REAL MADRID

Arabia insiste con Benzema… a pesar de que ya se daba por cerrada su continuidad

El delantero, que renovó hasta 2024, lleva unas semanas más introvertido de lo habitual. En el club piensan que puede estar valorando la idea de aceptar la megaoferta árabe.

Karim Benzema celebra su tanto al Rayo Vallecano, en el Bernabéu. /EP
Karim Benzema celebra su tanto al Rayo Vallecano, en el Bernabéu. EP
Sergio Santos
Alfredo Matilla

Sergio Santos y Alfredo Matilla

El futuro de Karim Benzema no está tan claro como indica su contrato. El francés renovó automáticamente hasta 2024 el pasado mes de octubre, tal y como publicó Relevo, después de ganar el Balón de Oro. Una ampliación que parecía cerrar definitivamente su continuidad en el Real Madrid. Sin embargo, el club aún no la ha confirmado oficialmente, el delantero tampoco borró las dudas cuando tuvo la oportunidad, antes de la Supercopa de España en Riad, y nadie en el vestuario se atreve a ser categórico sobre lo que sucederá.

Mucha culpa de esta incertidumbre es de la multimillonaria oferta del gobierno de Arabia (200 millones por dos temporadas) para que Karim juegue allí y, además, sea la imagen de la candidatura conjunta con Egipto y Grecia para albergar el Mundial 2030. La realidad es que Benzema lleva un tiempo bastante raro, más introvertido de lo habitual. Como capitán que es, generó desconcierto su ausencia en el Real Madrid-Getafe, donde no estuvo con el resto de la plantilla para ofrecer el título de Copa a la afición, y también a la hora de dar la cara tras la goleada del City y la eliminación en la Champions.

Esta actitud tiene al cuerpo técnico y a varios directivos desorientados y con la sospecha de que pueda estar valorando la idea de irse del Real Madrid y aceptar ese proyecto árabe que va mucho más allá del fútbol (incluye imagen, publicidad, la creación de escuelas para niños...).

Arabia, impuestos y una decisión que ha ido variando

La postura del futbolista ha ido variando a lo largo de la temporada. Renovado automáticamente después conquistar el Balón de Oro, comenzó a encadenar lesiones que le llevaron a perderse el Mundial con polémica incluida con Deschamps. Pese a los achaques, el jugador no tenía dudas... hasta que llegó la mareante propuesta de Arabia, que desveló El Mundo. Ahí apareció una tentación que pareció desvanecerse en los primeros meses del año, con actuaciones estelares como las de Anfield (doblete y asistencia), Camp Nou (hat-trick) o Stamford Bridge (gol). Su lealtad a Florentino, su deseo de irse bien del Real Madrid y una vida personal muy estable en la capital de España (está a punto de estrenar casa) también pesaban en la balanza.

No obstante, la eliminación de la Champions, los achaques físicos cada vez más frecuentes y la insistencia árabe (con el aliciente de no tener la obligación de pagar impuestos por los ingresos que genere) hacen que esté sopesando de nuevo su futuro y que en el vestuario ya no den por segura su continuidad en el Real Madrid.

En líneas generales ha sido un año extraño para el francés, que ha dejado mejores números que sensaciones (30 goles en 42 partidos). En el club blanco confían en que, con 35 años, todavía le quede otra temporada buena en las piernas, aunque con ayuda. Ya tiene subrayado el nombre de Joselu, delantero del Espanyol, para que sea un recambio de garantías y capaz de competir con el '9' madridista.

Con la temporada en su epílogo, llega el momento de arrojar luz a los asuntos que el Madrid tiene sin cerrar. Ya se han tomado algunas decisiones, como la no continuidad de Asensio o la intención de cerrar cuanto antes el fichaje de Bellingham. Pero quedan temas por sellar definitivamente: desde las renovaciones de Ceballos o Nacho al resto de fichajes, pasando por la continuidad de Benzema.