El Betis de Pellegrini revive en LaLiga y desquicia al Athletic

El Betis de Manuel Pellegrini sigue muy vivo. Ya lo demostraron los béticos con esos cánticos de apoyo al entrenador antes de comenzar el partido, pero también el equipo sobre el césped. Pasando por encima del Athletic, uno de los equipos más poderosos de la competición, al que minimizó e incluso sacó de sus casillas; y anotando goles de bella factura para lograr una victoria balsámica, que despeja dudas y deja nuevamente a los verdiblancos en la sexta plaza. Contragolpes perfectos para los tantos de Chimy Ávila y Yuri, en propia puerta, o un golazo de Johnny Cardoso para sentenciar el duelo.

Ernesto Valverde seguro que no querrá excusas pero su equipo estuvo desconocido, como si esa vuelta ante el Atlético de Madrid en la Copa del Rey ocupase más espacio del debido en la cabeza de sus futbolistas. Si a eso se le añade la chiquillada de Nico Williams, quien ya con 2-0 en el marcador dejó a su equipo con diez tras sus reiteradas protestas a Cuadra Fernández, el borrón del Athletic fue completo. Ni siquiera su buena actitud tras el intermedio sirvió para aprobar al equipo vizcaíno, que sufrió ante el Betis su propia medicina.

El Betis tenía muy claro su plan de partido. Con un punto de intensidad que se le había echado de menos en los últimos encuentros -sobre todo la eliminatoria europea ante el Dinamo Zagreb-, los heliopolitanos eran un equipo solidario, que cerraba líneas por dentro y que, además, atacaba con mucha velocidad. Nada de balones al pie y sí al espacio, donde los atacantes béticos aprovecharon los espacios que dejó la adelantada defensa del Athletic, que no entendió el partido que le planteaban los de Manuel Pellegrini.

Con esas premisas llegaría el 1-0. Recuperación por dentro y pase al espacio de Johnny Cardoso hacia Willian José, que había lanzado su desmarque por la banda derecha. El brasileño, casi sin mirar, metió un centro medido hacia el ala contraria donde apareció Chimy Ávila para cumplir con esa misión que le había encomendado Pellegrini de aparecer como delantero aunque partiera desde la izquierda. El argentino no perdonó y superó a Unai Simón con un remate raso para desatar la locura en el Benito Villamarín. La celebración, por todo lo alto, acabó en accidente, con el choque de la asistente Guadalupe Porras con una cámara de televisión y teniendo que sustituirla el cuarto árbitro en sus labores.

El gol no alteró el guión pero sí reforzó el mensaje de Pellegrini. La grada, que había recibido al equipo de uñas en el calentamiento pero sí al grito de "Manuel Pellegrini" en el inicio del partido, también se conectó pese a la desapacible tarde sevillana de lluvia y viento. El Athletic, desconocido y pareciendo más pendiente del duelo copero del jueves, seguía sin enterarse y así encajaría el 2-0. Otra acción rápida de los verdiblancos finalizó con un centro de Fekir y un remate de Willian José en boca de gol, al que sí respondió Unai Simón con tan mala fortuna que el rechace golpeó en Yuri para acabar en la red.

La fiesta era completa en el Villamarín, que incluso celebraría la expulsión de Nico Williams. El pequeño de la saga, titular mientras su hermano aguardaba en el banquillo, protestó al árbitro la amonestación recibida tras una falta sobre Fekir -y también otra jugada anterior en la cabeza justo antes del 2-0-. Cuadra Fernández no toleró las protestas del internacional, al que envió a la caseta entre los lamentos de Valverde. Con todo, el Athletic encontraría un resquicio en la última acción del primer tiempo. Guruzeta enganchó un testarazo perfecto tras el saque de esquina de Berenguer y así al menos llegó al intermedio con vida.

Con el marcador ajustado, incertidumbre le daba emoción al partido. Y también esperanzas al Athletic, que hasta dispuso de una clara ocasión en un disparo de Berenguer, de esos marca de la casa, que se marchó junto al poste izquierdo de Rui Silva. Pero Pellegrini no quería sorpresas. Primero, envió al Chimy, que tenía tarjeta amarilla, al banquillo para evitar problemas, e introdujo a Rodri para manejar la posesión. Y el Betis, con muchos espacios, se empezó a sentir cómodo hasta que el gol de Johnny Cardoso, con un gran golpeo con la derecha desde la frontal, puso el tercero y una distancia ya insalvable.

La fiesta en Heliópolis ya era absoluta. Con ovaciones para Aitor Ruibal, tras el susto de su esguince de tobillo, o para Nabil Fekir, el último en irse al banquillo entre los aplausos de la grada. El Betis de Pellegrini quiere repetir clasificación europea en esa pugna que mantiene con la Real Sociedad y en la que también quiere apuntar hacia el Athletic, un equipo casi desaparecido en el Villamarín pero que el jueves tendrá otra de esas noches grandes en San Mamés.

Betis: Rui Silva; A. Ruibal (Bellerín, min 71'), Pezzella, Chadi Riad, Sabaly; Johnny Cardoso, Altimira (William Carvalho, min 45'); Fornals, Fekir (assane DIao, min 84'), Chimy Ávila (Rodri, min 51'); y Willian José.

Athletic: Unai Simón; De Marcos, Vivian, Paredes (Unai Vesga, min 71'), Yuri (Imanol, min 45+4'); Prados (Dani García, min 59'), Galarreta (Unai Gómez, min 59'); 🟥 Nico Williams, Sancet (Iñaki Williams, min 45'), Berenguer; y Guruzeta.

Tarjetas: 🟨 Chimy (min 29'), Yuri (min 31'), Berenguer (min 40'), Imanol (min 58') 🟥 Nico Williams (min 39')

Goles: Chimy (min 11'), Yuri (p.p, min 38'), Guruzeta (min 45+7'), Johnny (min 67')