La historia de Kiyomi Nakamura, la periodista japonesa que se derrumbó junto a Vinicius: "Estar cerca de él es especial"
Lleva cubriendo a Brasil desde 1998 y afirma en Relevo que no puede parar de llorar por el racismo al jugador del Madrid.
Las lágrimas de Vinicius en la sala de prensa de Valdebebas dieron la vuelta al mundo. Sin embargo, no sólo él lloró. Hacia la mitad de su comparecencia, el director de comunicación de la CBF le daba el turno de pregunta a Kiyomi Nakamura, una reconocida periodista en Brasil. Es japonesa y cubre a la Canarinha desde 1998. La redactora, que colabora con diferentes medios, no pudo contener el llanto.
"¿De dónde saca la fuerza?", le preguntaba con la voz quebrada tras varios segundos sin poder articular palabra. Vinicius le dedicaba una bonita sonrisa, y le animaba a continuar. "Mi familia, todas esas personas que sufren día a día... Otras personas no tienen tanta perspectiva de futuro... Me encanta estar aquí para representar a todo lo que represento, mi familia, Brasil... Sé de dónde vengo, no había tanto futuro. Ya soy un vencedor por estar donde estoy", comentaba el futbolista. Las lágrimas de Kiyomi habían aliviado las suyas.
Relevo pudo hablar con la veterana periodista durante el entrenamiento de Brasil. Expresó que siente como propia la lucha de Vinicius después de haber conocido más sobre su vida. "No podía parar de llorar. Antes del Mundial de 2022 hice varios temas sobre Vinicius, hablando con personas, yendo a lugares... Él pasó por varias dificultades y siempre se enfrenta y las supera", comentó mientras, de nuevo, se aguantaba la lágrimas, demostrando su empatía con el jugador.
"Llegó al Real Madrid y pasó, como jugador, por ese proceso de adaptación. Comenzó a jugar bien y ahora se está enfrentando al racismo. Porque tiene que enfrentarse siempre. No puedo parar de llorar porque ahora hay que apoyar. Siento orgullo de ser periodista y poder estar cerca porque él es especial", dijo.
También expresó lo que ha podido aprender del de Sao Gonçalo en este tiempo y el porqué se ha convertido en un ejemplo para ella. "Él llora en el campo porque le duele, pero se levanta. Le gritan y llora, pero pone la cabeza en su sitio. Él va a ganar culturalmente. No es fácil, pero lo hará".
Kiyomi, que ha vivido lo mejor y lo peor de Brasil en estos 26 años, se siente una brasileña más. Dice que le cuesta mucho elegir a su jugador preferido del equipo sudamericano ya que ha podido conocer a muchos. Sin embargo, recuerda con mucho cariño a la selección de 2002, la última campeona del mundo en Corea y Japón. Presenció en primera persona aquel triunfo en su país natal y terminó de enamorarse completamente de Brasil y su fútbol.
Dejó de cubrirlo por unos años, pero volvió con más ganas que nunca para dedicarse a su pasión. Ahora, sigue muy de cerca a Vinicius, pero también a Rodrygo, Endrick, Marquinhos, Alisson o Ederson. Lo sabe todo sobre la campeona del mundo y espera con ansias el Mundial de 2026, en el que espera poder ver a Vini levantando la Copa del Mundo por primera vez.