Ayoze se reivindica tras dos semanas amargas y la confianza de Pellegrini
El canario rompió su sequía goleadora en LaLiga más de cinco meses después. El técnico le dio confianza pese a las críticas.
Si Mestalla acabó rendida a Isco, los goles del Betis para llevarse la victoria los anotó Ayoze Pérez. Discutido en el entorno tras una sequía que se remontaba al mes de noviembre en LaLiga, el canario se reivindicó en el momento más apropiado. Un doblete que permitió que el equipo heliopolitano recuperase la séptima plaza e incluso dependa de sí mismo para optar a la sexta, después del empate de la Real Sociedad ante el Getafe.
No habían sido semanas sencillas para Ayoze, al que le había costado recuperar su mejor nivel tras la grave lesión de tobillo que sufrió el pasado mes de enero. La dura entrada de Bruno Méndez lo tuvo mes y medio apartado de los terrenos de juego y, además, la reaparición tampoco había sido fácil para el canario. De hecho, en los dos últimos partido fue de los primeros cambios realizados por Pellegrini, lo que incluso lo puso en el foco de las críticas, aunque el entrenador sí le mantuvola confianza tanto de palabra como con los hechos.
Suplente ante Atlético de Madrid y Villarreal, no sería hasta el partido ante el Rayo Vallecano cuando Pellegrini lo colocase nuevamente como titular. La paupérrima actuación del Betis en Vallecas provocó que el entrenador chileno empezase a realizar pruebas para buscar una reacción. Con Ayoze a un nivel por debajo del esperado, Pellegrini lo sustituyó en el 62' ante el Girona, cuando el partido todavía reflejaba un empate, y en el descanso ante el Celta. El buen segundo tiempo del cuadro heliopolitano ante los vigueses, sin Ayoze sobre el césped, hizo especular con una posible suplencia del atacante en Mestalla, pero finalmente Pellegrini optó por seguir confiando en uno de sus futbolistas predilectos.
Durante la semana, el entrenador chileno probó con Fekir como posible novedad en el once, después de que el francés marcase ante el Celta. La luz verde de Isco a salir desde el inicio, después de que arrastrase molestias musculares, provocó que Pellegrini tuviera que optar entre Fekir o Ayoze para acompañar al malagueño y Fornals en la línea de tres por detrás de Bakambu. Las conversaciones de Pellegrini con el canario y la actitud de éste durante la semana, con un magnífico trabajo en los entrenamientos, llevaron al entrenador a seguir confiando en él para esa final en Mestalla.
La celebración del primer gol, tras un magnífico recorte y disparo con la derecha, le sirvió para sacarse toda la rabia acumulada en las últimas semanas. Ni Pellegrini ni él mismo han dudado nunca de su nivel, pero necesitaba Ayoze reivindicarse y lo hizo en el momento preciso y en el mejor escenario. Su acción del segundo tanto, con la suerte del rebote en el remate final, ya exhibió a ese futbolista desequilibrante al que le gusta partir desde la izquierda hacia dentro. "En el segundo tuve un poco de fortuna, a veces es bueno que esté a favor y que ese rebote acabase dentro. En el primero, Isco me vio perfectamente. Como soy jugador de área me pude desenvolver bien para culminarla", apuntó Ayoze sobre esas dos acciones que le devolvieron la sonrisa.
La vista en el derbi
La segunda victoria seguida, y en uno de los mejores partidos de la temporada, recuperó el buen ambiente para el vestuario, que encara la semana del derbi con una motivación añadida. "Jugamos en casa y después de hacer un gran encuentro. Estamos en un buen momento y esperamos seguir con esta dinámica. Tenemos que apretar y meter presión a nuestros rivales", apuntó Ayoze, quien, precisamente, fue uno de los protagonistas del derbi de la primera vuelta cuando anotó el gol bético, el último en su cuenta antes del doblete de Mestalla.