El Atlético de Madrid tiene tres días para cambiar la mentalidad y soñar en grande mientras espera a Antoine Griezmann

La temporada pasada, el Atlético de Madrid tenía que remontar un 1-0 en la vuelta de octavos de final de Champions League tras caer derrotado en Milán ante el Inter. Las sensaciones después de aquel partido no fueron buenas y unos días más tarde, el equipo viajaba a Cádiz para perder contra el equipo andaluz, que por aquel entonces estaba penando en las últimas posiciones del campeonato liguero. Ese viaje a Cádiz fue un drama, con un 2-0 para los amarillos y todo el pesimismo en la plantilla rojiblanca.

Pero el Atleti levantó el partido, le ganó al Inter en el Metropolitano y se metió en cuartos de final. La situación, de cara al miércoles, no es ni por asomo parecida a lo que se vivió la temporada pasada, cuando el equipo no estaba en el mismo estado de forma que el actual, pero sí aparecen algunas similitudes.

Cuando hay una eliminatoria de Champions, jugar el fin de semana fuera de casa siempre cuesta. No es lo más recomendable, pero a veces, como ayer, es lo que toca. Si te toca el Getafe puede sucederte lo que le ocurrió al equipo rojiblanco, pero no debería ser lo normal irse del Coliseum con sólo cuatro disparos y que uno de ellos sea entre los tres palos (el penalti de Sorloth), al igual que ocurrió otros días como los de la Real Sociedad, Benfica y PSG. Pero eso ya es historia y el miércoles hay un derbi en juego.

Lo primero y más importante es que el Atlético tiene que cambiar la mentalidad y pensar en grande si quiere tener alguna posibilidad de pasar la eliminatoria contra el Real Madrid. Lo que muchos aficionados le piden a los suyos es eso, creérselo. Por supuesto que en el Metropolitano será diferente y se vivirán momentos de mucho empuje como aquellas noches contra Barcelona, Leverkusen, City e Inter, pero son los futbolistas los que tienen que darle ese ímpetu a la gente para después poder recibirlo.

Lo segundo es que el equipo tiene que jugar mejor. Lo dijo Simeone: "No jugamos bien los primeros 70 minutos. No plasmamos lo que queríamos sobre el campo". Fueron tres veces las que hizo hincapié el técnico argentino en eso, porque si el Atleti quiere tener alguna posibilidad contra el Real Madrid en casa tiene que ser el que es capaz de competir en todas las líneas y no el que espera y las ve venir.

Contra el Madrid en el Bernabéu se vieron las dos caras de los de Simeone. El equipo que es capaz de dominar, pero también el que se mete atrás y sufre, con todo el riesgo que eso conlleva. En el Metropolitano el Atleti tendrá que buscar el término medio entre dominar al Madrid y no dejar huecos para que los delanteros blancos encuentren los espacios a la contra.

En el Atleti tienen que desnivelar los partidos los jugadores importantes, las figuras. Y hace muchos encuentros que no se ve sobre todo a uno, Antoine Griezmann. El francés está pasando el peor momento de la temporada justo cuando su equipo más lo necesita y el partido realizado ante el Madrid en el Bernabéu y ante el Getafe en el Coliseum no ilusiona a los aficionados, que ven como el francés no se acerca a lo que fue hace unos meses.

Contra el Getafe, Griezmann casi que ni apareció. Esta vez el equipo no funcionó y él no fue la excepción, pero al '7' se le piden más cosas, se le pide que se haga cargo de la situación y también que haga jugar a los suyos, que cuando el equipo no carbura él sea el que los meta en el partido. Los de Bordalás le tomaron la medida al francés, que se fue del partido con cero regates, cero duelos ganados, un remate y 14 pérdidas de balón en poco menos de 70 minutos de partido.

Otro detalle que tiene que mejorar el Atlético de Madrid es el balón parado. A 10 de marzo ya ha recibido goles claves en contra a raíz de las jugadas de tiros de esquina o libres directos con centros. Puntos que se van y eliminatorias que se complican, como el día de Leganés, Barcelona en Copa o este mismo contra el Getafe.

En pocos minutos y jugadas aisladas, al Atlético se le están yendo puntos que son clave para intentar llegar a final de temporada con opciones de algo. En eso Simeone poco puede hacer, la clave es la concentración de los jugadores y ser capaz de solventar las jugadas peligrosas con éxito.

Contra el Madrid, esto va a tener una importancia radical. El equipo de Ancelotti está mejorando en las acciones a pelota parada y ahora los rojiblancos la están sufriendo, por eso mismo cualquier despiste puede costar la eliminatoria.