El balance policial del derbi: tres ultras detenidos y otros 178 identificados con bates de béisbol y armas blancas
Las fuerzas de seguridad han informado de las actuaciones que evitaron "graves incidentes" en las horas previas al partido.

Tres aficionados ultras detenidos, dos por atentado a agentes de la autoridad y uno por tráfico de drogas, y otros 178 radicales de Betis y Sevilla identificados, y que portaban efectos prohibidos, ha sido el balance realizado por la Policía Nacional tras el derbi. Las fuerzas de seguridad habían preparado un amplio dispositivo, que ha contado con la intervención de más de 400 agentes, para evitar incidentes con motivo del derbi entre Betis y Sevilla que se disputó el domingo en el Benito Villamarín.
La Policía no sólo centró sus actuaciones en la jornada del domingo sino que el dispositivo se había iniciado ya con horas de antelación, con lo que pudieron evitar que pudieran producirse "graves incidentes" en los días previos al encuentro y también justo antes de la celebración del mismo en el estadio heliopolitano. En las actuaciones policiales contra los grupos de ultras de ambos equipos se intervinieron bates de béisbol, palos, dos armas blancas y pasamontañas, entre otros elementos de los que se deducía la intención de que se produjeran enfrentamientos.
Concretamente, según el comunicado policial, en la noche del pasado viernes, los agentes identificaron a 75 miembros del grupo radical "Supporters", afín al Betis, cuando se congregaban en la calle Victoria Domínguez Cerrato, cercana al Villamarín, y les aprehendieron cuatro bates de béisbol -uno de ellos metálico-, pasamontañas y otros elementos.
Esa misma noche, la Policía interceptó a 17 integrantes del grupo sevillista "Biris Norte" a bordo de cuatro vehículos y que llevaban un bote de pintura con el que, al parecer, habían realizado pintadas en las cercanías del estadio del Betis, así como en otro coche a dos ultras béticos de "United Familily", una escisión de los "Supporters", en la avenida Reina Mercedes, interviniéndole a uno de ellos una navaja tipo mariposa de 23 centímetros y un destornillador.
El sábado por la noche fueron identificados 70 miembros de "Biris Norte" en otra zona de la capital andaluza, en una actuación en la que los agentes se incautaron de "19 sotocascos (pasamontañas), 6 palos, un cinturón con una cuchilla, 2 destornilladores, un arma blanca, 7 guantes antitrauma y pegatinas identificativas" de este grupo, precisa la nota policial. Posteriormente, este mismo grupo, al que se le habían sumado otros catorce componentes, fue localizado en la calle Peñarroya, ya en el entorno del Benito Villamarín, y trató de huir al percatarse de la presencia policial, aunque la mayoría pudieron ser retenidos.
En ese momento, según el comunicado, "uno de los ultras comenzó a agredir mediante empujones y puñetazos a uno de los policías", por lo que fue detenido por atentado a agente de la autoridad, mientras que otro fue arrestado por tráfico de drogas al serle intervenidas trece papelinas de cocaína supuestamente preparadas para su venta y dinero en efectivo.
La tercera detención fue el mismo domingo por atentado a agente de la autoridad, antes del comienzo del derbi y en el momento en el que los aficionados sevillistas eran escoltados hasta el estadio del Betis, cuando un hincha bético que desobedeció reiteradamente las instrucciones policiales para que no traspasase el cordón dispuesto y golpeó "con ambos brazos la barbilla de uno de los policías".
Además de resaltar el buen funcionamiento de las distintas medidas preventivas desarrolladas, que son habituales en estos planes de seguridad, la Policía Nacional aseguró que, "una vez más", este dispositivo, con unos 400 agentes participantes, "demostró su eficacia y evitó que se produjesen graves incidentes de orden público generados por los seguidores ultras de ambos equipos".