Camavinga enamora en su posición y abre el debate con Tchouameni
El futbolista francés brilló como mediocentro único en su partido contra el Celta.

La victoria plácida del Real Madrid contra el Celta de Vigo dejó dos noticias inesperadas al término del encuentro. Una justo al final, con el debut goleador de Arda Güler, y la otra unos minutos después del choque, con la decisión de Brahim de jugar con la selección de Marruecos. Al preguntar en el club blanco tras el partido, ni Güler ni Brahim, desde Chamartín te hablaban de la actuación de Camavinga.
Varios trabajadores del Real Madrid coincidían al hablar del futbolista francés: "Es el mediocentro más completo del mundo". Contra el Celta demostró todas sus cualidades, desde su posición favorita y en la que no puede jugar todo lo que le gustaría. De mediocentro único, con espacio para moverse a su antojo.
"El partido de Camavinga ha sido muy bueno, en la posición que a él le gusta más, en el pivote. Sufrió más contra el Leipzig, de interior. Hoy se ha encontrado más cómodo en la posición y yo lo sé, pero a veces las necesidades del equipo le llevan a tener que jugar de interior...", comentó Ancelotti en rueda de prensa.
Camavinga ha sido utilizado como 'chico para todo' por el técnico italiano. Lateral izquierdo, interior y también como pivote. Casi siempre, el galo rinde a gran nivel, destacando más en el carril zurdo y como mediocentro único. Por su calidad técnica y física, el staff de Carlo Ancelotti decide usar a Camavinga como multiusos.
La posición de Camavinga abre el debate con Tchouameni
En el partido contra el Celta quedó claro que la demarcación que más beneficia a Camavinga es la de pivote (mediocentro único). Ni interior ni lateral izquierdo. Con espacio para moverse libremente y con el recorrido natural de su físico: capaz de correr hacia delante y también hacia atrás.
Ante el cuadro gallego completó 58/63 pases precisos, remató cinco veces, tres de ellas a puerta, ganó siete duelos y todos sus lances aéreos. Un partido redondo. Con Tchouameni desde el banquillo. A Camavinga se le vio más cómodo sin el acompañamiento de Toni Kroos y Aurelien.
Y con ello hay un problema, porque Tchouameni y Kroos son intocables para Ancelotti. El francés procedente del Mónaco es el favorito del entrenador para jugar de pivote, y eso desplaza a Camavinga a otra posición, donde no rinde de la misma manera. Y el encuentro ante el Celta abre un debate: reubicar los roles de los dos centrocampistas galos, probando a Tchouameni como interior, o seguir renunciando a la mejor versión de Camavinga.