El Betis tenía marcado el derbi en su calendario. Casi siete años sin ganar en LaLiga al Sevilla, con una racha histórica de 12 partidos seguidos, eran demasiados. "Teníamos una deuda pendiente", reconoció el propio Manuel Pellegrini, poco dado a ese tipo de expresiones, pero que admitía esa obligación con el hincha bético. La respuesta final llegó sobre el césped, donde hoy por hoy existen grandes diferencias entre ambos equipos, aunque también se fraguó de manera interna.
"Estamos haciendo la autocrítica necesaria", dijo el presidente, Ángel Haro, tras el derbi de la primera vuelta en Nervión. Aquella derrota dolió sobremanera en las entrañas de Heliópolis, donde se propusieron que todos tenían que remar para que las sensaciones fueran distintas en Heliópolis. Sí, lo más importante es contar con este Isco Alarcón al mando de las operaciones como mano derecha de Pellegrini, pero desde el club todos han ido sumando su granito de arena para que el Benito Villamarín fuera ante el Sevilla una caldera como la de las grandes noches.
Pellegrini habla sobre Antony e Isco. LaLiga
Los dirigentes, con Haro y José Miguel López Catalán han encabezado casi cada acción del club en una semana que ya venía dejando un aroma diferente en Heliópolis. Junto al cuerpo técnico, incluso venciendo las reticencias de Pellegrini, que siempre maneja su propio libro de estilo, pero poniendo orden para que el estadio heliopolitano registrase la mejor entrada de su historia. 58.538 espectadores para un duelo de rivalidad, en el que, salvo algún incidente que no pasó a mayores, todo se vivió como una fiesta del fútbol. Encima de la plantilla, a la que también motivaron de cara a una final de temporada que ha disparado la ilusión en verdiblanco.
También tiene su cuota la dirección deportiva, con Manu Fajardo y Álvaro Ladrón de Guevara a la cabeza. Si el regreso de Isco le ha otorgado a Pellegrini a su mariscal sobre el campo, el club enmendó los errores del verano con los fichajes de Antony y Cucho Hernández, dos jugadores que han elevado el nivel del ataque bético. Dos apuestas del mercado invernal que le están dando un salto de calidad al Betis en esa zona donde pasó apuros en el inicio de la temporada. A ellos se le suma Jesús Rodríguez, por quien también apostaron los técnicos y que se ha consolidado dentro de ese cuarteto que le ha cambiado la cara al equipo verdiblanco.
Una histórica racha de seis victorias seguidas en LaLiga, más las dos clasificaciones en la Conference League, han revitalizado al Betis, que sueña con la Liga de Campeones y con superar su registro en las competiciones continentales. Un final de temporada sobre las espaldas de Isco Alarcón, el mejor ejemplo de ambición de ese vestuario que en el derbi se sacó una espina clavada. Fue el gran derbi de todo el Betis, el que necesitaba para doblegar la resistencia de ese Sevilla que siempre vende cara su piel en Heliópolis. El que dispara la ilusión de los béticos, que celebraron la victoria como preludio de lo que sueñan que está por venir.
