El inventor del 'Youtube del fútbol' probó en el Milán y en el Real Madrid, pero una patada de Alderweireld le alejó del Atlético de Madrid

Ángel Encinar tiene 27 años y es CEO de una startup revolucionaria llamada 'Construyendo Fútbol'. De alguna manera, se mueve por el mismo terreno que maneja hoy en día Piqué en su faceta empresarial. Ha desarrollado una especie de 'Youtube del fútbol' con el que, por ejemplo, 2.500 usuarios y más de 15.000 suscriptores, en 30 países, consumen sus servicios. Las oficinas de su compañía se encuentran en Ávila y acapara premios y reconocimientos por su innovación; el año anterior estuvo seleccionado en Lanzadera, la incubadora de empresas de Juan Roig en Valencia. Si le dicen hace 10 años que iba a triunfar en el mundo del fútbol se habría imaginado como protagonista sobre el césped, y muy posiblemente con la camiseta del Atlético de Madrid. No factura aún al nivel de Piqué, pero su historia es de película...

"Llamé a mi madre y la dije que no estaba bien y necesitaba volver a casa. Quería resetear y borrar mis redes sociales. No quería saber nada del fútbol con 22 años. Tenía un círculo de amistades que estaban llegando al fútbol profesional y yo no. Lo estaba pasando mal. Ahora no pasa nada por decir que un jugador necesita ir al psicólogo. A lo mejor yo debía haberlo tratado antes con un profesional", recuerda el excompañero de los Lucas y Theo Hernández o Rodri, en las categorías inferiores del Atlético de Madrid. Decidió, en esa temporada 2019-20, dar por finiquitado sus intentos por convertirse en futbolista profesional e inició su reciclaje profesional.

"Llamé a Chuchi, mi profesor de Educación Física y entrenador del Diocesanos de Ávila, para pedirle volver al equipo de mi infancia, en Regional Preferente. No era el típico perfil de futbolista que decía 'yo voy donde haga falta para ser futbolista'. No. Necesitaba tener a mi familia cerca, avanzar con mis estudios y tenía una mentalidad que me estaba diciendo que no iba por el buen camino, porque con 22 años le estaba dando mucho al fútbol y estaba en Tercera División. Fue el año del COVID, el año del cambio de mi vida: de cabeza me hice fuerte. Me saqué 16 asignaturas de ADE y, al final de la temporada, monté unas jornadas de formación para entrenadores organizadas por mi club y se apuntaron 1.000 personas. Ahí es cuando me di cuenta de que había necesidad de formación y lanzo un programa específico para entrenadores", cuenta hoy el aún mediocentro del Diocesanos de Ávila (Tercera Federación, Grupo 8) y licenciado en ADE y con un curso de posgrado en Marketing Digital, así como profesor en la Universidad Católica de Ávila.

Se marchó con tan sólo 15 años a la residencia de la Academia rojiblanca, procedente de la Milan Academy de Ávila, una escuela que tenía el equipo rossonero en la ciudad amurallada. De ahí se nutrían muchas veces Real Madrid, Atlético de Madrid o Valladolid. Encinar fue uno de esos chavales que destacó, y mucho. Tanto que un día el Milán le dijo que fuera a probar unos días en Italia. Ese mismo verano también se entrenó unos días con el cadete del Real Madrid, con Marcos Llorente, Enzo Zidane, Lucas Torró, Franchu...

En La Fábrica no terminó de convencer y es cuando el Atlético de Madrid acometió su fichaje. "Tengo pubalgia nada más llegar porque aterrizo en un entorno profesional al que no estaba acostumbrado y me machacan las lesiones. Pero cuando acabo el primer año, en el Cadete A, el Atleti apuesta por mí y firmo por cinco años: tres de juveniles, uno en el C y otro en el B", rememora. Formaba parte de aquel apodado "Atleti de los récords" entrenado por Roberto Fresnedoso.

En su primer año de juvenil le tocó el sueño de todo canterano: subir a entrenar al primer equipo, a las órdenes del Cholo Simeone. Ángel encadenó una semana seguida de entrenamientos con los profesionales hasta que llegó una patada de Toby Alderweireld."Me hace una entrada un poco fea en un reducido y me destroza el tobillo. Mi entrenador del Juvenil A tenía dudas conmigo y esa patada acaba por cerrarme la puerta en su equipo. Inmediatamente le pedí la baja a Julián Muñoz y a Carlos Aguilera, responsables de la cantera en aquellos tiempos y que me ofrecieron irme cedido al Rayo Majadahonda. Me equivoqué al irme, porque piensas que volverás algún día, pero no vuelves. Me marché al Rayo Vallecano, rechazando una oferta del Villarreal".

Pero en el Rayo Vallecano sigue sufriendo la cara B del fútbol, con las lesiones y dos operaciones de rodilla, debido a una condromalacia de grado 4 (la misma lesión que obligó a retirar a su amigo y también abulense David Mayoral). De ahí pasó al Numancia B por recomendación expresa de Borja Jiménez al director deportivo soriano: el actual técnico del hoy todopoderoso Leganés había entrenado de pequeño a Ángel. Al acabar la temporada decidió volver al Ávila y al siguiente año fue al Zamora, donde mostró su mejor nivel y Borja Jiménez le fichó para el Rápido de Bouzas, en Segunda B. Pero sufrió un desprendimiento del hueso del pubis y volvió al dique seco. Se marchó a la Arandina y se dio su última oportunidad de dedicarse al fútbol en el Alcorcón B, donde tampoco debutó con el primer equipo y fue cuando regresó a su casa para convertirse posteriormente en empresario de éxito.

Su nuevo camino le acercó a Iván Infantes, preparador físico con el Cholo Simeone durante cinco años y también preparador suyo en juveniles, quien se convirtió en su socio cofundador y Director Académico de 'Construyendo fútbol'. Su empresa se divide actualmente en dos partes. "Por un lado tenemos contenido, a través de la app que lanzamos ahora para los jugadores, y por otro el e-learning para los entrenadores", detalla Encinar. 

"La idea surgió como una manera de democratizar el acceso a la formación. Cuando sacas los tres títulos de entrenador la pregunta es para muchos entrenadores: ¿Dónde sigues formándote? Es ahí donde sacamos nuestros contenidos distribuidos como un Power MBA; otros máster de de táctica, preparación física, fútbol base y alto rendimiento; y cursos cortos, de tres cuatro horas, en los que Paco Jémez o Quique Setién te dan una clase sobre salida de balón", destaca.

Ahora el siguiente objetivo es aumentar su comunidad de forma exponencial, no sólo con entrenadores, sino creando contenido para jugadores, entre 12 y 20 años, con el fin de que mejoren táctica, técnica y físicamente. Fue la herramienta que le faltó a él cuando militaba en la Milan Academy de Ávila...