El Athletic se vuelve a pegar un tiro en el pie en su objetivo europeo

Un día más, volvió a suceder. San Mamés volvió a quedarse congelado por el enésimo tropiezo rojiblanco. Ilusionarse para morir de nuevo en la orilla. Y ya son muchas. El Athletic cayó ante el Betis ante su gente y dejó pasar la oportunidad de asaltar los puestos europeos a falta de cinco jornadas para el final de LaLiga. Mereció más, como casi siempre, pero cuando algo se repite tantas veces no hay duda de que algo no funciona, más allá de la innegable falta de pegada de este equipo. 

Con este nuevo revés, los de Ernesto Valverde quedan a cinco puntos más golaveraje del cuadro sevillano, una distancia prácticamente insalvable a estas alturas de temporada. Y lo que es peor para sus intereses, el Girona le ha dado caza y le ha superado, empujándole a la octava posición. Es decir, en estos momentos, ni siquiera una derrota de Osasuna en la final de la Copa del próximo sábado le permitiría al Athletic ocupar puestos europeos.

Una debacle, sobre todo porque en las tres últimas jornadas solo han sumado un punto ante Sevilla, Mallorca y Betis. Tres oportunidades en las que tuvieron en su mano dar caza a los de Pellegrini pero en las que siempre fallaron. De pensar en poder alcanzar a la Real Sociedad tras ganar el derbi a pelear una posible plaza de Conference ante Girona, Rayo Vallecano y Osasuna. Un golpe muy duro, pero merecido por lo visto en los momentos decisivos, para los rojiblancos.

"Hemos perdido un partido importantísimo. Es un pasa atrás. Un partido en el que teníamos puestas muchas esperanzas por lo que nos podía dar. Es algo que ya se ha repetido en más jornadas, llegamos bien a los metros finales pero nos falta concretar y es lo que nos está costando puntos", resumió Valverde en su primer análisis postpartido.

La sensación es de hartazgo en el ambiente rojiblanco. San Mamés se fue vaciando en los minutos finales, hubo murmullos en las ocasiones que se evaporaban por la falta de puntería y al final del partido ni siquiera la Grada de Animación se quedó a aplaudir al equipo como han hecho durante toda la temporada. Son demasiados disgustos en poco tiempo para un equipo que no ha sido capaz de hacerse fuerte como local.

"Nuestros números en casa no son buenos. No hay que esconderlo. Es donde estamos teniendo nuestro principal problema a la hora de poder estar en una posición mejor. No nos hacen demasiados goles pero nos hemos quedado a cero en demasiadas jornadas. No hemos conseguido resultados y goles. Es algo que nos falta y no sé si vamos a poder llegar a nuestro objetivo", reconoció el entrenador del conjunto vasco.

"Como muchas otras veces, nos ha faltado el gol", dijo Vesga en rueda de prensa tras el partido. "Quiero pensar que no nos ha pesado la presión del partido. Hacemos mucho pero la mayoría de veces nos llevamos poco. Estamos como la mayoría de aficionados, muy tristes. Era una oportunidad muy bonita y la hemos dejado pasar. Vamos a pelear a lo que queda".

Lo que queda por delante es un final de temporada menos estimulante de lo que parecía. Lo primero, aunque parezca mentira, esperar el resultado de la final de la Copa del Rey a la que no pudieron llegar. "Que gane el Real Madrid nos da un puesto más", respondió Valverde al ser preguntado por sus intereses.

Aun así, matizó que "el hecho de que haya una alternancia en los ganadores es más estimulante y creo que sería bonito para todos que gane Osasuna", pero volvió a reconocer que para el Athletic es importante que ganen los blancos, ya que la séptima plaza daría acceso a la Conference League.

Si los de Ancelotti hacen un favor al conjunto bilbaíno, quedarán por delante cinco finales para luchar con Girona y Rayo por esa posición. "No me ha dado tiempo a valorar todo eso", dijo Valverde, que avisó de que a estas alturas "todo el mundo aprieta". "Nosotros hemos estado en una buena posición en tres jornadas, hemos sacado solo un punto de nueve, perdiendo dos partidos en San Mamés. Hoy hemos dado un paso atrás, desde luego, pero quedan jornadas".