LIGA PORTUGUESA

El Benfica va en serio: ya avisó al PSG y es líder de la liga

Los de Roger Schmidt ganaron 'O Clássico' en Porto y están a un paso de clasificar a la fase final de la Champions.

Rafa Silva marcó el gol de la victoria en 'Do Dragao'. /GETTY
Rafa Silva marcó el gol de la victoria en 'Do Dragao'. GETTY
Jordi Cardero

Jordi Cardero

Con un solitario gol de Rafa Silva, el Benfica se llevó un Clássico en Porto tres años y medio después. La última vez que lo había logrado, en marzo de 2019, marcó Joao Félix, mientras que Militao, Héctor Herrera, 'Tecatito' Corona o Felipe vestían la camiseta blanquiazul. Aquella temporada el Benfica terminaría alzando su última liga. El campeonato portugués tiende a ser una competición de paso, un trampolín. A pesar de ello, Roger Schmidt, en el primer año sin Darwin Núñez, ha logrado crear un equipo capaz de plantarle cara a cualquiera. Y quién sabe si los éxitos podrán mantener el bloque.

Con la victoria en Porto, el Benfica se sitúa líder en solitario de la liga, siete puntos por encima de los dragones. En Champions, las sensaciones son incluso mejores. En la 21/22, los portugueses apearon al Barcelona en la fase de grupos y llegaron a plantarse en los cuartos de final, donde les eliminaría el Liverpool. En diciembre, la directiva despidió a Jorge Jesus y Veríssimo, desde el filial y como interino, fue el sucesor.

Roger Schmidt, en su día uno de los entrenadores con mejor perspectiva de futuro, aterrizó en Lisboa el pasado verano. Tras catapultar su carrera en Salzburg y Leverkusen, llegó a probar la experiencia asiática en China. Su último proyecto fue en Eindhoven. La temporada pasada su PSV cayó en cuartos de final ante el Leicester City. Este Benfica, no obstante, tiene los colmillos más afilados.

A pesar de compartir grupo con PSG y Juventus, los portugueses tienen un pie en la siguiente fase. Ganaron en el debut europeo ante el Maccabi Haifa, se llevaron los tres puntos de Turín y el PSG no logró ganarles en ninguno de los dos encuentros. Las sensaciones que dejó el Benfica, sobre todo en Portugal, fueron mejores que las de los parisinos. Este martes reciben a la Juventus.

En París, Joao Mario empató desde el punto de penalti. En el momento de la celebración, las cámaras se fijaron en el hijo de Schmidt, que llevaba la camiseta de Enzo Fernández. "A mi hijo le gusta Enzo, igual que a mí", comentó el entrenador. "Desde el primer entrenamiento en que lo vi parecía que llevaba varios años aquí, porque no tiene ningún problema en asumir la responsabilidad", dijo el mismo Schmidt un tiempo atrás.

Enzo es el paradigma de futbolista que intenta cultivar el Benfica. Mientras mantiene a sus talentos, trata de luchar por la liga y competir en Europa. Además, su filial se alzó campeón de la última Youth League. En esa edición destacaron, por encima del resto, dos nombres: el delantero Henrique Araújo y el central António Silva, afianzado ya en el primer equipo. Quien ha tapado la proyección del joven punta en el primer equipo ha sido Gonçalo Ramos, otro diamante en bruto. El Benfica eleva a sus jóvenes, pero también se presenta como el club de las segundas oportunidades: Joao Mario es una pieza clave y Draxler eligió Lisboa para relanzar la carrera.

La maldición Béla Guttman, que tras su despido en 1962 dijo que el Benfica no volvería a ganar un título europeo en un siglo, sobrevuela Da Luz cada vez que rueda el balón estrellado. El Porto de Mourinho fue el último equipo portugués en levantar una Champions. La Copa de Europa es, quizá, un reto de demasiada altura para este Benfica, pero ya han demostrado que es capaz de competirle a cualquiera. Ante la Juventus, la oportunidad para consolidar el proyecto de Schimdt.