Ancelotti confirma que sí vive un drama y solo tiene un plan: "Jacobo Ramón aún no está para un derbi"

Carlo Ancelotti, su hijo Davide y Francesco Mauri, asistente, pasaron por momentos de verdadero nerviosismo durante la victoria del Real Madrid en Leganés (2-3). Durante un tramo del partido las conversaciones entre los tres se convirtieron una constante, como los reproches del entrenador a los jugadores que bordearon la eliminación: la amarilla por protestar de Vinicius, un error de Güler en un cambio de orientación, un fallo en el pase de Mendy… Todas fueron motivo de enfado para el italiano. El gol final de Gonzalo le libró de un drama y calmó las aguas. Al menos, hasta el sábado.

Carletto ya sabe que sólo le queda un plan para el derbi contra el Atlético del Bernabéu (21:00). Si en la víspera del encuentro en Butarque abrió la puerta a Jacobo Ramón, al que mencionó en dos ocasiones por delante de Raúl Asencio y Tchouameni, la mala actuación del madrileño en Copa le descarta para enfrentarse a Griezmann y Julián Álvarez. El canterano debutaba de inicio (ya había jugado 20' en un choque resuelto en Champions) y pagó la sobreexcitación del estreno: perdió la mayoría de duelos con Diego García, le sobrepasaron en velocidad… y cometió el penalti que abrió el camino de la remontada para el Lega.

El míster no ocultó que tiene margen de mejora: "Ha pagado un poco el primer día con nosotros, estaba nervioso. Llegan jugadores preparados, pero obviamente les falta experiencia". Aunque Jacobo creció con los minutos y acabó el duelo más entero, su partido puso de manifiesto que todavía debe progresar en el Castilla antes de ponerse delante de toros del nivel de Atleti o City. Que acabe de salir de una espiral de lesiones musculares, como también recordó el técnico, no ayudó: "Aún le falta. Jacobo es un defensa muy bueno, contamos con él, estará con nosotros lo que queda de temporada. Y va a jugar mejor que hoy, seguro".

El vestuario arropó a Jacobo Ramón al término del encuentro porque, aunque es muy tranquilo y maduro, se le veía algo afectado. Sobre todo porque los futbolistas más jóvenes, aunque aparenten lo contrario, no son ajenos a las valoraciones de las redes sociales que inundan sus móviles. Los más veteranos tuvieron gestos de cariño con el defensa. Sin embargo, el sentir general en la caseta es claro: "Aún no está preparado para un derbi". De ahí que, sin necesidad de verbalizarlo, todos saben que Tchouameni volverá a ser central ante el Atlético.

Con el mirlo como bala en la recámara, Ancelotti se queda sin opciones y obligado a disputar el derbi con Asencio y Tchouameni como pareja de centrales. No hay otra. Si el primero ofrece ciertas garantías, tras pasar con éxito por pruebas similares como Liverpool o Bilbao y no dejar grandes lunares por el camino, el segundo se encuentra en el ojo del huracán del madridismo y sigue sin acostumbrarse a su nueva demarcación. El preparador también tuvo un mensaje para él tras pasar a semifinales: "Tchouameni aporta mucho de pivote, sobre todo a nivel defensivo. Le vi muy contento por jugar ahí, pero ya le he dicho que no esté demasiado feliz...".

Las lesiones de Militao, Rüdiger y Alaba 'obligan' a Carletto a echar mano del francés como central. Y eso, ante la movilidad de campeones del mundo como Griezmann y Julián, preocupa a más de uno. Ancelotti dejó otra pista: no juntará nunca a Valverde y Tchouameni en la línea de atrás. Con Fede como fijo en la medular, todo apunta a que Lucas superará sus molestias y partirá como lateral derecho (ojo al punzante Lino). Fran García y Mendy se disputan un puesto en el izquierdo.

En definitiva, la cita de Butarque confirmó que el Madrid sí vive en la "emergencia" que decretó el entrenador antes de la Copa y que deberá obrar otro milagro para salir vivo de lo que se avecina. Después del derbi llegarán el City (martes), la siempre engorrosa visita a Pamplona (sábado) y la vuelta contra los de Guardiola (miércoles). Sin esperar a Rüdiger hasta por lo menos el segundo partido de la Champions y sin contar con Alaba para ningún encuentro de esa serie, Asencio y Tchouameni tendrán que dar un paso al frente en un momento decisivo. Tras el Atleti les espera Haaland…

Hasta no recuperar efectivos, Ancelotti también dispone de la alternativa de utilizar a Mendy como central, algo que ha ensayado en algunos entrenamientos, y de los canteranos Jacobo y Mario Rivas, este todavía juvenil e hijo de un entrenador del Atlético de Madrid. No parece, en cualquier caso y salvo contratiempo mayor, que Ancelotti vaya a echar mano de ellos; sólo tiene un plan y en él el '35' y el '14' aparecen juntos en el eje de la zaga. Sin fichajes y con la enfermería repleta, el Madrid sueña con pasar de nuevo por encima de la desgracia y defender que, como en las últimas temporadas, la versatilidad y calidad de su plantilla valen más que salir al mercado.