FC BARCELONA
El Barça vuelve a sus orígenes: La Masia será su columna vertebral
La intención del club es construir proyectos sobre los hombros de los jóvenes y apuntalarlo con talento diferencial de fuera.
Xavi Simons se quedó muy cerquita de llevar a Países Bajos a la final de la Eurocopa. Marc Cucurella se ha convertido en un futbolista de culto. Alejandro Grimaldo, una de las sensaciones durante la temporada, no ha tenido oportunidades. Fermín, aun poca presencia, es un buen comodín para De la Fuente. Y luego está Lamine, sobre el que no hace falta decir gran cosa. La Masia ha dejado su firma en esta Eurocopa. Y el Barça toma nota.
"Tuvimos el mejor equipo del mundo hecho en La Masia", recuerdan todavía hoy desde el club. La base se recita sola: Messi, Xavi, Iniesta, Piqué, Puyol, Busquets… Al primer gran Barça de Guardiola solo le hizo falta añadir complementos, como Henry o Dani Alves, para cerrar un once ideal. Ahora la idea vuelve a ser la misma: que la cantera sea la columna vertebral de los siguientes años.
No solo por motivos económicos, con el club recuperándose poco a poco, sino porque en lo deportivo todos los canteranos están dando la talla. "Ahora la idea es construir con Lamine, Cubarsí, Gavi…", señalan. Los de casa serán la base y se ficharán jugadores diferenciales. En este decorado sí aparecería el nombre de Nico Williams, el gran anhelo de Joan Laporta. Un perfil distinto, de los que no hay en casa, y que supondría un salto automático de calidad.
El primer Barça de Guardiola, un buen espejo
La temporada 2008/09 puede servir como espejo. No en lo deportivo -los resultados o el juego- sino en el cambio generacional que impulsó Guardiola. La columna vertebral estaba definida por Valdés (27 años), Puyol (31), un Piqué recién llegado (22), Alves (26), Abidal (29), Busquets (20), Xavi (29), Iniesta (25), Messi (22), Eto'o (28) y Henry (31). Además de complementos habituales como Márquez (30), Yaya Touré (26), Bojan (18) o Pedro (21).
A diferencia del primerizo Barça de Pep, en este de Flick parte de las bases descansan sobre adolescentes. Sobre futbolistas que no llegan a los 20 años y que, además, ya tienen como mínimo un año de experiencia en la élite. Es el caso de Cubarsí (17), Balde (20), Gavi (19), Pedri (21), Fermín (21), Casadó (20), Lamine (17) o Ansu (21). Nico Williams tiene 21. Jóvenes y de la casa, más los Araujo (25), Vitor Roque (19) o Ferran (24).
No se repetirán movimientos como los de Coutinho o Dembélé, la réplica a la salida de Neymar que tantos males desencadenó. Directivos de aquella época todavía recuerdan que la "obsesión" de Bartomeu por alcanzar los 1000 millones de ingresos por temporada le llevaron a hacer los dos fichajes de un porrazo. La economía actual obliga a hacer movimientos más calculados y a virar la hoja de ruta.
El Barça quiere que La Masia vuelva a ser el eje de los proyectos. Hacer crecer una base que ya es suficientemente sólida y ampliable con los Héctor Fort, Marc Bernal o Guille Fernández de cara a un futuro, si el contexto convierte en propicio el tener que tirar de la cantera. De fuera llegará el talento que no se haya podido cultivar en casa. La Masia marca el camino con la Eurocopa como ejemplo.