El Oporto asalta Da Luz y le mete presión al Benfica

Sérgio Conceição le tiene tomada la medida al Benfica en Lisboa. Tras la victoria de hoy en la Luz, el técnico ganó por cuarta vez en seis años solo en Primeira Liga, unos números muy buenos para el portugués.

Pero es que este partido se presumía una fiesta para el Benfica, ante su gente, con la liga casi ganada (diez puntos de ventaja antes del encuentro) y pocos partidos por jugar, con la Champions en el horizonte. Pero lo que parecía todo color de rosas, no lo fue.

Porque el Oporto fue mucho mejor que el cuadro local. En el primer tiempo, pese al gol de Diogo Costa en propia puerta (tras un gran cabezazo de Ramos), el Oporto fue mejor en el inicio del encuentro y al final de la primera mitad. En el fútbol los merecimientos no cuentan, pero Mateus Uribe marcó el gol del empate en el 45' tras una gran jugada colectiva e incluso los visitantes pudieron irse al descanso con ventaja tras un gol de Otávio que el VAR anuló.

En la segunda parte, más de lo mismo. El dominio era del Oporto, pero no terminaba de cerrar el partido tras el golazo de Taremi, que ponía por delante a los dragones. Minutos más tarde, una gran contra, el mismo Taremi se fue solo contra Vlachodimos y no fue capaz de decidir en el mano a mano, tocó atrás a Zaidu y el balón salió retrasado tras un gran corte de Otamendi.

El Benfica intentaba llegar a la portería de Diogo Costa, pero sin peligro. El primer disparo entre los tres palos en la segunda parte fue en el minuto 79 de encuentro y tampoco fue muy clara, por lo que la hinchada se venía abajo. El mal partido del Benfica se puede resumir en que Joao Mario, quizá el mejor jugador de la temporada, no apareció y jugó su peor encuentro hasta ahora.

Por lo tanto, la victoria del Oporto fue merecida. Solo sufrió de verdad en los dos últimos minutos con varios balones laterales y aéreos, pero, como tal, no ha habido una ocasión de peligro del Benfica en el segundo tiempo.