.
Pero no por el fútbol, sino porque nosotros lo precisamos como familia. No me puedo permitir a mi hijo tan lejos, nosotros en otro lado sin saber que que está pasando. Y después a nivel profesional siempre le marco lo mismo. No es lo mismo el partido que hiciste el domingo que el siguiente partido. Es totalmente diferente. Si quieres jugar pasa por el entrenamiento, se entrena como se juega y se juega como se entrena. Esa es la diferencia del fútbol. Quieres llegar a nivel profesional y ese es el camino que te puede dar el 1%, el 2% o el 3% para llegar. Los estudios, porque la mayor realidad, la de Manuel, que ha tenido una lesión, el cual te va a permitir jugar al fútbol, pero una lesión puede aparecer en cualquier momento y no te garantiza que vayas a ser futbolista por más que seas Sub 18 o 20 o estés en el Castilla o lo que sea, no significa que vayas a ser futbolista porque todo puede pasar. Los estudios priman antes que el fútbol.